Capítulo 3 - Sensaciones

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Lo primero que pasa por la mente de Becky es que debe ser alguna broma de mal gusto y pasa los siguientes minutos sentada con los ojos pegados al teléfono mientras relee el correo electrónico una y otra vez, no puede creer que no se diera cuenta que la estaban siguiendo y al analizar el correo más a fondo se da cuenta que el remitente es anónimo pero su instinto empieza a sacar sospechosos.

Becky sabe que su doble vida acabaría explotándole en la cara pero no pensaba que sería tan pronto, mirando alrededor de la habitación a la tenue luz de la noche, se pregunta cómo se sentiría Sam si ella saliera corriendo pero sabe que no puede arriesgarse a que esa situación llegue a su familia, la destruiría antes de tener la oportunidad de defenderse.

Con las maletas apenas deshechas, la enfermera vuelve a cerrarlas y sale apresuradamente de la habitación, baja las escaleras de puntillas y se dirige a la puerta principal pero antes de que pueda girar la cerradura de la puerta, una voz aparece detrás de ella.

"Vas a algún sitio?" Sam la mira en la oscuridad, sus ojos reflejando tristeza.

Becky se gira y ve a su amante detrás con los brazos cruzados sobre el pecho y apoyada en la puerta, mira la maleta en sus manos y luego vuelve a mirarla a los ojos.

"Y bien?"

La chica pequeña no sabe que decir, se suponía que no debía verla salir "oh, yo estaba... me sentía un poco claustrofóbica, necesitaba salir" tartamudea mientras la mentira se le escapa de la lengua casi sin esfuerzo pero Sam no se deja engañar fácilmente, pasan unos instantes de silencio mientras las dos intercambian miradas desprovistas del magnetismo que compartían antes.

"Hice algo para que te sintieras incómoda?" Dice Sam en un susurro, la chica mayor no suele ser de las que se cuestionan a sí mismas y la culpa de preocuparla de esa manera empieza a invadirla.

"NO! no tiene nada que ver contigo... todo esto fue un error" el rostro de Sam se entristece aún más y Becky no puede evitar querer acercarse y ofrecerle consuelo "todo esto... esto no es lo que soy"

"Claro que si, esta es la persona que he pasado el último año conociendo"

"La persona con la que has estado saliendo el último año no soy yo, Sam" responde Becky " Mon y yo somos dos personas diferentes, ella es capaz de sacrificar su paz en pos de lo que la hace feliz, no puedo seguir traicionando así la confianza de mi madre, no puedo seguir siendo una mentirosa con una doble vida"

"No eres una mentirosa" Sam da un paso adelante y acorta la distancia entre las dos "no todo el mundo tiene el privilegio de vivir su vida como quiere, no debes sentirte culpable por perseguir la felicidad, es lo único que cualquiera quiere en esta vida"

"Mi felicidad no debería ser acosta de perder a mi madre... no puedo poner en riesgo así mi relación con ella"

"De dónde viene todo esto?" Sam le pone una mano en la mejilla y la frota suavemente la comisura de la mandíbula con un movimiento lento y reconfortante, cerrando los ojos, Becky intenta grabar en su mente la sensación de su tacto para llevarla consigo en los momentos en que no esté a su lado, la chica pequeña pone una mano encima de la de ella, manteniéndola en su sitio.

"Háblame cariño, dime lo que piensas" Becky se plante la posibilidad de ceder y responder a sus preguntas, por un lado sería un alivio poder compartir las cuestiones que pesan en su corazón con alguien más, por otro existe la posibilidad de que Sam reconsidere si vale la pena o no.

"No puedo"

"Y porque no?"

La enfermera aparta la vista de su ama y mira al suelo, mordiéndose el labio pensativa.

Escapando con ella - FreenBeckyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora