❛❛ ALEJATE ❞
La tarde cayó rápido en Alexandria, después de regresar de la lección improvisada de Abraham volvimos a la comunidad, fui regañada por mama Rosita. Creo que Carol no le dijo lo que prometió así que me tuve que tragar el sermón y limitarme a asentir.
Todo iba bien ese día, tuve un lindo momento con la zanahoria, no se me cruzo Enid por la cabeza, comí galletas y el cielo se tornaba gris, estaba nublado y los mejores días son con lluvia.
Iba caminando hacia el pequeño parque dentro de Alexandria, tenía puestos mis auriculares tarareando la melodía de "Heaven Knows I'm Miserable Now" hasta que vi a Violet en el columpio de madera, de espaldas leyendo un libro que reconocí inmediatamente.
- ¿Carrie? ¿Recordando viejos tiempos? - pregunto, retirando los auriculares de mis orejas y pausando la canción.
- Me gustaba que me lo leyeras debajo de las sábanas y en voz baja. Daba más terror que mamá nos descubriera que la misma historia - sonreía mientras hojeaba la página.
- A mí me gustaba que mamá me retara, era la única manera de ganarme su atención. ¿Dónde conseguiste el libro?
- Es el que nos dio la tía Lucy, sigue la nota que nos dejó, mira - dijo emocionada mostrándome la contraportada con la nota en tinta negra y algo quemada, "Para mis únicas y favoritas sobrinas, con amor, sus padres postizos, Lucy y Dean". - Tiempo después de que me cayera por aquel acantilado, te busque por todas partes junto con perro. Caminamos millones de kilómetros y de casualidad encontré la casa de tía Lucy. Estaba completamente incendiada, el libro estaba en el jardín un poco quemado, pero sobrevivió y aquí está.
- ¿Qué pasó con Perro? Si quieres contarme, claro. - esperaba que esa pregunta no causara malos recuerdos.
- Luego de explorar medio mundo junto a él, nos encontramos a Rick en Atlanta. Después encontramos, o bueno, nos encontró Glenn. Nos llevó junto con su grupo y... muchos fueron infectados y murieron con forme pasaba el tiempo. - sus ojos se cristalizaban mientras relataba - Después encontramos a Maggie, que nos ayudó junto con su familia y nos resguardaron en su casa, ocurrieron situaciones que al final tuvimos que buscar otro lugar y nos encontramos con una prisión, después valió corneta y Perro murió salvándome de los caminantes.
No me contuve, sabía que Violet me odiaba o simplemente no le gustaba mi presencia, sin embargo, sentí el impulso de abrazarla, no correspondió, solo comenzaba a sollozar en mi hombro.
- Lo siento tanto, estrellita. También te busque por todas partes, al bajar al acantilado me encontré con un charco de sangre, de verdad esperaba que no fuera tuyo, pero nunca te encontré, no había señales de ti. Perdóname, eras mi responsabilidad. - ella seguía sin corresponder el abrazo, incluso me alejo.
- Sí, pero gracias a tu descuido, encontré a mi verdadera familia. Y fue lo mejor que me pasó. Así que te pido que te alejes de mí, de Glenn, Rick, Daryl, Maggie y, sobre todo de Carl - las lágrimas amenazaban con salir, sabía perfectamente que la culpa era mía.
- Si eso te hace feliz, lo hare. Solo quiero que sepas que al final de todo, te considero mi hermanita, y te amo más que nada. Ojalá algún día puedas perdonarme y siempre estaré para ti mientras viva - limpie la lagrima de su mejilla sonriéndole y me levante para irme con el corazón echo bolita y totalmente destruido.
Me dirigía a la casa cabizbaja conteniendo el llanto para descargarlo en la ducha.
- ¡Alaska! Por fin te encuentro. ¿Quieres ir al bosque? - levante la cabeza para mirar a Enid, su semblante paso a rostro de preocupación - ¿Estas bien? - asentí y tomo mi mano y con la otra abrir la puerta - Hola, Rosita. Hola, Abraham - saludo y subió corriendo las escaleras con mi mano aun en su agarre y llevándome a mi habitación.
- Te agradezco, Enid, pero no tengo ánimos de hablar.
- Bueno, entonces no hablemos - me empujo a la cama, puse cara de horror causando su carcajada - Tranquila, no hare nada que no quieras. - aseguró y se acostó a lado de mí, se acomodó y puso mi cabeza arriba de su pecho, paso su mano por detrás de mi cuello, paso su otra mano por mi cabello. Pase mi mano libre por su cintura, hundiéndonos en un abrazo.
Sus dedos empezaron a juguetear con mi cabello, haciendo pequeños masajes y con su otra mano moviéndose de arriba a abajo en mi espalda en forma de confortamiento. Escuchaba sus latidos y ella mis sollozos silenciosos. La habitación estaba en completo silencio que un alfiler podría romperlo.
- ¿Aun no quieres hablar? - moví mi cabeza de izquierda a derecha, no podía decir una palabra sin soltar un sollozo - Está bien, cuando quieras estaré para escucharte, Bonita.
Giré mi cabeza hacia atrás logrando mirarla, mis ojos estaban húmedos, mi cabeza confundida y mi corazón dolido y, aun así, pude dedicarle una sonrisa corta pero genuina para después volver a mi posición original y volver a escuchar sus latidos - Gracias.
En algún momento caí dormida que Rosita me despertó para cenar. Enid ya no estaba, como la primera vez sin embargo ahora si recordaba que pasó.
- ¿En qué momento se fue Enid? -pregunte tallándome los ojos, los sentía hinchados y estaba segura de que parecen dos tomates.
- No lo sé, cariño. Pensé que aún estaban las dos.
Voltee a ver la ventana, estaba abierta. Sonreí y me levanté de la cama para bajar a cenar no sin antes que Rosita me detuviera.
- No voy a preguntar por lo que tengan ustedes dos. Pero si quiero preguntar porque ella si nos saludó y tu solo estabas cabizbaja.
- Violet me odia - dije en sollozo de nuevo.
Rosita no se lo esperaba para nada, solo me tomo de los hombros y me abrazo hasta que me calmara de nuevo acariciando mi cabello como lo hizo Enid horas antes.
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CONSTELLATIONS,, Enid Rhee
Teen Fiction𝐂 | ❛ Now it's his world, we just invade it ❜ Dos chicas, una fantica de los cómics, otra de las constelaciones y un mundo hecho mierda ❛-Ojála no hubieras pasado nunca❜ ❛-Ojála me hubiese quedado❜