1

11 2 0
                                    


Era el día.

Suspiré. Esa mañana se supondría que iría al centro comercial con mis amigas, pero justo cuando salí de mi casa, sentí como algo se derramaba desde la parte inferior de mi cuerpo. Supe lo que era, de nuevo, ya estaba en mis días. De mala gana entré a casa de nuevo y me dirigí a mi solitaria habitación. Había perdido una oportunidad para salir a la calle y poder socializar un poco con mis amigas... De nuevo. No podía hacer nada, ni siquiera cambiarme serviría, cuando estoy así, suelto más sangre de lo normal y me volvería a manchar si es que no estoy sentada o tumbada todo el tiempo. Perdí las ganas de ponerme ropa limpia, estaba demasiado desanimada para hacerlo, solo me limité a tumbarme en la cama y mirar al techo. Agarre mi teléfono del bolsillo y le expliqué lo sucedido en un texto a mi amiga, esperando que pudiese entenderlo por una vez, luego pensé en distraerme jugando algo online, realmente no quería perder la oportunidad de socializar ese día.

Lo conocí a él, un chico encantador y amable... su corazón estaba tan lleno de bondad, que ni siquiera pensé en que era alguien de internet.

No dudé en pedirle su número, pero él se negó, diciendo que era algo muy privado para él, sin rendirme, le empecé a insistir y conseguí su número, esto me ilusionó, me ilusionó y mucho. Mi mente no pudo evitar imaginarse miles de escenarios de lo que pasaría con nosotros al final, me amaría? terminaríamos casándonos viviendo en una hermosa casa con jardín y adoptaríamos un gato? el gato podría llamarse-

No, basta María, solo es una persona de internet, no lo conoces, no sabes su edad...

Sin embargo, lo sabré pronto...

Le escribí con entusiasmo, solo fue un simple hola con una carita tonta, lo envié y me empezó a dar algo de vergüenza mi estado actual... con mi falda manchada de sangre, que pensaría él si me viera así? Rápidamente, me cambié mientras esperaba su mensaje.

Al regresar con una falda limpia y sencilla, pero a la vez bonita, la paz e ilusión volvieron a estar en mi, agarre mi teléfono y vi su mensaje.

-Hola-

Me decepcionó un poco, pensando que estaba siendo seco a propósito, no pude evitar esos pensamientos ya que mi experiencia hablando con chicos nunca fue muy buena que digamos, los chicos de mis clases o de la calle siempre fueron vulgares, irrespetuosos y rudos, tenía miedo de que este caso no fuera distinto. Con inseguridad le escribí de nuevo.

-Por qué tan seco? Ocurre algo??- Escribí mientras esperaba una respuesta que me tranquilizara más y se llevara mis inseguridades e incomodidad a otro lado.

-A qué te refieres?-

Me frustré un poco, en serio este chico no podía ver lo que yo veía?? en mis ojos él estaba siendo muy seco. Fruncí el ceño y volví a escribir.

-Como que "a que te refieres"? ESTÁS ESCRIBIENDO MUY SECO-

-perdón, no quería que lo vieras así, soy algo tímido, es todo, no suelo socializar mucho- Esa respuesta me tranquilizó y la vez empaticé con él, yo tampoco suelo socializar mucho por miedo, además de que solo tengo dos amigas y estoy empezando a perder confianza con ellas...

-Bueno, ya somos dos, solo tengo dos amigas y ni siquiera tengo tanta confianza con ellas, jaja-

-Al menos tu tienes amigos, yo ahora mismo estoy solo, únicamente me hablo con mis padres y la poca gente que se me acerca se aleja de mí al mismo día, así qué solo soy yo y yo contra el mundo- Me sentí algo mal por él, en ese entonces, mi mente no entendía porque la gente se alejaba de él a tanta velocidad, era muy encantador y amable, que estaba mal con él?

-Me tienes a mi! si tenemos algún problema en nuestra amistad me aseguraré de arreglar, así que ahora es "tú y yo contra el mundo"- mi corazón dolió un poco al escribir amistad, pero ignoré ese dolor y traté de reconfortarlo, de todas formas, siempre tengo lo que quiero respecto a relaciones, si quiero que sea mi pareja, caerá en mis brazos algún día y en vez de decir amistad, diría relación, o al menos, eso es lo que yo pensaba.

-Gracias- Respondió y empezó a escribir algo más, pero pareció que se arrepintió y borro lo escrito para luego empezar a escribir de nuevo.

-Como te llamas? No puedo seguir llamándote por tu nombre de usuario, verdad?-

-María- Respondí al instante

-Soy Thomas- Thomas? repetí el nombre en mi mente... Me gustó! le sienta bien! es dulce, es amable y tiene un nombre lindo, o al menos en mis ojos. Si, definitivamente esto era lo que quería y lo iba a tener de una forma u otra.

-Es un nombre lindo!-

-Gracias, María también es un nombre muy lindo- Sonreí ante el mensaje, una sonrisa llena de satisfacción y aprobación inundó mi rostro.

Pasamos el resto del día hablando, hasta que llegó la noche donde me tuve que despedir para poder ir a dormir y soñar con este extraño hombre que tan rápido se ganó mi corazón

Bloody ProblemsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora