Los Lazos Que Nos Unen

capitulo 5

"la vida toma cursos complejos”

Era aquella noche. Aquel lugar, uno elegante y refinado donde las personas vestían elegantes atuendos, hasta los meseros y meseras portaban vestimentas elegantes, mostrando así lo refinado del lugar.

En medio de todo, en el centro había un cuadrilátero donde un combate se llevaba a cabo.

Dos personas estaban peleando dándolo todo de sí para ganar, golpe tras golpe, patada tras patada, mostraban sus habilidades al público quienes los miraban.

Algunas risas tranquilas se escuchaban, no habían gritos aparte de los peleadores que en combate se encontraban.

Combo tras combo, cada uno demostraba su habilidad en la artes marciales, Muay Thai y Jiu-Jitsu Brasileño. Al final de la noche ambos estaban con moretones, hinchazones y algunos huesos rotos.

Pero, ninguno cedió. siendo el entretenimiento de aquellas personas. Quienes al haber apostado dinero solo esperaban ansiosos el resultado final, deseando volver a casa con el doble de dinero.

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En una habitación del lugar se encontraba Goku, eran los vestidores, tenía una bata que lo protegía del frío, mientras solo miraba su reflejo en el espejo frente a él.

En eso la puerta se abre. Al lugar entraron varios hombres que protegían a uno en especial, el jefe de aquella mafia.

-¿Cómo te encuentras, Son?- preguntó aquel hombre.

-Me encuentro bien, gracias por preguntar- respondió Goku con educación.

-me alegro, me alegro... Hoy termina el contrato- dijo mientras se sentaba a su lado.

-vaya al grano señor, pronto será mi turno- respondió Goku.

-jejeje, si que no cambias ni un poco. Bueno, eres joven, eres un rebelde que no tiene caso discutir. Te vengo a agradecer por lo que has hecho, las batallas que has ganado hicieron de mi vida, una mejor... Pero, todo tiene un final... Quiero que sigas trabajando para mí Son, ¿Que dices?- pregunto el hombre.

Dando un suspiro. -aunque me gustaría seguir trabajando para usted no puedo, así que tengo que negarme- respondió Goku.

-¿Puedo saber la razón?- preguntó el hombre.

-no hay una, solo... Me gustaría salir de aquí, venir cada semana o mes ya se ha vuelto algo aburrido, no lo sé... Le agradezco mucho la oportunidad, pero he de negarme- respondió Goku dando una reverencia.

Dando un suspiro. -supongo que tendré que aceptar tu decisión, aunque me hubiera gustado tenerme conmigo no puedo tenerte en tu contra...- en eso suena la campana. -bueno, tengo que irme... Ya sabes que hacer- dijo el hombre antes de marcharse.

Goku se quitó la bata, acomodó su gorra, y fue camino al cuadrilátero. Su caminar era tranquilo y pensativo.

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Comenzó a recordar.
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En una habitación se encontraba Goku atado de manos y pierna a una silla, teniendo algunos moretones e hinchazones y sangre recorriendo su rostro.