Paty

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Hoy estuvimos en el set grabando desde las 8:00 de la mañana hasta las 7:00 p.m. , durante las grabaciones Belén y yo no podíamos quitarnos la mirada la una de la otra luego de lo que pasó ayer en el baño. Iba camino al camerino de Belén para ver si hoy podíamos ir a la cena que no pudimos ir ayer porque salimos extremadamente tarde, y ahora sí poder hablar con ella y pedirle de nuevo una disculpa.

Belén: Paty -Dice sorprendida al verme.

Paty: Hola -digo sonriendo - Quería saber si quieres hoy que vayamos a cenar, ya que hoy si salimos temprano -le digo tímidamente.

Belén: Claro, cierto. La cena de ayer... -dijo pensativa.

Paty: Si ya tienes planes para hoy puedo entenderlo perfectame...-Belen me interrumpe.

Belén: No, no es eso, no tengo planes. ¿A dónde quieres ir?

Paty: Es que quiero que sea una sorpresa chef -Le digo en un tono seductor.

Belén: ¡Oh! Está bien Paty. -Dice sonriendo.

Habían pasado muchos problemas entre nosotras dos, y yo sé que no gestione mis emociones de la mejor manera, así que he decidido hacer todo lo posible por luchar por el amor de Belén.

Paty: La paso buscando a su habitación. Nos vemos -Le digo dejando un beso en su mejilla y irme al hotel.

Al llegar al hotel, comienzo a alistarme para ir por Belén. Me coloque un vestido blanco con flores, unos tacones pequeños, me deje el cabello suelto y me maquillo muy sutilmente. Le escribo un mensaje a Belén para ir por ella, a lo que ella me responde que ya está lista.
Llegó a la habitación de Belén y tocó la puerta, luego de unos segundos ella abre, y me quedo hipnotizada admirando su belleza. Se había colocado una falda de cuero negra con una camisa blanca corta y el escote descubierto. Con su cabello rubio suelto, se veía preciosa.

Belén: Nos vamos? -Dijo nerviosa.

Paty: Si, si, si, claro -digo tartamudeando.- Es que estás muy hermosa.

Belén: Jaja, muchas gracias mi Paty. Tú también estás muy hermosa.

Nos fuimos a un restaurante de comida china muy famoso, donde había reservado en la mañana, para poder traer al Belén.

Belén: Que lindo lugar.

Paty: Pensé en traerte aquí porque se que te gusta mucho la comida china.

Belén: Gracias. -dijo sonriendo.

Pedimos nuestros platos, mientras estos llegaban, empezamos a conversar sobre el día de hoy en el trabajo, Pero luego somos interrumpidas por la gerente de el restaurante.

Gerente: Buenas noches, una disculpa por interrumpir su velada, Pero es que soy muy fan de usted Paty y quería saber si nos podría honrrar cantando en nuestra restaurante.

Paty: Buenas tardes, es un gusto corazón. Pero cantar ahorita?

Gerente: Si, lo siento, si no es mucha molestia.

Paty: Es que ahorita estoy en una cita y no quisiera dejar a mi compañera sola -Digo mirando a Belén.

Belén niega con su cabeza y me dice: -Por favor señora Patricia Navidad yo encantada de escucharla cantar.

Paty: En serio? Le digo con una sonrisa.

Belén: Si por favor.

Me paro de la mesa y voy hacia donde estaban los músicos, tomo el micrófono y les pregunto si tiene una canción en específica que quieren que cante, a lo que la gerente me susurra que no, y que podría cantar lo que yo quería.

Paty: Bueno, he primero que todo muy buenas noches con todos, espero que disfruten de su comida, y para esta linda noche les cantaré "Enamorada de ti", canción que le dedico a la hermosa chef que me acompaña está noche, Chef Belén Alonso.

Paty: "Estoy enamorada de ti, no sé si ya lo sabías. Mis labios se desasen por ti, si tú quisieras ser mía..." -Mientras cantaba solo miraba a Belén, al terminar de cantar todos me aplaudieron y yo me baje para de nuevo acompañar a Belén.

Belén: Cantaste muy hermoso.

Paty: Gracias -digo mirando sus labios.-

Unos minutos después llegan nuestros platos de comida, pasamos una velada tranquila y delicioso, entre risas, rozes y miradas.

Belén: La comida está muy rica.

Paty: Que bueno que te gustó. -digo entre una sonrisa.

Belén: Iré al baño.

Paty: Está bien yo iré pagando la cuenta.

Al acercarme me dijeron que no había que pagar nada por haber cantado, y a pesar que les insistí no me lo permitieron. Esperaba a Belén a fuera del baño.

Belén: ¿Listo?

Paty: Si, ya vámonos.

Belén: ¿Nos vamos al hotel?

Paty: No, vamos a otro lugar que tengo preparado.

Al llegar Belén se le queda viendo con curiosidad.

Paty: Entremos si...

Cuando estábamos frente a esa puerta desconocida para Belén, pienso en las palabras adecuadas para proponerle a Belén lo que haríamos.

Paty: Esto-trago saliva- Esto es una habitación de juegos...

Abro aquella puerta, Belén entra a la habitación y yo cierro la puerta, quedando de tras de ella.

Paty: Quería experimentar nuevas cosas contigo.... Pero si tú no quieres podemos irnos.

Belén: No -Dice volteando se hacía mi- quiero que nos quedemos...

Me acerco a ella con pasó lento y seguro, sintiendo la excitación correr por mis venas. Cada movimiento que hago está cargado de deseo, ansiosa por explorar cada rincón de su cuerpo y llevarla al límite del placer.

Paty: ¿Estás lista para ser castigada, mi amor?-susurro en su oído.

Belén: Si -susurra.

Subo la falda de Belén hasta su cadera, tomo mi mano y la meto entre su ropa interior.

-Ah...ah -gime, agarrando su cadera para acercarla más a mi.

Puedo sentir su respiración entrecortada mientras espera ansiosa. Sin decir una palabra más, tomo el látigo que reposa sobre la mesa y comienzo a trazar círculos en su trasero, preparando para liberar todo mi deseo y pasión por ella.

Con un movimiento rápido y preciso, dejo que el látigo caiga sobre su trasero, provocando un gemido de placer y dolor en sus labios.

Continuo castigando la con el látigo, alternando entre caricias suaves en su vagina y golpes firmes en su trasero y espalda, llevándola al límite de su resistencia y deseo. Sus gemidos de placer llenan la habitación.

Luego de un rato castigando la dejo el látigo a un lado. Mis manos exploran su cuerpo con suavidad acariciando cada centímetro de su piel desnuda , sintiendo su calor y suavidad bajo mis dedos.
Mis labios siguen el recorrido de mis manos, dejando besos en su espalda, sus hombros y cuello. Cada beso es una expresión de mi deseo y pasión por ella, una manera de demostrarle cuánto la amo y la deseo.
Bajo por su espalda con besos hasta llegar a su entrepierna, donde su sexo húmedo y caliente me espera ansioso. Sin perder un instante, me inclino y comienzo a lamer suavemente provocando gemidos de placer de su parte.
Su cuerpo se tensa y sus gemidos alcanzan un punto álgido. Con un grito de placer, Belén alcanza el orgasmo, su cuerpo tiembla.

-¿Estás bien amor? -pregunto con ternura, acariciando su mejilla, mientras ella asiente con su cabeza, todavía recuperándose.

Estuvimos abrazadas, me daba besos y sin tocar el tema de "Que somos" sólo disfrutábamos el momento.

Amor entre cocinasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora