Como todos los días, Minho se encontraba listo con su lonchera y bolso en las manos, listo para ir al colegio. Aparentemente estaba bastante emocionado de ver a Jisung después de ese fin de semana. Se sintió como mucho tiempo para el niño de cuatro años.
Como siempre, Sunghoon llevaba a Minho y lo despedía chocando sus manos —agregándole algo nuevo, un pellizco en el trasero—.
El corrió a el salón de clases (un hábito suyo, aunque la Señorita Park le había dicho un montón de veces que no lo hiciera, pero él no le presta atención) tan rápido como pudo, impaciente por ver a Jisung. Al entrar con la sonrisa más grande de todas, se dio cuenta que el asiento en el que Jisung siempre se sentaba, estaba vacío.
¿Tal vez va a llegar tarde? pensó Minho, pero Jisung nunca llegaba tarde, él era uno de esos niños que llegaban de primero a clases. Pero, ¿y si viene tarde?
Minho se sentó en su lugar un poco triste, sin la compañía de Jisung como él esperaba. Esperó hasta que sonara la campana que indicaba que las clases estaban a punto de empezar.
Minho miró a todos en el salón, sentándose al lado de sus mejores amigos, riendo y conversando, mordió su labio para evitar llorar porque su papi le había dicho que los niños grandes no lloran.
El resto del día para Minho fue de completo silencio, estaba solo y realmente echaba de menos a Jisung, y no tenía a nadie más, lo que hizo que se sintiera solitario y realmente triste. En el almuerzo, Minho le dio galletas a sus compañeros como siempre, pero le guardó dos a Jisung.
Los otros amigos de Minho, Sunno y Julie le preguntaron si quería hacer pasteles de lodo, a lo que respondió meneando su cabeza con un no. No tenía ganas de hacer absolutamente nada sin Jisung.
La única vez que Minho sintió una sonrisa en su cara fue cuando la campana sonó, lo que indicaba el final de las clases.
Rápidamente él agarró sus cosas y las metió en su mochila. Corrió hacia Mina, que lo esperaba afuera de su coche mientras hablaba por el teléfono y abrazó sus piernas
comenzando a sollozar.— ¿Bebé? — preguntó mientras Minho sollozó en un jadeo.
— Minho ¿que pasó? — Mina preguntó ahora preocupada. — ¿Alguien dijo algo, bebé?
— No — Minho tosió, — ¡Jisung no vino a la escuela, mami! — exclamó.
Mina arrulló al pequeño niño que le daba mucha ternura, ¡El extrañaba a su mejor amigo!. — Aww bebé, está bien, tal vez está enfermo.
— ¿Enfermo? — Minho preguntó alejándose de la pierna de Mina y mirando hacia arriba, mientras limpiaba los mocos que corrían por su nariz.
— Sí, bebé. — Mina sonrió recogiendo a Minho en sus brazos. — Llamaré a la mamá de Jisung y le preguntaré por qué no vino a la escuela hoy ¿está bien?.
Minho rápidamente asintió, sacándole una sonrisa a Mina.
— Bien, ¡Vamos para que podamos llamar a la mamá de Jisung!.
El viaje a casa fue muy intenso para Minho porque no podía esperar a llegar para saber acerca de lo que le sucedió a Jisung.
Lo primero que hizo Minho fue agarrar rápidamente la mano de su madre y tirar de ella en el interior de la casa para que pudiera llamar a Nayeon y sacar a Minho de su miseria.
***
— Oh, está bien, gracias, sí, así será, gracias, adiós y cuídate! — Mina habló por teléfono antes de colgar.
— ¡Dime, dime! — Minho saltó exigiendo una respuesta.
Mina suspiró, — Amor, él tiene varicela y no será capaz de ir a la escuela durante dos o tres semanas...
— ¿Eso es mucho tiempo? — Minho preguntó confundido.
— Mucho, amor. — Mina suspiró de nuevo.
— Pero mami... — Minho empezó a gemir de nuevo, con sus grandes ojos empezando a llenarse de lágrimas y haciendo un mohín en sus labios.
— Sin peros Minho, él está enfermo, amor — Mina le dijo con severidad a Minha, que luego se puso a llorar porque iahora no podría ver a Jisung por mucho tiempo y su madre sólo le regañó.
— Hey, no te pongas triste, no me dejaste terminar... — Mina dijo moviéndose hacia
Minho, levantándolo. — Vamos a ir a su casa esta noche para que puedas verlo, ¿okay?Los ojos de Minho se abrieron y él sonrió. — ¿En serio?
— ¡Sí! — Mina sonrió y de repente Minho estaba sonriendo como un loco.
— Sonriendo ahora ¿eh? ¿no estabas llorando unos pocos segundos atrás? — Mina se burló sonriendo a Minho, quien frunció el ceño y luego escondió su rostro en el cuello de su mamá riendo.
***
— Bien, ahora promete que te portarás bien — Mina dijo con un pie fuera de la casa de los Han, con Minho a su lado.
— ¡Sí mamá — Minho sonrió.
La puerta se abrió segundo después y Mina y Minho fueron recibidos por Nayeon, la mamá de Jisung, que les sonrió pellizcando la mejilla de Minho cuando los dejó entrar.
Minho se movió hacia adelante y vio Jisung, tenía guantes de cocina atados alrededor de sus manos y él tenía muchos pequeños puntos rojos en la cara y el cuerpo.
Jisung abrió los ojos al oír las voces alrededor de la habitación y se quedó sin aliento
cuando vio a Minho de pie junto a él.— ¡Chico de las galletas! — Jisung llamó rápidamente haciendo que Minho sonriera.
— ¡¡Hola!! — el chico se rió agitando su mano.
— ¿Qué estás haciendo aquí? — preguntó Jisung, sorprendió al ver a Minho.
— Mami me trajo, ella me dijo que estabas enfermo. — Minho frunció el ceño.
— Sí, tengo varicela — Le dijo Jisung.
— ¿Cómo conseguiste que te diera varicela? — Minho preguntó curioso.
— Creo que la tengo desde que comí pollo, creo qué el se enfadó porque lo comí, así que me dio varicela. — Jisung encogió de hombros haciendo a Minho decir "oh".
Por lo que los chicos pasaron todo el día riendo y hablando, hasta que llegó el momento de que Minho se tuviera que ir.
— Vamos, ¡Tenemos que irnos! — Mina llamó.
— No quiero, quiero quedarme con Jisunggie, ¡mami por favor! — Minho gritó agarrando la cama de Jisung fuertemente.
— Bebé, Jisung está enfermo, necesita descansar.
— Pero mami, ¡quiero quedarme con él! — Minho protestó.
— Puede quedarse Mina, honestamente no hay problema, Jisung no dejaba de llorar por no ver a Minho en la mañana y sería mejor que se quedara, Jisung se ve mejor ahora que llegó Minho — Nayeon sonrió con cariño al chico.
— No lo sé... — Mina miró a Jisung y Minho, que estaban haciendo ojos de cachorro. — Uh, está bien, pero sé bueno, ¿okay?
— ¡Sí! — Minho vitoreó mientras chocaba los cinco con Jisung.
Así que después de que Mina se fuera, Nayeon colocó una cama para Minho al lado de Jisung. Como Jisung estaba enfermo, sería mejor que Minho no durmiera con él.
Una vez Nayeon se había ido, después de apagar las luces y darle a los chicos besos de buenas noches, Minho rápidamente saltó de la cama plegable y se subió en la cama de Jisung.
— Chico de las galletas ¿qué estás haciendo?
— Tonto, ¡estoy durmiendo contigo! — Minho rió.
— Regresa a tu cama o te vas a enfermar! — Jisung protestó.
Minho soltó una risita. Se acurrucó y puso su cabeza en el pecho de Jisung y le susurró. — ¡Entonces estaremos enfermos juntos!
***
Varicela en inglés es chickenpox, por eso Jisung pensó que un pollo se había enfadado con él.
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Cookie boy - Minsung
RomanceMinho, quien lleva galletas recién horneadas a la escuela todos los días y Jisung, que siempre toma dos. Inicio: 07/08/24 Final: 07/08/24 ❥ Romance, Fluff ❥ Adaptación - ©DIAM4NDIS ❥ Hermosa portada y separador - ©