Max sabe que no es una buena persona, sabe que si le dieran la oportunidad golpearia a más de un piloto, más de una vez le choco a propósito a alguien en pista y ha insultado en más de dos idiomas a algún reportero o ingeniero pero no cree ser tan malo como para que Dios le haga tener que soportar tener a Sergio encima de él y tener que disimular que no le afecta.
Piensa en otra cosa, solo piensa en otra cosa...
Pero otro bache en el camino solo hace que el trasero de Checo vuelva a rebrotar sobre su entrepierna.
¿Por que me odias, Dios?
Todo comenzo por que tuvieron ir a un campo abierto para grabar algunos videos para YouTube e Instagram.
La grabación estuvo bien, era fácil hacer las dinámicas con alguien como Checo qué parecía siempre estar alegre.
En realidad, desde que Max conoció a Checo se llevaron bien de inmediato, ambos parecían encargar a la perfección cosa que me volvió aún mejor cuando se volvieron compañeros de equipo. Quizás también tuvo que me ver un poco el crush qué el rubio tenia sobre el mexicano.
Había intentando hacer notar su interés en el mexicano más de una vez y los demás pilotos estaban más que enterados sobre que no debían acercarse a Sergio más de lo necesario pero Checo solo tomaba sus palabras a juego y bromaba de vuelta con coqueteos inocentes qué dudaba ser serios.
No lo pueden culpar, Sergio era por mucho uno de los pilotos más atractivos en el paddock. Sus bonitos ojos café con verde, sus cientos de pecas, su estrecha cintura, los grandes muslos, su llamativo pecho y su gran y esponjoso trasero. Sergio era un ángel con un cuerpo de pecado y Max solo era un simple mortal qué se moría por tenerlo entre sus piernas.
Cuando la grabación acabó, el equipo les aviso que debían volver a las oficinas para una junta. Habían llegado en diferentes autos con sus respectivos equipos pero como el auto donde llegó Max era una camioneta, la usaron para llevar todo el equipo de grabación lo que había abarcando uno de los asientos.
Le pidieron a Sergio que si podía ir el campeón con ellos y este acepto con una sonrisa sin tomar en cuenta que su auto ya iba lleno.
En un auto de 5 plazas ahora debían acomodar 6 personas.
Rápidamente acordaron dejarle el asiento de copiloto a Alice por ser la única chica del equipo, así que eso la dejaba al frente con el chófer que era Julian y dejaba a los 4 hombres teniendo que encontrar la forma en que debían acomodarse en la parte de atrás.
Xavi fue quien dio la idea de que alguno se sentara en las piernas de otro para así todos entraran fácilmente. Aunque también se negó a ser uno de los involucrados.
Jo apuntó que él era muy alto así que no podía ser quien se sentará encima de alguien pero que Checo siendo el más bajito podía ser quien tuviera que hacerlo ya que así no pegaría con el techo.
Checo acepto pero fue a Verstappen a quien le pidió que lo dejara sentarse sobre él ya que temía qué Jo no lo dejara de molestar todo el camino sobre su peso.
Max viviendo en su mundo de fantasía acepto de inmediato.
Así que el orden había quedado con Xavi detrás del chófer, Jo en el medio y Max detrás del copiloto con Sergio en sus piernas.
Inicialmente Sergio se había acomodado de forma que quedara sentado casi en las rodillas del neerlandes pero con cada movimiento que hacía el auto terminaba golpeandose con ellas en el rebote. Max, al notarlo le insistió en que se sentara correctamente para evitar que se lastimara y aún avergonzado Sergio obedeció quedando centrado en el regazo de su compañero. Max amo y odio su idea en ese momento.
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Valentía | Chestappen
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