- 015 - La visita - 🍁 -

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El médico terminó la revisión a Jimin y se volvió hacia Jungkook con una expresión seria.

"Me temo que las noticias no son buenas", dijo. "El daño en la cintura y el brazo izquierdo es irreversible. Jimin no volverá a caminar ni a mover su brazo izquierdo".

Jungkook frunció el ceño, pero no dijo nada.

El médico se volvió hacia Jimin. "Jimin, necesito saber qué pasó. Tus lesiones son muy graves y no parecen ser solo causadas por un accidente. ¿Qué sucedió?"

Jimin miró al médico con miedo, sabiendo que no podía revelar la verdad sobre Jungkook.

"No... no lo sé", tartamudeó. "Me desperté así".

El médico lo miró con escepticismo. "Jimin, tus lesiones sugieren un patrón de trauma severo. Es importante que me digas la verdad para poder ayudarte adecuadamente".

Jimin sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. Sabía que no podía confiar en el médico, no podía revelar la verdad sobre Jungkook y su oscura obsesió

El médico comenzó a revisar el sótano, su mirada escaneando cada rincón. De repente, se detuvo en una mancha de sangre en el suelo.

"¿Qué es esto?" preguntó, su voz llena de sospecha.

Jungkook se acercó a él, su rostro tenso. "No es nada", dijo. "No te preocupes por eso".

Pero el médico no se dejó convencer. Siguió revisando el sótano, encontrando más manchas de sangre y signos de lucha.

"¿Qué pasó aquí?" preguntó, su voz ahora llena de alarma.

Jungkook se puso delante de él, su mirada intensa. "No te metas en esto", dijo. "No te conviene. No se te ocurra hacer algo del cual puedas arrepentirte".

El médico se detuvo, su corazón latiendo con rapidez. Sabía que algo estaba muy mal. Miró a Jimin, que yacía en la cama, su mirada llena de miedo.

"Voy a llamar a la policía", dijo el médico, sacando su teléfono.

Pero Jungkook fue más rápido. Le quitó el teléfono de la mano y lo apagó.

"No vas a hacer eso", dijo, su voz baja y peligrosa. "No vas a hacer nada que pueda dañar a mi Omega".

Jungkook tomó al médico con una fuerza abrumadora, arrastrándolo a una esquina del sótano. El médico intentó resistir, pero no pudo contra la fuerza de Jungkook.

"¡Suéltame!" gritó el médico, intentando zafarse.

Pero Jungkook no lo soltó. Lo empujó contra la pared y lo sujetó con una mano en la garganta.

"Te dije que no te metieras en esto", susurró Jungkook, su mirada intensa.

El médico intentó hablar, pero la presión en su garganta era demasiado fuerte. Jungkook sacó unas cuerdas de su bolsillo y comenzó a amarrar al médico.

"No te preocupes", dijo Jungkook, sonriendo. "No te haré daño... todavía. Pero debes aprender a no entrometerte en los asuntos de los demás".

El médico intentó luchar, pero estaba inmovilizado. Jungkook lo dejó amarrado en la esquina del sótano, sin poder moverse.

"Ahora", dijo Jungkook, volviendo a Jimin. "Donde estábamos. Mi Omega necesita atención".

Jimin miró al médico, que estaba inmovilizado y asustado. Sabía que estaba en grave peligro, y que Jungkook no lo dejaría ir.

Jungkook subió a la cocina, dejando al médico y a Jimin solos en el sótano. El médico, aún amarrado, intentó hablar con Jimin.

"Jimin, por favor, háblame", dijo el médico, su voz llena de preocupación. "¿Qué te ha hecho este hombre? ¿Por qué estás aquí?"

Pero Jimin solo callaba, sollozando suavemente. El médico intentó seguir hablando, pero Jimin no respondía.

"Jimin, por favor, debes confiar en mí", dijo el médico. "Puedo ayudarte a salir de aquí. Puedo protegerte".

Pero Jimin solo sacudía la cabeza, sus sollozos aumentando. El médico se dio cuenta de que Jimin estaba aterrorizado, y que no confiaba en nadie.

De repente, se escuchó un ruido en la escalera. Jungkook estaba regresando, con un machete en la mano. El médico se quedó en silencio, mirando a Jungkook con miedo.

"Ahora", dijo Jungkook, sonriendo. "Voy a enseñarles a ambos a no entrometirse en mis asuntos".

El médico intentó gritar, pero Jungkook se acercó a él, el machete en alto. Jimin cerró los ojos, aterrorizado, sabiendo que algo horrible estaba a punto de suceder.

Jungkook levantó el machete y lo bajó con fuerza, cortando las manos del médico. La sangre salpicó por todas partes, manchando las paredes y el suelo del sótano.

El médico gritó de dolor y terror, intentando retirarse, pero estaba amarrado y no podía moverse. Jungkook comenzó a reír de una forma desgarradora, su risa resonando en el sótano.

Sus ojos se volvieron fríos y penetrantes, sin muestra de emoción ni compasión. Jimin lo miró, aterrorizado, sabiendo que Jungkook había cruzado un límite peligroso.

"¡Jungkook, para! ¡Por favor!" gritó Jimin, intentando detenerlo.

Pero Jungkook no se detuvo. Siguió riendo, su mirada clavada en el médico, que se desangraba en el suelo.

"Ahora", dijo Jungkook, su voz baja y peligrosa. "Ahora saben lo que pasa cuando se meten en mis asuntos".

Jimin se cubrió la boca, horrorizado por lo que estaba viendo. Sabía que Jungkook había perdido el control, y que nada podía detenerlo ahora.

Jungkook tomó al médico del cuello, arrastrándolo hacia una mesa cercana a Jimin. El médico intentó gritar, pero su voz fue silenciada por la presión en su garganta.

Jungkook lo pasó sobre la mesa, sujetándolo con fuerza. Jimin miró, aterrorizado, sabiendo lo que estaba a punto de suceder.

Con un golpe rápido y preciso, Jungkook cortó la cabeza del médico. La sangre salpicó por todas partes, manchando la mesa y el suelo.

Jimin gritó, cubriéndose la boca con horror. La escena era abrumadora, y él no podía creer lo que estaba viendo.

Jungkook se volvió hacia Jimin, su mirada fría y penetrante. "Ahora", dijo, "ahora sabes lo que pasa cuando se meten en mis asuntos".

Jimin se encogió, aterrorizado, sabiendo que estaba a merced de Jungkook. La cabeza del médico yacía en la mesa, un recordatorio gráfico del peligro que corría.

Jungkook se acercó a Jimin, su sonrisa cruel y siniestra. "No te preocupes, Omega", dijo. "No te haré daño...".

Jungkook lamió el machete, saboreando la sangre del médico. Luego, se acercó a Jimin, que estaba temblando de miedo.

Con el dorso de la mano, Jungkook limpió el rostro de Jimin, eliminando las manchas de sangre. Jimin cerró los ojos, aterrorizado, mientras Jungkook lo tocaba.

Pero en lugar de lastimarlo, Jungkook se inclinó y presionó sus labios contra los de Jimin. El beso fue apasionado y intenso, y Jimin se sintió abrumado por la contradicción de emociones.

El miedo y el horror que sentía por lo que Jungkook había hecho se mezclaban con la atracción y el deseo que sentía por él. Jimin no sabía qué hacer, ni cómo procesar lo que estaba sucediendo.

Jungkook profundizó el beso, su lengua explorando la boca de Jimin. Jimin se sintió perdido, atrapado en la red de emociones y deseos que Jungkook había tejido a su alrededor.

Y en ese momento, Jimin supo que estaba perdido. Estaba atrapado en el mundo oscuro y peligroso de Jungkook.

Que miedo ! 🥹

The Alpha Obsession ⇢ᴊυиg-ᴊι✰ Especial Halloween 🎃Donde viven las historias. Descúbrelo ahora