PROLOGO

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Su adorada hija apenas tenía cinco años de edad y ya hablaba con propieadad como si fuera una pequeña dama de prestigio, a veces no podía creer lo rápido que pasaba el tiempo y a su vez, no quería reconocerlo, pero Emily se estaba haciendo mayor y podía entender muchas de las cosas que pasaban a su alrededor, como el diminuto y muy molesto detalle que ahora era el punto central de la discución que estaba teniendo con ella.

"¿Por qué no tengo mamá?"

No lo iba a admitir, pero se sorprendió tanto que creyó haber escuchado el ruido de el disco de musica detenerse a mitad de una canción. Aunque eso era imposible, no puso Jazz esa mañana; apenas se estaban preparando para desayunar y no estaba de humor para nada más que el silencioso ruido de los platos al comer y la dulce voz de su niña.

Pensandolo bien... Estaba arrepentido.

Ahora tenía a una muy; tal vez demaciado; curiosa hija mirándolo con esos hermosos ojos azul profundo esperando una respuesta que no estaba listo para dar. Por suerte, es un maestro en el arte de las mentiras.

- No necesitas una, my dear, estás mucho mejor así - sonríe acariciando el cabello castaño de Emily y peinandola con cuidado.

- Pero tú tienes una.

- Pero no tengo padre y tú me tienes a mí, ¿No es trato justo?

- No.

Y pensar que la única persona sobre esta tierra capaz de darle vuelta a sus trucos e impedirle salirse con la suya terminaría siendo su hija.

- Emily, tu madre se fue de viaje al cielo para cuidarte, desde allí puede protejerte mejor a donde quiera que vayas - el moreno se rinde, inventando una historia teñida de rosas solo para calmar un poco la curiosidad de la menor -, ¿No crees que es mejor así?

- No. Yo quiero una mami como la de mis amigas, papá, una que pueda ver y abrazar como a ti, ¿Y si me buscas una?

- No es tan simple, querida.

- ¿Por qué no?

Esta batalla se estaba haciendo larga y muy difícil, ¿Cómo le explicas a tu hija de cinco años que no estás para nada interesando en tener una pareja y que para colmo la única razón de su existencia es haber sido aprovechado por alguien en quien confiaba plenamente? Definitabamente no iba a decirle nada de eso.

- ¡Hora de ir a la escuela!

-Papá, es sábado...

- ....

"Que Papa Legba se apiade de mi alma".

[ . . . ]

Muy lejos de allí, en en Museo Británico de Londres; un joven rubio caminaba lentamente y dejaba apuntes aparentemente importantes en su cuaderno de notas, mientras paseaba junto a las obras en exhibición cerca de él.

Su cabello estaba bien peinado hacia atrás, dejando ver sus delicados labios y mejillas sonrosadas; ojos de un claro azul celeste como el cielo y largas pestañas platinadas a juego con su cabello dorado. Se lo veía pequeño, no solo en estatura, sino también en edad, pues no aparentaba tener más de veinte años.

Éste pequeño era Lucifer Samael Celestius Morningstar, el hijo más joven de una adinerada familia de historiadores ingleses. El único omega. A sus casi dieciocho años estaba estudiando arte y música, a pesar de las constantes negativas de su padre que esperaba que fuera historiador como el resto de sus hermanos.

" No se podía esperar mucho de un Omega".

No iba a dejar que vieran lo herido que esas simples palabras lo dejaron, pero tampoco iba a permitir que siguieran maltratándolo por algo que escapa de su control. No pidió nacer así y mucho menos en esa familia. Así que un día, lleno de firmeza y determinación esperanzadora por un futuro libre y feliz, hizo sus maletas y en cuanto menos se lo esperaban...

Escapó.

Por una vida mejor, al lugar más remoto de los Estados Unidos, donde su padre jamás pondría un pie ni por todo el oro del mundo: Luisiana, Nueva Orleans. La cuna del Jazz y el Blues, dos géneros musicales que adoraba casi tanto como la polka y que sin dudarlo amaba más que el vals de todos los días.

Ahora podrá vivir como él lo desee, tenía mucho dinero ahorrado, suficiente para conprarse una pequeña cabaña abandonada a las afuras del pantano. Iba a remodelarla con el tiempo, pero lo primero era encontrar un trabajo simple para no tener que gastar sus ahorros en víveres y otras necesidades. Justo cuando buscaba algún puesto de empleo rápido en el periódico, la radio vieja en la sala se encendió y una voz profunda y seductora comenzó a dar las noticias del día.

Nunca creyó que solo escuchar a alguien hablar podría ser tan emocionante y atractivo, no solía prestar atención a las trasmiciones de radio, pero se mantuvo atento a todo el monólogo del presentador, pensando incluso que a pesar de los datos sangrientos de masacres a desconocidos y la ilusoria noticia de un presunto asesino en serie; el hombre sin duda sabía como captar el oído del espectador.

Si ese mismo día le hubieran dicho que estaba escuchando la voz de su alma gemela...

Se reiría de ellos.

Sin lugar a dudas, el mundo es un pañuelo y el destino su telar.

Fin del prólogo.

[Notas del autor]:

Saludos, querido lector.

Espero que les guste esta pequeña historia, ya que ésta, junto a "Moneda de dos caras" son las primeras en ser publicadas por mí y sé que de entre tantas obras de Wattpad, difícilmente podrán destacar. Pero al menos espero que aquellos que llegaron hasta aquí lo disfruten.

No olvides darle a la estrellita y comentar qué tal te pareció, eso me da muchos ánimos para continuar. Puedes preguntar lo que gustes, responderé en cuando lo vea.

Sin más que decir, hasta el siguiente capítulo <3

&quot;Una madre para mi Bebé&quot;Donde viven las historias. Descúbrelo ahora