Tan adictivo que me haces tropezar por ti

parte 1

"Esto no es real."

Kim Dokja mira fijamente el estrado elevado que hay frente a él, sin comprender. Su espada se resbala de sus dedos flojos y cae al suelo, pero él no le presta atención, sus ojos están pegados al... objeto que  está allí, todo bonito e inocente. Como si no fuera un  onahole real.  "De ninguna manera..."

De repente, comprende por qué la clasificación de la mazmorra se había restringido a mayores de 18 años.

—No. Vamos. Esto no es... No puede ser... —dice en voz alta, recorriendo con la mirada la decrépita habitación como si quisiera atrapar a los autores de la broma. Porque esto tiene que ser una broma. Una mazmorra tan lasciva seguramente no existiría de forma natural.

En cualquier momento, Han Sooyoung va a salir de detrás de uno de los pilares, con una piruleta de limón en la boca y una sonrisa de suficiencia en los labios. Se ha burlado de él y de Yoo Joonghyuk sin piedad desde que finalmente se juntaron y esto es definitivamente algo que haría. Así que este es solo otro de sus planes para avergonzarlo, ¿verdad?

¿Bien?

[LA CONSTELACIÓN 'JUEZ DE FUEGO DEMONIACO' ESTÁ BABEANDO Y TE INSTA A QUE LA TOMES.]

[SE HAN PATROCINADO 5000 MONEDAS.]

[LA CONSTELACIÓN 'ESCRIBA DEL CIELO' SE GOLPEA LA CARA CON LA MANO Y CIERRA LA SESIÓN DE SU CUENTA.]

[LA CONSTELACIÓN 'REINA DE LA PRIMAVERA MÁS OSCURA' TE RECUERDA CORTÉSMENTE QUE PRACTIQUES SEXO SEGURO Y DICE QUE ES MUY IMPORTANTE LIMPIAR TUS JUGUETES DESPUÉS DE USARLOS.]

[LA CONSTELACIÓN 'PADRE DE LA NOCHE RICA' LE GIME A SU ESPOSA.]

[LA CONSTELACIÓN 'CONSPIRADOR SECRETO' ESTÁ DESEANDO LEJÍA.]

—¡Madre! —grita Dokja apresuradamente, sonrojándose como un tomate mientras recoge su espada y la envaina para no mirar más las notificaciones. Puede que quisiera experimentar lo que es tener padres confiables, ¡pero no  todos  los aspectos! Que los pájaros y las abejas hablen a su edad es más que vergonzoso.

Quiere darse una palmada en la frente cuando piensa en lo nervioso que había estado al entrar solo en esa mazmorra, ya que es una de las poquísimas mazmorras que no habían sido elaboradas en todas las regresiones de Joonghyuk. Recuerda vagamente que el regresor la había encontrado en su ronda 56, pero nunca había vuelto a ella en ninguno de sus turnos posteriores. Ahora ve por qué. ¿Joonghyuk también la había encontrado? Dios, ¿la había  usado  ?

Una curiosidad morbosa le hace mirar más de cerca. Hay una pequeña inscripción tallada en la base del altar, de un dorado brillante y en un idioma que no reconoce. Por eso los teléfonos resultan útiles; saca el dispositivo y le toma una foto, y decide preguntarle a Yoo Sangah si puede traducírsela más tarde. Ella es la única en la que confiaría el conocimiento de que se ha llevado a casa un onahole al azar de una mazmorra sospechosa, aparte de Joonghyuk, que probablemente lo haría trizas y se burlaría de él. Pasa los nudillos sobre él distraídamente, contemplando el juguete que tiene delante.

¿Qué sentido tendría tomar algo así, en realidad? Tiene  espacio  en su inventario para ello, pero no lo necesita. Ser arrojado de cabeza al apocalipsis y luchar por sobrevivir a los escenarios había acabado con su libido bastante, aparte de unos segundos de debilidad cuando vio a Yoo Joonghyuk en persona por primera vez. Incluso si lo prueba, probablemente sería solo una vez. Tiene preocupaciones más grandes que un lugar cálido donde meter su pene.

Y todavía.

“Ni una palabra a nadie más”, advierte a las constelaciones que lo observan, frunciendo los labios mientras lo quita del estrado e ignorando la avalancha de notificaciones y donaciones que le llegan. Lo que es mucho más interesante es la forma en que había cobrado vida bajo sus dedos, el movimiento de su borde rosa extraordinariamente realista. ¿Es este un artefacto mágico?

Después de unas palabras rápidas con Bihyung para que dejara de correrse, le pasa el pulgar por el fruncimiento virginal. La sangre le arde más al ver cómo se aprieta y se afloja con necesidad contra él, como si rogase que lo llenaran. Está extrañamente caliente al tacto, y cuando le da un empujoncito en la entrada, se estremece.  Joder.  Nunca le había parecido atractiva la idea de un coño de bolsillo insensible, pero este reacciona como si estuviera  vivo.

Sus pensamientos se dirigen automáticamente a Joonghyuk, como sucede con demasiada frecuencia. ¿Así reaccionaría el regresor si Dokja lo tocara así? ¿Su protagonista jadearía, se retorcería y gemiría pidiendo más, o se sonrojaría hasta las puntas de las orejas y murmuraría algo parecido a una tsundere?

Aún no han tenido la oportunidad de dormir juntos, están demasiado distraídos con los escenarios como para molestarse en placeres insignificantes. Se han visto obstaculizados en cada oportunidad que han tenido  . Pero... tal vez esto pueda ayudarlo hasta que tengan la oportunidad de tener sexo. Tal vez esta mazmorra sea solo una bendición disfrazada.

Se burla de su entrada con indiferencia, disfrutando de la forma en que se contrae contra él. Sin que nadie se lo pida, su mente evoca una imagen pecaminosa de Joonghyuk desnudo y esperándolo como un buen chico en su cama, con el pecho ancho y agitado y el cabello alborotado, y siente que se endurece en sus pantalones. Bueno. Si no puede tener algo real, entonces esto también le servirá. Es solo por la tarde y sabe que Joonghyuk está entrenando a Lee Jihye en este momento, así que si se apresura a regresar rápidamente tendrá tiempo para darse un gusto.

Un rato a solas con este juguete no viene nada mal, ¿verdad? 

**********
Una espada se dirige a su garganta. Yoo Joonghyuk la detiene sin esfuerzo con su espada, luego aprovecha su ventaja, usando el peso de su cuerpo contra su aprendiz para desarmarla. Lee Jihye se esfuerza contra él, pero su fuerza física no es nada comparada con la de él y se estrella contra el suelo. La adolescente intenta levantarse de un salto antes de que él le plante un pie firme en el abdomen, impidiéndole moverse. Su espada yace en el polvo demasiado lejos para que ella pueda alcanzarla y suspira derrotada.

"¡Tío!"

Con un resoplido silencioso, se aparta y le lanza el arma de una patada. —Qué descuidada. Podría haberte matado veinte veces en el primer minuto.

—¡Malvada! Pensé que te había ganado con esa patada —se queja Lee Jihye con petulancia, haciendo pucheros mientras mira a su unnie en busca de apoyo. Jung Heewon simplemente se encoge de hombros y le arroja una botella de agua, la mujer se apoya casualmente contra la pared con los brazos cruzados sobre el pecho.

“Yoo Joonghyuk-ssi tiene razón, por una vez. No puedes asestarle una patada con hacha a alguien que es el doble de alto que tú, y si no sabes el momento adecuado, perderás el equilibrio”.

—Por supuesto que tengo razón —murmura Joonghyuk, aunque sus hombros están relajados mientras Jung Heewon le sonríe con un brillo en los ojos. Aunque no se lo admitiría, ella es el contrapeso perfecto a su brutal estilo de enseñanza para alguien como Lee Jihye, que ya la admira mucho y le da casi tanto respeto como el propio Joonghyuk. Ella había empezado a rondar por allí durante sus sesiones de entrenamiento y siempre va mucho mejor cuando ella asiste, ya que está más dispuesta a explicarle las cosas a la chica en lugar de su propio método de grabar técnicas de espada en su memoria muscular con una pelea.

Joonghyuk mira a Lee Jihye, que está haciendo unos cuantos ejercicios de calentamiento para aliviar los dolores de su espalda. Joonghyuk está a punto de decirle que vuelva a entrenar con él cuando siente algo extraño...  algo.  Un pulgar que acaricia suavemente su borde. Una uña presiona contra su agujero, como si estuviera probando qué tan apretado está.  Qué carajo.

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