La casa está en un silencio inusual. Los niños se han ido de paseo con Draken y Emma, y por primera vez en mucho tiempo, Mikey y Takemichi tienen la casa para ellos solos.
Mikey-¿Te das cuenta de lo raro que es tener la casa tan tranquila?-Dice dejándose caer en el sofá
Takemichi-Sí…casi no sé qué hacer sin Nil y Yoshi corriendo por ahí-dice sentándose junto a él en el espacio que ha dejado
Mikey-Podríamos hacer cualquier cosa. ¡Ver la televisión sin interrupciones, dormir una siesta sin que nos salten encima! Las posibilidades son infinitas.
Takemichi-O podríamos simplemente…no hacer nada.
Mikey-¿Nada? ¿Esa es tu gran idea para nuestra libertad?
Takemichi-Sí… a veces no hacer nada es lo que más necesitamos. Solo… descansar, relajarnos, sin preocupaciones.
Mikey-No suena tan mal, en realidad. Estoy cansado de estar siempre en movimiento.
Ambos se tumban en el sofá, mirando el techo en silencio por un momento. La calma es reconfortante, una pausa en el caos constante de sus vidas.
Mikey-Es raro, ¿no? Cómo cambian las cosas. Hace unos años, no me imaginaba siendo padre. Y ahora… no puedo imaginar mi vida sin Nil y Yoshi.
Takemichi-Lo sé. A veces, cuando las cosas se ponen difíciles, pienso en cómo hemos llegado hasta aquí… y me doy cuenta de que no lo cambiaría por nada.
Mikey-¿Incluso los momentos en que todo parece ir mal? Como cuando quemaste el desayuno esta mañana.
Takemichi-Incluso esos momentos. Porque… a pesar de todo, estamos juntos. Eso es lo que importa.
Mikey-Sí…tienes razón. Además, tener a alguien con quien compartir las locuras de ser padres hace que todo valga la pena.
Takemichi-Mikey… ¿alguna vez te has preguntado si lo estamos haciendo bien?
Mikey-¿Hacerlo bien? Somos Tú y yo, no somos perfectos. Pero si Nil y Yoshi son felices, si se sienten amados… entonces creo que lo estamos haciendo bien.
Takemichi-Tienes razón. A veces me preocupo demasiado.
Mikey-Y yo me preocupo muy poco. Supongo que nos equilibramos, ¿no?
Takemichi-Supongo que sí-dice soltando una risita
Se quedan en silencio, disfrutando de la compañía del otro, sin palabras necesarias. Finalmente, Mikey se acomoda más cerca de Takemichi, apoyando su cabeza en el hombro de él.
Mikey-¿Sabes qué? Deberíamos hacer esto más seguido. Solo… detenernos, respirar.
Takemichi-Sí, deberíamos.
Ambos se quedan así, en silencio, disfrutando de su momento a solas, hasta que finalmente se quedan dormidos, abrazados en el sofá, con una paz que solo se encuentran en esos raros momentos de tranquilidad compartida.
Mikey se despierta de la siesta en el sofá, sintiéndose completamente descansado. El sol de la tarde entra suavemente por las ventanas, llenando la habitación de una luz cálida. A su lado, Takemichi sigue dormido, respirando suavemente.
Mikey-Incluso cuando duermes me gustas
Con un suave movimiento, Mikey acaricia el cabello de Takemichi, sintiendo la suavidad entre sus dedos. La tranquilidad de la tarde y la intimidad del momento lo envuelven en una sensación de calidez y cercanía.
Mikey-¿Sabes cuánto te aprecio? Incluso cuando la vida es un caos, siempre estás ahí para mí.
Takemichi se mueve ligeramente en su sueño, acercándose más a Mikey, buscando su calor. Mikey sonríe ante el gesto, sintiendo una oleada de cariño por su pareja.
Mikey-Despierta, dormilón. El día aún no ha terminado- Susurra contra su oído
Takemichi abre los ojos lentamente, parpadeando para ajustar la vista. Al ver a Mikey tan cerca, una sonrisa somnolienta se forma en sus labios.
Takemichi-increíble que te hayas despertado antes que yo
Mikey-Sí, pero está bien. A veces es bueno desconectarse del mundo por un rato. Está claro que tú lo has hecho más profundamente que yo
Mikey se inclina hacia adelante, rozando sus labios contra los de Takemichi en un beso suave, lleno de cariño y ternura. No hay prisa, solo el deseo de estar cerca, de sentir la conexión entre ambos.
El beso se profundiza, lento y lleno de sentimiento. No es solo un beso, sino una forma de expresar todo lo que sienten el uno por el otro, toda la gratitud, el amor, y la comprensión que han construido a lo largo del tiempo.
La tarde pasa así, con ambos en el sofá, compartiendo pequeños gestos de afecto, disfrutando de la calma y de la presencia del otro. No necesitan decir mucho; en esos momentos, el silencio es suficiente para comunicar todo lo que sienten.
Finalmente, cuando el sol comienza a ponerse, Mikey se aparta ligeramente, sonriendo con una mirada traviesa.
Mikey-Podríamos quedarnos aquí todo el día…o podríamos aprovechar que estamos solos y hacer algo más divertido.
Takemichi-¿Como qué?
Mikey-Como simplemente estar juntos. Sin preocupaciones, sin distracciones. Solo nosotros.
Takemichi asiente, comprendiendo el significado más profundo detrás de las palabras de Mikey. Se acomodan en el sofá, abrazándose, dejando que el momento dure el tiempo que quiera, sabiendo que es en estos pequeños momentos de intimidad donde su relación se fortalece aún más.
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¡Somos padres!
Teen FictionTakemichi miraba aquella prueba de embarazo mientras su mano temblaba y no lo entendía ¿¡Como estaba embarazo!? Takemichi-17 Mikey-18