Al día siguiente ella fue la primera en despertar, de hecho no podía dormir, estaba más ansiosa de ĺo que pensaba por ver a sus padres.
Entonces se dio una ducha y cuando salió del baño vio que sus amigos estaban despiertos.
Valéria - Buenos días, están listos para partir?
Carla - Nascí lista querida
Miguel - Ya estoy listo, desayunamos?
Valéria - Desayunemos con mis papás, así recuerdo los viejos tiempos cuando todavía vivía con ellos.
Todos fueron a empacar las últimas cosas que faltaban y tomaron el taxi para llegar a la casa de los Ramírez. Cuando llegaron, Miguel entró primero y Mireya fue quien lo atendió.
Mireya - Miguel, qué bueno verte, qué haces en Colombia?
Miguel - Buenos días señora Ramírez, estoy de vacaciones y viene a hacerles una sorpresa
Mireya - Me alegra verte, tu madre se alegrará de saber que estás aquí, ven a tomar un café
Miguel - Antes del café, tengo a alguien que te gustará ver
Miguel sale para ir tras Valéria y le dice que entre, Mireya, al ver a su hija no puede contenerse y abraza a su hija y se pone a llorar
Valéria que hasta ahora contenía las lágrimas, también lloró, y sus amigos se quedaron en la puerta observando esa conmovedora escena.
Mireya - Pasa, sentémonos y desayunemos, tu hermana bajará pronto, le encantará verte aquí después de tanto tiempo.
Valéria - Y mi papá? Dónde está?
Mireya - Está en la oficina con una amiga, su hija está en problemas y no sabe a quién más recurrir...
Valéria - Bueno mamá, ella es mi amiga Carla, te acuerdas de ella?
Mireya - Claro que la recuerdo, de verdad crees que me olvidaré de las personas que son tu familia cuando estés lejos de nosotros?
Carla - Buenos días señora Ramírez - se abrazan
Mireya - Buenos días querida, tienen hambre? Prepararé algo para ustedes
Mireya fue a la cocina a preparar el desayuno y Valéria la siguió para ayudarla, y mientras estaban en la cocina, el señor Byron salió de la oficina con la señora que lo acompañaba.
Byron - Miguel, Carla, cuándo llegaron? Es bueno verlos aquí
Miguel, Carla - Buenos días Sr. Byron
Miguel - Llegamos anoche, dormimos en el hotel porque era tarde y...
Miguel estaba hablando pero fue interrumpido cuando Byron vio a Valéria salir de la cocina
Byron - Mi hermosa hija, tú también viniste - le dio un fuerte y largo abrazo
Valéria - Hola papá, yo también te extrañé
Cuando los dos se soltaron, la señora que acompañaba al papá de Vale, sorprendida y emocionada, dijo...
XXX - No puedo creer que estés aquí - y la abrazó
Byron - Ya se conocían? - preguntó sorprendido
Valéria - Ella estuvo en Califórnia para que yo pudiera ayudarte en algo
Byron - Entonces encontró la mejor abogada del mundo y no me lo dijo señora Ojeda! - sonrió orgulloso y feliz
Señora Ojeda - Estaba ocupada así que volví a Colombia
Byron - Pero ahora ella está aquí y podrá ayudarte, verdad hija?
Valéria miró a su padre sonriendo felizmente y no pudo decir que no, no quería decepcionarlo.
Valéria - Claro que sí, papá, pero no traje los papeles
Byron - No hay problema, ella los dejó aquí conmigo, podemos echarles un vistazo.
Mireya - Primero desayunemos, deben tener hambre luego viene el trabajo, le puedo servir un café señora Omaira?
Señora Ojeda - No gracias, tengo algunas cosas que hacer, vuelvo más tarde - abraza nuevamente a Valéria y le dice al oído - Gracias por estar aquí, ahora mi hija tiene la oportunidad de ser libre.
Se despedió de todos y se fue, Valéria se quedó un rato en el mismo ligar pensando y luego se unió a los demás para desayunar.
Al ver a todos sus seres queridos sentados, hablando y riendo, ella finalmente sintió la tranquilidad que tanto necesitaba, pero por alguna extraña razón seguía pensando en la señora Ojeda
Al cabo de unas horas se dirigió a la oficina de su padre sin que nadie se diera cuenta, pero su amigo que siempre estaba atento la vio y la siguió.
Él se paró en la puerta observando cada movimiento de ella, ella estaba tan distraída en sus pensamientos que no siquiera se dio cuenta.
Miguel - Conozco esa mirada, vas a trabajar en este caso,no ?
Valéria - Miguel, me asustaste - dijo, volteando rápidamente - Está mujer fue a Califórnia detrás de mí para defender a su hija.
Miguel - Esa es la única razón? Porque ella fue allí y usted no quiso tomar el caso, qué le hizo cambiar de opinión?
Valéria - No sé qué me hizo cambiar de opinión, sólo sé que algo dentro de mí me dice que tengo que defender a la hija de esta señora.
Miguel - Por dónde empezamos?
La pregunta de Miguel dejó a Valéria asombrada, él la miró y dijo...
Miguel - No me mires así, necesitas un asistente y tu secretaria no está, así que yo seré tu asistente
Ella le sonrió y empezó a buscar algo en el escritorio de su papá, él entró y vio que ella estaba buscando algo y dijo..
Byron - Lo que buscas está en el segundo cajón.
Valéria - Gracias papá, de donde conoce a la señora Ojeda?
Byron - Trabajé con su esposo y un día él hizo una cena familia e invitó a nuestra familia.
Valéria quería hacer la pregunta pero no sabia cómo, entonces Miguel preguntó.
Miguel - Entonces conociste a su hija? - Valéria lo miró agradeciéndole, se entendían con sólo mirarse
Byron - Sí, es una chica encantadora, un poco rebelde pero muy educada, te gustará Valéria - miró a su hija y se alejó sonriendo
Valéria y Miguel no entendieron a qué se refería con eso, ella tomó la carpeta con los documentos del segundo cajón y se sentaron a analizar los documentos.
ESTÁS LEYENDO
La abogada perfecta: intentando encontrarse a sí misma
FanfictionUna abogada con una vida profesional estable comienza a cuestionarse y decide dedicarse a algo que realmente disfruta hacer. Con la ayuda de sus amigos salió de su zona de confort y decidió vivir la vida como ella quiere y no como vivía.