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Después de la plática con Kai, Isadora estuvo pensando en qué hacer con Jay, hasta que por fin se le ocurrió una idea, la rubia había esperado a que el chico estuviera solo para acercarse ─Jay, que bueno que te encuentro─ Hablo Feliz Isadora mientras tomaba asiento al lado del chico
Jay levantó la vista de su libro cuando escucho la voz de la rubia, recordando las palabras que Mal le había dicho "No me importa que es lo que hagas, pero convéncela de dar su aprobación para que pueda ir al baile con Ben" ─ ¿Alguna razón en especial por la que quieras que estuviera solo? ─Pregunto con una sonrisa coqueta
Isadora se sonrojó ligeramente ante la pregunta de Jay y acerco una bolsa hacia el chico ─Te compre algo─
El chico observo curioso la bolsa y la tomo encontrando una caja de teléfono y al lado otra caja más pequeña ─ ¿Otro teléfono? ─Pregunto confundido el chico, aun no sabía cómo utilizar el que Ben les había comprado y el que Isadora le estaba dand0 se notaba de mucho mejor calidad, era obvio que tampoco sabría cómo usarlo
La rubia asintió feliz ─Se que Ben les compro teléfonos a ti y a tus amigos, pero son teléfonos de muy baja calidad, este es último modelo─
Jay miró a Isadora, aún sorprendido por el gesto, sabía que todo esto solo lo hacía por el efecto de la galleta, pero no podía evitar sentir una sensación extraña, nunca antes había recibido un regalo ─Gracias...─ Susurro Jay, nunca antes le había dicho gracias a alguien por lo que se sentía raro escuchar esa palabra salir de su boca
─No tienes que agradecerme, ahora abre la otra caja─ Jay abrió la caja más pequeña encontrándose con unas llaves, el chico miro confundida a Isadora esperando que le explicara el porqué de las llaves ─ ¿Sabes manejar? ─
─Nunca antes lo he hecho, pero supongo que no debe de ser tan difícil─ Respondió Jay
Isadora asintió ante la explicación sacando su teléfono ─Todos en Auradon tiene una moto─ Isadora puso en su teléfono las imágenes de varias personas en Auradon con su propia moto ─Normalmente son los hombres las que la tienen, pero también suele haber mujeres con ella y tú te vez como el tipo de chico que sabe usar una moto, por lo que te compre una─
Jay se quedó sin palabras ante lo que dijo la chica, en definitiva, esa galleta sí que era poderosa ─ ¿Me compraste una moto? ─Pregunto asombrado, Isadora asintió con una sonrisa
─Si, todas las motos se guardan en un lugar, por lo que está ahí, te puedo llevar a el cuando quieras─
─ ¿Cuándo quiera? ─ Pregunto Jay a lo que la chica asintió ─ ¿Por qué no vamos ahora? ─
─ ¡Claro! ─ Dijo con una sonrisa mientras se levantaba de su lugar ─Vamos─ Jay se levantó al igual que la chica y la siguió ─Por cierto ¿Como te va con los entrenamientos de tourney? ─
Jay sonrió por la pregunta ─Bastante bien y no es por alardear, pero soy el mejor del equipo─
─Lo sé, te he visto cuando entreno con las porristas, eres un gran jugador─
El chico observo por un momento a la rubia ─ ¿Mejor que tu hermano? ─
Isadora asintió levemente ─Mejor que Enzo─
Jay levantó una ceja, sorprendido ─ ¿En serio? Recuerdo que habías dicho que tu hermano era mucho mejor que yo─
La chica se rio suavemente ─Enzo es increíble, no me malinterpretes, pero te he visto jugando y el entrenado tiene razón, eres mucho mejor jugador que todos los demás, solo no le digas a mi hermano que dijo esto, se enojara si se entera que no pienso que él es mejor jugador─
Ambos chicos estuvieron hablando un buen rato sobre varios temas, Jay se sentía cómodo estando con la rubia y por momentos le llegaba la culpa por haberla hechizado, sabía que sin el efecto de la galleta ambos no se hubieran vuelto a dirigir la palabra después de la salida del equipo
Isadora notó que Jay estaba pensativo, mirando al suelo mientras caminaban hacia el estacionamiento. ─ ¿Todo bien? ─ Preguntó con preocupación
Jay levantó la mirada y le ofreció una sonrisa forzada ─ Sí, solo... estaba pensando─
─ ¿En qué? ─Pregunto Isadora
El chico vio el momento perfecto para convencerla de acetar a Mal ─En Mal─ Isadora frunció el ceño ─Sabes ella está en verdad quiere mucho a Ben y se enteró que no podrá asistir a la coronación con él a menos que ustedes le den permiso─
Isadora frunció el ceño ante la mención de Mal ─ ¿De verdad Mal se preocupa tanto por Ben? ─ Preguntó con una mezcla de curiosidad ─No parece el tipo de persona que se preocuparía por esas cosas─
─ Lo sé, es difícil de creer, pero estar en Auradon la ha cambiado, ella realmente quiere acompañar a Ben en un momento tan importante ¿Crees poder darle tu aprobación? solo hace falta la tuya y la de Kai─
Isadora lo miró fijamente, procesando lo que estaba escuchando ─Lo pensare─ después de esa platica ambos se quedaron en silencio hasta que llegaron al lugar en donde estaba la moto, pero no era un silencio incomodo, ambos se sentían muy a gusto con la simple compañía del otro
Cuando llegaron al área de motos, la mirada de Jay se iluminó, la moto que Isadora había comprado era impresionante, Jay no sabía mucho de motos ya que jamás había visto una antes, pero se notaba que era último modelo
─ ¿Te gusta? ─Pregunto Isadora hacia el chico
─Es increíble─ Respondió Jay
Isadora sonrió feliz ─Pruébala y tranquilo dijiste que nunca habías usado una por lo que si no sabes usarla, puedo pedirle a alguien que te enseñe a usarla─
Jay negó ante la oferta de la chica ─Gracias por la oferta, pero no es necesario, no creo que sea tan difícil usarla y puedo aprender solo ─ Jay saco las llaves que Isadora le dio e intento prender la moto
Jay giró la llave en el encendido, y la moto rugió con un sonido profundo y potente, a pesar de que no tenía experiencia previa con motos, parecía tener un buen instinto para manejarla ─ ¿No subirás? ─ Pregunto Jay mirando a Isadora
La chica algo desconfiada asintió y se subió en la parte trasera de la moto abrazando a Jay para mantenerse segura
─¿Estás lista?─ Preguntó Jay, asegurándose de que ella estuviera bien sujetada.
─Sí, vamos─ Respondió Isadora con una sonrisa nerviosa
Jay aceleró suavemente y la moto comenzó a moverse, el chico a pesar de ser la primera vez que manejaba lo hacía bastante bien, como si toda su vida lo hubiera hecho, como si fuera un simple instinto
