Dos

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El primer encuentro después de cuatro años le había dejado totalmente en el suelo, Jongin era testigo de las mil y una veces que el malgeniado Do Kyungsoo duraba horas hablando de lo bonito que era un chico de secundaría que paso de robar pasteles de chocolate a sentarse tímidamente en la silla más alejada de la caja registradora y le miraba por encima de la carta de comida son un sonrojo en las mejillas.

¿Ese chico regordete y con el rostro lleno de espinillas era el mismo hombre guapo que estaba de pie nuevamente frente a su negocio? ¿Cómo es que alguien podía cambiar tanto en cuatro años? No es que antes le pareciera feo, era más bien tierno, pero ahora era justamente su tipo ideal de hombre, ¿tenía un ideal?

Mientras Chanyeol aprovecho los años que estuvo en el servicio militar para ejercitarse y dar un estirón extra, él solo logro conseguir un par de decenas más de canas en su oscuro cabello y algunas arrugas en su entrecejo por estar siempre con mala cara.

—Ayer me cerró la puerta en la cara— se quejó con un puchero Chanyeol hablando en voz baja cerca del rostro de Kyungsoo —. ¿Enserio es usted homofóbico?

—Ya deberías... de dejar de decir esas cosas ¿qué harás si alguien te escucha?

—Dudo que alguien se quisiera meter conmigo, fui dado de alta con honores del servicio militar. Fui el capitán de la mejor unidad de fuerza de ataque del comando.

—Igualmente... no quiero inconvenientes en mi tienda.

Kyungsoo bajo la mirada, miró sus uñas y algo ansioso mordió las puntas de sus dedos. Ese día si había llevado sus lentes, pero se estaba arrepintiendo pues ahora podía notar el cabello negro corto de Chanyeol caerle en la frente, sus bonitas orejas rojizas por el clima, sus dientes blancos y pequeños comparados a su gran altura, ese brillo precioso en los ojos cada que le veía y por sobre todas las cosas sus labios, sus labios eran demasiado rosados y apetecibles. En resumidas cuentas, Park Chanyeol era perfecto.

—Kyungsoo es un hombre tan —, le miró un par de veces y sonrió.

—Si vas a faltarme el respeto, te pido que.

—...Que me vaya —, termino la frase. Negó con la cabeza y estiro su mano acariciando la mejilla de Kyungsoo —. Iba a decir que usted es un hombre sumamente hermoso. Cuando era un niño no me acerque porque sabía que iba a decir que solo sentía admiración por usted, y la verdad es que por mucho tiempo hasta yo mismo lo creí. Pero todo eso se fue al carajo cuando a mi mente solo venía su sonrisa, cuando mi corazón se agitaba lleno de celos cuando su amigo venía a hablar con usted, se reían tanto, era de esa forma y usted ni siquiera me veía... sabiendo que no tenía una oportunidad me enliste al servicio militar y me quede un tiempo extra para ganar dinero.

—Pensé que habías audicionado para ser idol en una empresa.

—¿Lo recuerda? Oh... que vergüenza, la verdad es que me rechazaron porque estaba con sobrepeso, eso me hizo sentir tan mal conmigo mismo. Me dijeron que tenía talento, pero que mi físico no encajaba con sus estándares. Me presenté a varias y todas dijeron lo mismo, así que cansado de eso decidí mejor iniciar a componer de manera independiente y bueno... he tenido éxito, no me quejo, algunas de mis canciones las han elegido para EXO.

—¡¿EXO?! Incluso un hombre viejo como yo sabe quiénes son ellos.

—Bueno, después de todo Jongin es su amigo... —Chanyeol suspiró pesado.

—¿Por qué ese suspiro?

—No lo sé, es que no puedo competir contra Jongin de EXO. Soy solo un desempleado de veintidós años, homosexual y que tiene un amor imposible por el señor que vende pasteles al lado de su casa, no hay nada extraordinario por ofrecer, empezando que si yo fuera mujer entonces podría tener una oportunidad, o si fuera de una banda muy famosa al menos podría dármelas de fuckboy y decir algo estúpido como "¿quieres conocer el paraíso por una noche?"

Kyungsoo abrió sus ojos, sus labios se curvaron en una sonrisa y como nunca lo había hecho comenzó a reír de manera escandalosa. Estiro sus manos golpeando ligeramente el hombro derecho de Chanyeol y negó en repetidas ocasiones.

—¡Auch! —, se quejó de manera fingida Chanyeol sobándose el hombro.

—L-lo siento, es que... no me gustan las mujeres.

Confesó como si fuera lo más normal del mundo, y podría ser de esa manera para Chanyeol cuando realmente su corazón estaba agitado y sus manos sudaban frío por lo que se le había escapado de su boca. Por treinta años había callado, por treinta años se había mantenido encerrado en sí mismo. ¿Qué pasaría si ese chico solo estaba intentando adentrarse a su vida para hacer un chisme que perjudicaría a Jongin?

—Entonces, deme una oportunidad. Yo, al menos sé cocinar y vivo solo... aunque mis padres todavía me ayudan con el arriendo. Pero eso es algo, ¿verdad? Enserio me gusta.

—¿Qué te gusta de mí? Soy un hombre viejo.

—¿Hombre viejo? Es usted... — De un saltó se levantó de la mesa y extendió sus brazos hacia el techo, con una sonrisa torpe miró a Kyungsoo —. Es usted la estrella más hermosa que brilla en el cielo, es usted la persona con las mejores proporciones que existen. Su altura es ideal. Sus labios son deseables. Su piel es perfecta. Sus ojos son hermosos. Enserio me gustan sus cejas. Su voz es tan agradable. Las curvas que componen su cuerpo son tan finas. Es como —, suspiró y sonrió volviendo a sentarse —, me siento tan afortunado únicamente de estar hablando con usted.

—E-entiendo —, ajusto sus lentes evitando sonreír por lo dicho por el alto —. ¿Qué pasa si te digo que estoy saliendo con alguien?

—Entonces voy a esperar. Si es alguien que le hace feliz entonces me voy a alejar, pero como sé que puedo ser mejor entonces voy a esperar por usted toda la vida.

—¿Eres tonto? —, ladeo el rostro sonriendo al ver el comportamiento animado de Chanyeol.

—Mi madre dice que sí...

—Tonto.

—¡Avanzamos, señor Kyungsoo!

—No me digas señor, me hace sentir má anciano. Por favor, deja de usar lenguaje formal.

—Lo haré —, inclino su cuerpo hacia adelante posando su rostro en su mano —. A cambio de algo.

—¿Qué quieres?

—Una cita, estoy confiado en que una cita será suficiente para que usted determine si quiere darme una oportunidad o no.

—¿Y si me niego a ir a esa cita?

—Haré un escándalo frente a su tienda —, amenazo con un puchero. Algo demasiado tierno como para rechazarlo.

—Bien... me convenciste.

—Realmente no esperaba usted que me esforzara tanto, sus ojos me indican lo feliz que esta por esta cita.

—No te pases, Chanyeol.

—Este viernes, a las 8:00 pm. Pasaré por usted aquí.

—El lenguaje...

—Déjelo para ese día, Kyungsoo.  

Sabor a Romance || ChanSoo [Terminada]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora