La Mamá De Mi Mejor Amiga - SuperCorp

Otra cosa más por la cual enamorarme de ella.

Al día siguiente desperté más temprano de lo que esperaba, así que aproveché la situación para irme a primera hora de la casa de Lori. Le mandé un par de mensajes explicándole porqué me había ido tan temprano y argumentando que era porque mi mamá necesitaba mi ayuda.

Obviamente eso era falso, la verdad es que no me encontraba de humor.

Que yo estuviera en esa casa era peligroso, cada vez me costaba más controlarme y ocultar mi no tan pequeño crush.

En cualquier momento saltaría encima de la mamá de Lori o diría algo sin pensarlo de nuevo, no quería salir arruinar las cosas y hacerlas más incómodas de lo que ya estaban.

¿Por qué no podía haberme enamorado de Lori? Ni siquiera sabía si era de verdad un enamoramiento o un simple crush, definitivamente era muy pronto para hablar de amor. Todo hubiera sudo más sencillo si se tratara de mi mejor amiga pero no, debía sentirme atraída por su madre.

Pero es que el día de ayer me trató tan bien y me hizo sentir especial.

Nunca nadie me había dicho cosas tan bonitas, ni me había hecho sentir bien conmigo misma y me había aconsejado y... además era tan hermosa...

Suspire como el adolescente hormonal que era con tan solo pensar en la tarde de ayer.

La imagen de su cuerpo estaría grabada permanentemente en mi memoria, mi piel ardía con tan sólo pensar en ella y se me aceleraba el corazón.

Estaba tan perdida, solo la había visto dos veces y ya me traía loca, ¿Cómo pude ser tan débil? me maldije por eso y por ser tan descarada al tener malos pensamientos con la mamá de mi mejor amiga.

Eso estaba muy mal.

Y sin mencionar que ahora estaba destinada a sufrir y verla enamorada de otra persona... de su esposo, un hombre perfecto y buena persona, no tenía defectos y no había punto de comparación.

Era como elegir entre el cobre y el oro.

Nunca en la vida me elegiría a mi por el, bajo ningun punto de vista. Eran solo fantasías que mi alocada imaginación creaba con el único propósito de hacerme sentir miserable cuando me percatara de lo loco e imposible que era todo eso.

Me sentía triste y sola. Nadie me deseaba, y los que si, se aburrían rápidamente de mí.

Si tan solo pudiera cambiar.

Miles de pensamientos tóxicos nublaron mi mente, sentía como un ataque de pánico comenzaba a formarse en el interior de mis entrañas como cada vez que la ansiedad por darle muchas vueltas a algo me invadía la cabeza.

Ni siquiera noté cuando ya estaba llorando así que me fui a sentar a la banca de un parque que quedaba cerca de la casa de Lori. Ni siquiera logré llegar al paradero de buses.

No era muy normal que me dieran esos ataques pero es que esta mañana estaba siendo especialmente difícil, haciéndome pensar en lo sola que estaba y en lo poco probable que era que eso cambiará.

Nadie nunca me querría, era demasiado imperfecta como para gustarle a alguien.

Luego de unos minutos de sollozar silenciosamente en la misma posición, sentí como alguien me tocaba el hombro así que levante mi cabeza de inmediato algo asustada por el repentino contacto.