Lesslie siempre había sido la mejor amiga de Bryan. Juntos, habían compartido risas, aventuras y secretos que solo ellos dos conocían. Su conexión era tan fuerte que, para aquellos que los rodeaban, era difícil no verlos como algo más que amigos. Durante años, habían sido inseparables, confiando el uno en el otro como si fueran las únicas dos personas en el mundo. Pero todo cambió cuando Carolina entró en la vida de Bryan.
Carolina era todo lo que Bryan había estado buscando: inteligente, cariñosa, y con una energía que iluminaba cualquier habitación. Al principio, Lesslie estaba feliz por su amigo, contenta de ver que él había encontrado a alguien que lo hacía tan feliz. Sin embargo, a medida que la relación entre Bryan y Carolina florecía, Lesslie comenzó a sentir que algo dentro de ella se rompía lentamente.
Lo que inicialmente era una pequeña molestia, una punzada de celos que intentaba ignorar, pronto se convirtió en una sensación constante de vacío. La presencia de Carolina cambió todo. Bryan comenzó a pasar más tiempo con Carolina, y las conversaciones largas y profundas entre él y Lesslie se volvieron menos frecuentes. Las sonrisas que antes compartían ahora parecían superficiales, y las miradas cómplices fueron reemplazadas por un silencio incómodo.
Lesslie intentó seguir adelante, convencerse de que todo estaba bien. Pero cada vez que veía a Bryan y Carolina juntos, la tristeza la envolvía. Era un dolor sordo y persistente, como una herida que nunca terminaba de sanar. Aunque Bryan no se daba cuenta, cada momento que pasaba con Carolina, cada sonrisa que le dedicaba, alejaba a Lesslie un poco más.
Carolina, por su parte, notó la distancia creciente entre Bryan y Lesslie. Aunque se llevaba bien con Lesslie, no podía ignorar la tensión que empezaba a formarse. En su interior, Carolina sabía que había algo entre Bryan y Lesslie que iba más allá de la amistad, pero decidió no mencionarlo, temiendo que sus inseguridades pudieran dañar su relación con Bryan.
Mientras tanto, Lesslie se encontraba en una encrucijada emocional. Por un lado, quería apoyar a Bryan y ser feliz por él, pero por otro, no podía ignorar el dolor que sentía cada vez que veía cómo él se alejaba más de su vida. Se sentía atrapada en un ciclo interminable de sonrisas forzadas y noches solitarias, donde la única compañía que tenía eran sus propios pensamientos oscuros.
La historia de "Ayúdala" es un relato desgarrador sobre la pérdida, el amor no correspondido y la inevitable separación entre dos personas que alguna vez fueron inseparables. A través de los ojos de Lesslie, el lector es llevado en un viaje emocional donde el dolor y la tristeza son los protagonistas. Cada capítulo es una exploración profunda de la psique de Lesslie, mostrando cómo el alejamiento de Bryan la afecta de maneras que ni siquiera ella puede comprender por completo.
Es una historia que resonará en aquellos que han experimentado la angustia de ver a alguien a quien aman elegir a otra persona.
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