Infravalorados - Theodore Nott

3

Theodore

Bajé a desayunar junto a Giulia.
Drusilla y Pansy estaban allí, una medio dormida encima de la mesa y la otra riendose de ella.

—Buenos días. — dijo mi hermana

—Buenas — dijo Pansy

Drusilla solo gruñó.
Me reí.

—¿Qué habiais bebido?

—Media botella cada uno de un... como se llama eso... lo que coño sea... que compré en Beauxbatons... — contestó, su voz se notaba cansada y molesta.

—¿Era fuerte o qué?

—Lo flipas, tío...

—¿A que sabía?

—Al principio a mierda
me reí
—Luego a... — resopló — yo que sé... a algo, pero estaba bien...

Draco apareció y se sentó a su lado.

—Blaise está igual de mal que ella. — dijo antes de beber un sorbo de su vaso.

—No me des la chapa, Barbie, lo hemos pillado — murmuró ella poniendo la fente sobre la mesa.

—Ya te vale, beber un martes.

—Shh.

—¿A quien se le ocu-?

—Shhh.

—"Sh" tú.

—¿Te puedes callar ya?

—Pidelo bien.

—Oh, queridisimo gilipollas al que llamo hermano, oh, por favor, cállate la puta boca.

—Eso no es pedirlo bien.

Ella estampó la frente contra la mesa para dar la conversación por terminada.

𓆉

Drusilla

Snape nos puso por parejas para un trabajo de pociones.
Me tocó con Fred, uno de los gemelos Gryffindor.
Leímos la página de explicación de la poción.
La poción para la paz.

—¿La flor esa se corta o no? — le pregunté a Fred

—Le quitamos los pétalos y los echamos y ya, para qué complicarse la vida.

—Bueno.

Echamos los ingredientes.

Snape pasó en frente nuestra.

—¿Han acabado?

Fred y yo asentimos, no muy seguros, pero asentimos.

—Visualmente está bien... — dijo Snape — pero es volátil.

Ambos gruñimos.

—Me has caído bien, Malfoy — me dijo Fred mientras caminabamos a la biblioteca

—Y tú a mi, Weasley.

Estuvimos en la biblioteca un rato, el leyendo y yo dibujando.

Después caminamos hasta las mazmorras.

—Las pruebas de Quidditch son pronto, ¿no?— pregunté

—Sí, la semana que viene, yo entro seguro, soy el mejor.

—Si me diesen diez céntimos por cada chico que me ha dicho eso...

—¿Quien más?

—McLaggen.

—¿Y te lo crees?

—La verdad que no.

—Bien.

Se despidió de mí con una sonrisa y entré a la sala común.

—Mira silla, no me jodas — dijo Draco — ¿te has ido con el Weasley?

—Encantada de verte a ti también, hermanito querido.

—Dime que no te has liado con él.

—No, Draco, no me he liado con él.

—Más te vale.

Puse los ojos en blanco y me senté al lado de Pansy.

—¿Te has pillado del pelizanahorias?

Esta vez era Nott.

—No.

—Mejor, dicen que está loco por una.

—¿Por quién?

—¿Te importa entonces? hmm, curioso.

—No me importa, quiero cotilleo, o me lo cuentas tú o hago reunión con Pansy y Blaise.

—Ah, y otra cosa.

—Dígame.

—¿Sabes que Blaise te come con los ojos?

—Y alguna vez con otra cosa.

Escuché una carcajada que venía del sillón en el que él estaba sentado.
—Vale, eso no me lo esperaba.

—Bueno, ¿algo más?

—Sí.

—Pues cuéntame.

—A Weasley le gusta una Slytherin, Sofía creo que se llama, no sé si está en nuestro año, es guapa, no me la suelo cruzar mucho pero creo que se lleva con Blaise y con Mattheo.

—Hmm...

—¿Celosa o qué?

—¿Yo por qué?

—Ese "hmm" me sonaba a "hmm, con mi macho pecho peludo ni una".

Esta vez me reí yo.
—Pues no era eso.

—¿Segura? porque por esta zona hay muchos que se ofrecen de tributo para darle celos al vagabundo ese. Aunque yo de ser tú no me iría con algunos... Mattheo y Lorenzo, por ejemplo, no son buenas ideas.

—Draco me contó.

—Como debe ser, no vaya a ser que le pase nada a la princesita de los Malfoy

—Calla

Me centré en Pansy para sacar a Theodore de mi cabeza.