Kevin Tran

46 3 1
                                    

Kevin Tran se encontraba en la biblioteca del búnker, rodeado de libros antiguos y pergaminos. Desde que había aceptado su papel como profeta, su vida se había convertido en una constante búsqueda de respuestas y traducciones de mensajes divinos. Estaba acostumbrado al silencio que le rodeaba, pero aquella noche no estaba solo.

"¿Necesitas ayuda con eso?" La voz suave pero firme de kristal lo sacó de su concentración.

Ella se acercó, con una sonrisa ligera en sus labios, y se sentó junto a él. La tenue luz de la lámpara acentuaba la calidez en su mirada, algo que siempre había encontrado reconfortante en medio del caos que los rodeaba.

Kevin levantó la vista y le devolvió la sonrisa, algo raro en él últimamente.

-Solo tratando de descifrar estos símbolos. Parece que cada vez que creo tener algo, surge una nueva complicación- dijo Kevin , Ella se inclinó un poco para mirar los textos. Sus rostros estaban lo suficientemente cerca como para que Kevin pudiera sentir el leve perfume a lavanda que siempre la acompañaba.

-Bueno, sabes que no soy tan buena como Sam con estas cosas, pero puedo intentarlo-dijo Kristal

A medida que se sumergían en el trabajo, el tiempo parecía detenerse. La gravedad de las circunstancias se desvanecía brevemente, dejando espacio solo para los susurros de las páginas y el ocasional roce de sus manos al pasarle un libro o un pergamino.

Después de un rato, ella se detuvo y lo miró fijamente.

-Kevin... sé que todo esto es mucho. Pero quiero que sepas que no estás solo. Estamos en esto juntos. No importa lo que pase, te cubrimos la espalda.-

Kevin sintió una oleada de gratitud y algo más que no podía identificar con claridad. Su corazón latía un poco más rápido, pero no era de miedo o ansiedad. Era... algo diferente.

-Gracias- dijo suavemente- no sé qué haría sin ustedes-

Ella sonrió, esta vez más amplia.

-Probablemente lo mismo que ahora, pero con mucho menos café.-dijo Kristal

Ambos rieron, y por un momento, el peso de la guerra contra los demonios, los ángeles y todo lo demás se desvaneció, dejando solo a dos jóvenes compartiendo un momento de tranquilidad en medio de la tormenta.

Y aunque ninguno lo mencionó, ambos sintieron que ese momento había sido necesario, un pequeño respiro que les recordaba que aún había algo de humanidad y calidez en sus vidas, incluso en los tiempos más oscuros.




AQUI TENEMOS UN PEDIDO A NOMBRE DE LenaAngelo4

espero que te allá gustado 

espero que te allá gustado 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.






Supernatural - ONE SHOTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora