Solo alcancé a terminar este capítulo, sorry.
Estoy a nada de entrar al trabajo, así que no diré mucho. El próximo miércoles actualizaré Destinados, ya que me estoy tardando demasiado en terminarlo.
De todos modos, espero disfruten de este capítulo.
En ciertos casos continuar, tan solo continuar, es algo sobrehumano.
- Bell Cranel.
X X X
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Tras una semana de iniciar una relación de noviazgo, el primer problema surgió de inmediato, y ese era, por supuesto, lo atractivo que resultó ser Bell para las mujeres que iban a su trabajo.
No era una exageración decir que muchas iban a pedir un par de cafés solo para ser atendidas por él y coquetearle abierta y descaradamente.
Ahora mismo, desde una mesa ubicada en la esquina del lugar, miré la espalda de mi novio, que se inclinaba con una sonrisa para servir un par de bebidas a unas clientes. Miré atentamente el sonrojo y las sonrisas insinuantes de esas mujeres.
"No estoy celosa".
Lo estaba.
Sentía demasiado celos, pero me obligaba a mí misma a creer lo contrario por el bien de nuestra relación.
Lo viera como lo viera, incluso si tenía el derecho como su novia, mostrar abiertamente mis celos y mi personalidad posesiva era una clara bandera roja. No iba acorde a una mujer como yo, que gozaba de una belleza comparable a las Diosas y desprendía una aura madura.
"¿Cuánto falta para su descanso?".
Dejé de ver la causa de mis celos y tomé un sorbo a la taza de té en la mesa, recargando la mejilla sobre la palma de mi mano para disimular el puchero que estaba haciendo.
Traté de no pensar en el tiempo, pero me encontré contando los segundos hasta la hora del descanso de Bell.
Cuando llegó, el puchero en mi mejilla desapareció y, en cambio, mis labios se curvaron en una sonrisa cuando vi a Bell caminar hacia mí con esa linda cara suya, mirándome con los ojos que tanto me gustan.
Solo eran 30 minutos de descanso, ya que Natalia no podía manejar ella sola el local por más tiempo que ese.
Y en cuanto a la cercanía entre ella y Bell, bueno, tuve que darle a conocer el hecho de estar saliendo con él y dejar en claro que me molestaba lo "cercana" que llegaba a ser con alguien que no era más que un simple empleado.
Lo que llevó a la cancelación de los misteriosos castigos que le daba cuando Bell legaba tarde (que casi no pasaba ya). También decidí no preguntar sobre lo que pasaba en dichos castigos del pasado por el bien de mi paz mental.
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Danmachi: Un fantasma en el calabozo.
FanfictionHay un fantasma en el calabozo. No vayas de noche, no vayas solo, porque una vez en sus manos, no hay vuelta atrás. No lo mires a los ojos, no escuches su voz. Cuando el calabozo grita, es seguro, cuando el calabozo está callado, corre sin mirar a...