Capítulo 3

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Sara

Sara se estiró perezosamente en su cama, disfrutando del silencio que llenaba la habitación. Los rayos del sol se filtraban a través de las cortinas, creando un ambiente cálido y acogedor. Se quedó mirando el techo por unos minutos, tratando de encontrar la energía para levantarse. Finalmente, con un suspiro, se incorporó y se dirigió al baño para lavarse el rostro.

Hace una semana los albañiles habían comenzado a trabajar en la construcción de la cabaña,Sara seguía encontrado sospechoso que el arquitecto solo hubiera enviado tres albañiles para hacer el trabajo,pero su madre y Fernando no lo encontraban sospechoso,así que Sara se guardó sus sospechas y continuó con su rutina.

Fernando había regresado a la hacienda hace tres días y su relación seguía igual de fría como en Bogotá y realmente a Sara no le importaba lo único que le molestaba era que su familia comenzará a darse cuenta y lo menos que Sara quería era que su mamá se metiera.

Su madre,Sara suspiró pesadamente al pensar en su madre,amaba a su madre, pero Gabriela Acevedo podía llegar a ser asfixiante y era algo con lo que Sara había tenido que aceptar,la mayor parte del tiempo terminaba cediendo para mantener una relación agradable con su madre.

Sacudió su cabeza e ignoro esos pensamientos, miró al espejo mientras se lavaba la cara, observando su reflejo con una mezcla de resignación y determinación. No iba a permitir que su matrimonio sin amor definiera su día.

Tenía cosas que hacer,se bañó y arreglo y bajo las escaleras,al llegar al comedor toda su familia estaba esperándola para desayunar,Sara entró al comedor.

"Buenos días" dijo mientras se acercaba a su abuelo y dejaba que esté la besara en la mejilla.

"Buenos días,Sarita" respondió su abuelo con una sonrisa cálida. "Espero que hayas descansado bien,mi niña."

"Sí, abuelo, gracias," contestó Sara, mientras se sentaba junto a la silla que estaba desocupada junto a Norma.

"Sara, ¿Sucede algo con Fernando? Pareces un poco distraído y no se quedó a desayunar" dijo Gabriela en tono crítico.

Sara forzó una sonrisa"Esta todo bien, mamá, Fernando solo tiene muchas cosas en la mente,estás intentando adaptarse con todos los negocios que dejó papá."

Mientras comenzaban a desayunar, el ambiente se llenó de conversaciones triviales sobre la hacienda y los preparativos para la construcción de la cabaña.El abuelo, sentado al otro lado de la mesa, apenas participaba en la conversación, lo que no pasó desapercibido para Sara.

Sara sabía que a su abuelo no le aguardaba Fernando,jamás había aprobado su matrimonio y no estaba feliz con la construcción de la cabaña.

Sara trató de concentrarse en su plato, pero no pudo evitar lanzar miradas furtivas hacia Jimena que parecía más interesada en su plato de fruta con granola que la conversación.

Sara sabía porque Jimena estaba distraída,desde el día en que se encontraron con los obreros Jimena había desarrollado un interés por ellos, pero uno de ellos específicamente era su favorito.

Franco Reyes, Sara incluso podía saborear su nombre en la punta de su lengua,podía entender el interés por parte de Jimena,Franco era un hombre atractivo desde cualquier punto de vista,Sara no era ciega y podía admitir así misma que Franco Reyes era un hombre guapo, aunque nunca lo diría en voz alta.

Pero lo que preocupa realmente a Sara era que su madre lo descubriera y Jimena tuviera que enfrentar consecuencias,realmente no le importaba después de todo era solo un tonto e inofensivo enamoramiento por parte de Jimena.

Pasión Oculta Sara Y FrancoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora