CAP. 1

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Un salvador.

En un mundo desolado y sombrío, la muerte se había convertido en la dueña absoluta del destino. Los seres que una vez fueron humanos, ahora vagaban por la tierra como criaturas putrefactas, con un hambre insaciable de destrucción y muerte. Sus ojos, antes llenos de vida y esperanza, ahora eran meras cuencas vacías, llenas de un anhelo eterno por sembrar el caos y la desolación.

Su piel cubierta de moscas por la pudrición , colgaba de sus huesos como si fuera un pedazo de carne mal cortada , mientras que sus bocas, antes capaces de pronunciar palabras , ahora solo emitían gruñidos mostrando su boca llena de sangre . Sus manos, antes hábiles y creadoras, ahora eran garras afiladas, listas para desgarrar y destrozar cualquier cosa que se cruzara en su camino.

Estos seres  eran la personificación de la muerte misma, una plaga que se extendía por todo el mundo, dejando a su paso un rastro de destrucción y desolación. Su existencia era un recordatorio constante de que la muerte era el fin inevitable de todo, y que nadie estaba a salvo de su alcance.

En este mundo, el miedo y el terror eran los únicos sentimientos que quedaban . No había refugio, no había esperanza, solo la  oscuridad de la muerte. Y en medio de este infierno solo sobrevives si esque no te cansabas y te suicidabas antes de ser devorado mientras gritas de dolor y sientes tu piel ser degarrada  hasta quebrarte los huesos .

Pero claro, estás dispuesto a sobrevivir en un mundo así ?

Bueno siempre hay algunos pendejos que sobreviven..no?










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Soy Lucifer, el chico estrella que una vez fue el rey de las calles, el pandillero más temido y respetado. Pero ahora, en este mundo post-apocalíptico, soy solo un superviviente más, luchando por mantener mi alma atada a este cuerpo que se niega a rendirse.

Miro mi reflejo en un charco de agua estancada y apenas reconozco al ser que me devuelve la mirada. Mi piel, antes bien cuidada y fuerte, ahora es pálida y demacrada. Mis ojos, que una vez brillaban con la pasión de la rebelión, ahora están apagados, como si la llama que los alimentaba se hubiera extinguido.

Y sin embargo, sigo adelante, impulsado por una fuerza que no sé de dónde proviene. Tal vez sea la pura rabia, tal vez sea la desesperación, pero lo cierto es que sigo moviéndome, sigo buscando la manera de sobrevivir en este mundo que se ha vuelto en contra de mí.

Y así, me encuentro aquí, sentado en un rincón de una habitación en ruinas, comiendo una míserable sopa instantánea sin cocer directamente del paquete. El sabor es amargo, como mi alma. La textura es desagradable, como la realidad que me rodea. Pero no me importa, porque ya estoy jodido, ¿qué más da?

Mientras mastico este brebaje insípido, pienso en lo que fue mi vida antes. Pienso en las peleas, en las fiestas y mujeres, en las risas. Pienso en los amigos que perdí, en los enemigos que maté. Y pienso en cómo todo eso ya no importa, porque ahora solo hay una cosa que importa: sobrevivir.

Así que sigo comiendo, sigo moviéndome, sigo adelante, aunque no sé hacia dónde. Porque en este mundo, no hay esperanza, solo hay supervivencia. Y yo soy el rey de la supervivencia, el chico estrella que se niega a morir.

Mientras mastico esta sopa instantánea cruda y amarga sabor a mierda, siento como si estuviera comiendo mi propia desesperación. Mi mandíbula se mueve de manera automática, como si estuviera tratando de moler la propia esperanza que se me escapa entre los dedos.

APOCALYPSE -RADIOAPLE. ‼️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora