CAPÍTULO 03

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Hacia la mansión, en la calle una enorme nube de polvo se elevaba detrás de un coche a gran velocidad. Esteban sonrió feliz mientras hablaba con su hermano por teléfono.

Leonardo: Estoy muy feliz de que hayas vuelto hermano - dijo en videollamada - ¡Tu madre preparó una gran cena para tu regreso!

Esteban: Mi madre siempre era exagerada con todo, no hacía falta - sonrió como un tonto - ¿¡No te imaginas lo que me pasó hoy!?

Leonardo: ¡Dime!

Estaban: Conocí a una chica... joven, muy hermosa... Quizás la más guapa mexicana - riendo -

Leonardo: Esteban, estás comprometido - lo regañó - Mariana debería llegar pronto, ¡no desperdicies años de tu vida!

Esteban: Mariana tardará un poco - sonríe con picardía - Hasta entonces, puedo divertirme, ¿no?

Leonardo: Alguien podría salir lastimado en esta historia.

Esteban: ¡Ese alguien no seré yo!

Los camiones para transportar los aguacates acababan de llegar a la hacienda, pero la cosecha que había comenzado por la mañana todavía estaba en pleno apogeo. Ricardo caminaba entre los aguacateros montado en su caballo.

Ricardo (Eduardo Santamarina): ¿Oye, Ramiro? - dice mientras se baja del caballo - Necesito tu atención en la mansión - se acerca al peatón - ¡esos novatos no saben hacer nada bien!

Ramiro: Señor, de ninguna manera. Hoy es día de carga – se cruza de brazos – ¡sabe que me necesitan aquí!

Ricardo: ¡Ve a ayudar a esos niños o mañana no tendremos ni una vaca viva en esta finca!

Ramiro: ¿Es real, son tan malos? - riendo - ¡¡¡Dios mío!!!

Ricardo: ¡Ni te lo imaginas!

Ramiro: Le pasaré mis intenciones a Nicandro y a los demás y luego me iré... por cierto, felicidades por el grandullón, ¡Esteban ya es un hombre!

Ricardo: ¿Y cómo sabes eso? - preguntas -

Ramiro: Lo vi llegar por la mañana , ¿aún no lo has visto?

Ricardo: ¿Mi hijo está aquí, en México? - sonriendo - Ramiro, haz lo que te pedí y ocúpate de las cosas hoy... ¡¡¡Mi niño está en México!!! - feliz camina de regreso a su caballo ·

Ramiro: Señor, pero ya me asignó ayudar a los novatos, ¡¡¡no puedo hacerlo todo!!!

Ricardo: Eres mi mejor peón, Ramiro - súbete al caballo - ¡¡¡Sé que eres capaz!!!

En la mansión, Verónica camina ansiosa por todos lados esperando a su hijo, sin saber si tenía más miedo de lo que le pudo haber pasado o de lo que estaba haciendo en su primera noche de regreso.

Soledad: Virgen mía de Guardalupe - abrazo a Esteban - ¡Mira en el hombre que te has convertido, muchacho!

Esteban: ¡Nana, cómo te extrañé!

Al escuchar la voz de su hijo, Verónica suspira pacíficamente y camina rápidamente hacia la sala.

Esteban: Mamá... - se acerca a ella y la abraza fuerte - ¡Te extraño tanto mamá!

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⏰ Última actualización: Aug 15 ⏰

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