Capitulo 5

31 2 0
                                    

El camino de regreso al Tártaro era sombrío, y la presión que Naruto sentía era casi palpable. Cada paso que daba hacia las profundidades del inframundo lo acercaba más a la confrontación con el titán Cronos, y el tiempo parecía acelerarse a medida que avanzaban.

Kurama, caminando a su lado, mantenía su usual expresión seria, pero Naruto podía sentir la tensión en el aire. Ambos sabían que la situación era crítica y que cualquier error podría tener consecuencias catastróficas.

Finalmente, llegaron nuevamente a las puertas del Tártaro. Las enormes puertas de hierro seguían cerradas, y los sellos mágicos brillaban con una luz tenue. Sin embargo, algo había cambiado. El ambiente alrededor de las puertas era más opresivo, como si una fuerza antigua y maligna estuviera tratando de romper sus cadenas.

"Naruto," dijo Kurama en voz baja, observando los sellos con ojos críticos. "La energía aquí es diferente. Parece que los sellos están perdiendo fuerza."

Naruto asintió, sintiendo lo mismo. "Debemos actuar rápido. No sé cuánto tiempo tenemos antes de que Cronos logre romperlos por completo."

Mientras hablaban, un suave murmullo resonó en el aire, y la figura de Nyx comenzó a materializarse de nuevo, emergiendo de las sombras como una niebla oscura.

"Naruto, Kurama," dijo Nyx con su voz etérea, "el tiempo se agota. Cronos está despertando más rápido de lo que esperábamos. Su poder es inmenso, y si se libera por completo, ni siquiera los dioses podrán detenerlo."

Naruto miró a Nyx con determinación. "¿Cómo podemos detenerlo antes de que sea demasiado tarde?"

Nyx se acercó a las puertas del Tártaro, observando los sellos con una expresión grave. "Los sellos que mantienen a Cronos encerrado fueron creados con la energía combinada de los dioses olímpicos. Para reforzarlos, necesitarás la misma energía divina, pero también algo más: un sacrificio. Cronos solo puede ser contenido si se restaura el equilibrio con un acto de entrega suprema."

Naruto frunció el ceño, comprendiendo la implicación. "¿Sacrificio? ¿Qué tipo de sacrificio?"

Nyx se volvió hacia él, sus ojos brillando intensamente en la oscuridad. "Un sacrificio que provenga de la misma línea divina que lo encarceló. Alguien con la sangre de los dioses debe ofrecerse para reforzar los sellos y mantener a Cronos en su prisión."

El silencio que siguió fue abrumador. Naruto sintió el peso de las palabras de Nyx caer sobre él como una losa. Sabía lo que eso significaba. Alguien debía dar su vida para salvar los reinos, y ese alguien tenía que ser un dios.

Kurama, al darse cuenta de lo que estaba sucediendo, dio un paso adelante. "No podemos permitir que Cronos se libere, pero tampoco podemos sacrificar a uno de los nuestros sin antes explorar todas las opciones. ¿No hay otra manera?"

Nyx negó con la cabeza. "Las opciones son pocas y el tiempo, escaso. Cronos es un titán, y su poder desafía incluso a los dioses más fuertes. Sin un sacrificio, los sellos no resistirán."

Naruto apretó los puños, sintiendo una mezcla de impotencia y determinación. Estaba dispuesto a hacer lo que fuera necesario para proteger a su familia, a sus amigos y a los reinos. Pero la idea de que uno de ellos tuviera que sacrificarse lo atormentaba.

"Si no hacemos algo pronto," continuó Nyx, "la prisión se romperá, y no habrá vuelta atrás. Todos sufrirán las consecuencias de la liberación de Cronos."

Naruto miró las puertas del Tártaro, las cuales ahora parecían temblar bajo la presión de la fuerza contenida en su interior. Sabía que la decisión que debía tomar sería la más difícil de su vida.

Naruto Hijo de Hades y PersefoneDonde viven las historias. Descúbrelo ahora