› Lluvia

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La señorita Sinclair trabajaba en una empresa de gran prestigio en su zona, sin embargo, la despidieron con el pretexto de que habían encontrado a gente con más potencial en la empresa, Claro, Sinclair no se convencía del todo con la respuesta que había recibido, así que se dispuso a investigar.

Llegó a su apartamento y arrojo su saco en el sofá y se recostó a un lado de el, agarro su móvil y fue directamente a hacer una llamada.

— Hola? Tengo el gusto con el Señor, Gómez?- Pregunto la joven rubia mientras se levantaba del sofá y se dirigía a la cocina a prepararse un café.

— Por supuesto, señorita Sinclair, que se le ofrece?- Dijo el varón de la llamada.

— Quisiera saber si me puede ayudar con un caso.. personal. - Dijo con una voz de intriga

— Claro, dígame, a quien ocupa está vez..?-

La rubia se quedó un momento intentando decidir si era una buena idea hacer eso, en su mente se repetía “ Dios, si me arrepiento después, el Señor Gómez me matara- No literalmente pero si se enojara ”

— Número 1, por favor señor Gómez..

— Está segura? Recuerda que es mi hija? Si ella sale herida en eso que usted planea, le juro que la pagará muy caro Señorita Sinclair.

— Estoy consiente de eso Señor, créame que ella no saldrá herida en esto, gracias señor Gómez, la espero hoy a las 8.

— Está bien señorita Sinclair, ahí estará, tenga una tenebrosa tarde.

— Igualmente Señor Gómez.

Ella colgó la llamada y se quedó viendo su café que estaba enfrente de ella que ya tenía rato servido, este ya estaba frío, sin embargo lo tomo.

Un café negro, amargo y frío..

Pasaron las horas, Sinclair limpiaba su departamento, ahora se encontraba paseando por la sala pensando en si hacer esa llamada fue una buena idea, negaba y afirmaba, estaba ansiosa pues no sabia que le esperaba con esa decisión.

Un golpe en la puerta de madera rompió el silencio que se mantenía en el departamento, rápidamente se sacudió un poco de polvo que quedaba en su pantalón, aclaro su garganta y abrió la puerta.

Las gotas de lluvia resonaban mientras la rubia se quedaba observando la figura femenina frente a ella, esa piel morena que se veía tan suave, los ojos negros que no parecían tener brillo alguno..

— Buenas noches, Señorita Sinclair. - Dijo la voz contraria

— Buenas..noches, Addams. - Hablo un poco tímida permitiéndole el paso a la morena.

La pelinegra entro asintiendo la cabeza, observando el lugar, la más alta cerro la puerta tras de si y camino a la cocina.

— Café?

— No gracias. Cuál es el caso que quería ver Señorita Sinclair?

La pelinegra se sentó en el sofá acomodando su vestido negro y mirando directamente a la rubia, está misma suspiro pesadamente antes de respeto.

— Quiero investigar sobre la empresa IW, quisiera saber que ocultan, tengo pensado denunciarlos, tengo algunas pruebas y testigos. - Dijo agarrando un sobre en la mesa del salón, dentro de el estaban algunas fotos y documentos - necesito más información, con eso no va a bastar, investigar dentro de la empresa.

La pelinegra analizo la situación y después hablo.

— Considerando que la empresa IW tiene mucha reputación, será algo complicado, sin embargo se puede lograr y puede llegar a ganar más de 16 millones de dólares - la pelinegra se levantó del sofá  y después se acerco a la rubia, acaricio el menton de la alta acercandola a su rostro, haciendo que queden a pocos centímetros. - es una lastima que yo no acepte este caso.

— Addams, por favor.. ayúdame.. te puedo pagar como te gusta.. - Dijo la rubia agarrando de la cintura a la baja acercandola a su cuerpo, rozando las pieles, la menor acaricio los hombros de la chica, pasando por la nuca de esta causando un escalofrío.

— Sinclair, después del divorcio quedó un trato, el cual ninguna de las dos buscaría a la otra. - Acaricio con una mano la mejilla de la mayor y la miro a los ojos.

— Lo se, pero, después de este caso, puede.. seguir el trato, no te vuelvo a buscar..

Merlina dejo un corto beso los labios de Enid, se separo quedando a poca distancia de esta.

El apartamento quedó en silencio, hasta que la menor rompió el silencio separándose de la rubia.

— Está bien, te ayudaré, con una condición. - está se quedó pensante antes de volver a hablar. - Mi pago será 5 noches de sexo.

— Esta bien, trato? - extendió su mano hacia la morena.

— Trato. - Estrecho su mano con la chica.

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Hola!!! 753 palabras, increíble, espero les guste, linda noche!!

16/08/24

12:52 am

One shots / WenclairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora