Yukierre One Shots

... Him and his stupid Ocean eyes

I WANT HIM LOOK ME...

Liam había perdido la cuenta de cuántas veces había visto a Yuki Tsunoda desde lejos, sintiendo esa punzada de deseo mezclada con inseguridad. Habían estado juntos desde sus días en la academia de Red Bull Junior, creciendo como amigos y pilotos. Sus días estaban llenos de entrenamiento, simuladores, y esas interminables charlas sobre coches y carreras. Pero para Liam, cada minuto con Yuki se sentía como un regalo envenenado, porque con cada segundo que pasaba, se daba cuenta de cuánto estaba enamorado de su mejor amigo.

Una tarde después de un día especialmente largo en la pista, Liam y Yuki decidieron relajarse en la sala común del centro de entrenamiento. Estaban solos, disfrutando de una película que apenas estaban viendo, más concentrados en bromear y reírse entre ellos. Yuki se estiró en el sofá, poniendo sus pies en el regazo de Liam, una acción tan casual para él, pero que hacía que el corazón de Liam se acelerara.

"¿No crees que Pierre es increíble?" preguntó Yuki de repente, rompiendo el ambiente ligero. "Su manera de manejar, cómo siempre mantiene la calma bajo presión. Es alguien a quien realmente admiro." Dijo el japones viendo su teléfono en donde el rubio suponía que era alguna publicación sobre Pierre en Red Bull.

Liam asintió, aunque en su mente todo lo que quería era que Yuki dejara de hablar de Pierre. Lo sabía: Pierre Gasly era un piloto talentoso, ya había asegurado su lugar en la Fórmula 1, y era el tipo que llamaba la atención de más de uno, ah si también era el tipo del que Yuki tenía un fanatismo desde adolescente, cada vez que Yuki mencionaba a Pierre, Liam no podía evitar sentir una punzada de celos. No porque pensara que Yuki estaba enamorado de Pierre, sino porque deseaba ser el centro de la admiración de Yuki.

"Sí, es un gran piloto," respondió Liam, tratando de mantener su tono casual. "Pero tú también lo eres, Yuki. Eres increíble en la pista, y lo sabes."

Yuki sonrió, una sonrisa cálida que siempre parecía iluminar el día de Liam.

"Gracias, Lawson. Eso significa mucho viniendo de ti." Le guiño un ojo juguetonamente, Liam no pudo evitar el revuelo que dio su corazón ante ese pequeño e insignificante gesto.

La conversación se desvió hacia otros temas, y pronto volvieron a bromear como siempre. Liam intentó concentrarse en disfrutar el momento, pero en el fondo, no podía dejar de pensar en cómo sería si Yuki lo mirara de la misma manera en que hablaba de Pierre.

Otro día, después de una sesión de entrenamiento particularmente intensa, los dos se quedaron en la pista más tiempo de lo habitual. Yuki insistió en hacer una carrera más de karts, algo que siempre disfrutaban. Mientras corrían, sus risas resonaban en el aire, y por un momento, Liam olvidó todo lo que le preocupaba. Solo eran ellos dos, compitiendo como lo habían hecho desde que eran adolescentes.

Al terminar, Yuki, jadeando y con una gran sonrisa en el rostro, chocó los puños con Liam.

"¡Eres muy rápido, Lawson! Pero hoy gané yo." bromeó Yuki.

Liam se rió y le devolvió el gesto.

"Esta vez, Tsunoda. La próxima, no te dejaré ganar tan fácil." Bromeo Liam sabiendo que fastidiaría al japones.

Yuki le dio un golpe amistoso en el hombro, y por un segundo, sus miradas se encontraron. En esos momentos, cuando el mundo parecía detenerse, Liam sentía una conexión especial entre ellos. Una conexión que deseaba fuera algo más, algo que Yuki también sintiera. Pero entonces, Yuki apartaba la mirada, riendo por algo tonto, y Liam se quedaba con la sensación de que sus sentimientos eran un secreto que tendría que guardar, porque su mente le decía que si los revelaba su amistad con yuki acabaría ... y eso era algo que Liam no permitiría.