Prólogo

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¿Alguna vez han sentido que les falta algo en sus vidas? ¿Cómo si alguien o algo que era importante de un día para otro simplemente desapareciera?

Desde hace mucho tiempo vengo sintiéndome así, al inicio simplemente era la monotonía misma la que me aburría. Pero ese vacío se hizo más grande desde que mi madre falleció, el mundo se volvió más gris, oscuro, aburrido...

Mi vida no fue diferente de la de cualquier otra persona, algunos amigos, escuela, una casa normal, una vida normal o simple, no sabría decirlo.

Era un día lluvioso, solo podía ver por la ventana como las gotas bajaban lentamente y en mi mente hacia carreras entre ellas para entretenerme.

La lluvia siempre fue mi preferida, solía salir a correr y bailar con mi madre. Algo que amaba de ella, era que no importaba cuan mal estaban las cosas, siempre tenía una sonrisa para mí. Ahora su recuerdo me lastima, han pasado 7 años desde su muerte. Pero duele como si fuera ayer.

- ¡Aivy! Saldré por un rato, desempaca las cajas del sótano, por favor - escuché el grito de mi abuela a lo lejos.

- Bien - fue lo único que dije y me quedé un rato más disfrutando el sonido de la lluvia antes de levantarme.

Hace una semana que me mudé a otra ciudad, para cambiar de aires y porque fue donde se crío mi madre. De cierta forma era una manera de sentirla cerca.

Mi abuela Sloane y yo jamás fuimos cercanas pero era la única familia que me quedaba. Su mirada siempre era fría y penetrante, nunca hablaba del pasado y yo tampoco pregunté.

Tenía algo de hambre, así que fui por unas papitas, agarre mi linterna y me dispuse a bajar al sótano. Para mí mala suerte, ese maldito lugar no tenía luz y la verdad no me genera confianza, probablemente me aparezca algún fantasma o una araña, cualquier opción es mala.

Con cada paso que daba al bajar la escalera, mis latidos iban aumentando al igual que el crujido de los escalones.

Apunté con mi linterna directo hacia las cajas, me dirigí hacia la que tenía mi nombre y la revise, pero solo había ropa que ya no usaba. Me estaba dando por vencida, cuando en ese momento, me llamó la atención una caja en especial, era la única de color morado.

- ¿Qué rayos es esto? - susurré, fruncí mi ceño y con cuidado abrí la caja, estaba cubierta de polvo, como si hubiera estado aquí por años.

Hurgando un poco más pude encontrar documentos y algunos libros. Nada fuera de lo común, hasta que lo vi, era un libro algo raro que se titulaba "Academia Umbrella", un nombre extraño. Pero lo realmente raro de ese libro, eran sus páginas, tenían un brillo particular, era como si el libro me llamará.

Cuando abrí sus páginas, una sensación extraña se apoderó de mi, el ambiente estaba más oscuro de lo normal y por alguna razón eso me generó más curiosidad. Pasaba las páginas viendo ciertos escritos y dibujos, al parecer era un cuento o un diario, no sabría especificarlo. Estaba a punto de cerrarlo cuando en la última página encontre una frase, la cual la reconocí al instante.

- "plus nos posse quam id quod facti sumus"- susurré de manera inconsciente y el eco de mi voz resonó por todo el lugar.

Un silencio pesado cayó sobre mí, tan denso que casi podía sentirlo. La temperatura descendió bruscamente, y un viento helado apagó la linterna en mis manos, sumiéndome en una oscuridad total. Por un momento, el pánico me paralizó, pero antes de que pudiera reaccionar, una voz profunda rompió el silencio.

-¿Dónde estamos? -La voz resonó a mis espaldas, fría y confundida a la vez.

Giré sobre mis talones, el miedo amenazando mi corazón. Delante de mí, en las penumbras, pude visualizar ocho sombras, altas y espectrales, emergiendo de la oscuridad.

- ¿Quién... quiénes son ustedes? -logré emitir, con mi voz temblando y retrocediendo de a poco.

Mis manos perdieron fuerza y dejé caer mi plato con papitas. El ruido del plato rompiéndose y mi respiración acelerada era lo único que se escuchaba en ese momento. No sé si estaba alucinando o si de verdad acababan de aparecer 8 extraños en mi sótano.

- AHHHH - fue lo último que alcance a pronunciar antes de sentir como mi cuerpo pesaba al igual que mis párpados y todo se volvió negro.

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NOTA:

¿Qué les pareció? Recuerden que soy nueva en esto, pero prometo hacer lo mejor :D

No sé olviden de votar en cada capítulo y dejar sus comentarios, ya que me encantaría leer sus reacciones.

Por último, si quieren seguirme les dejo mis redes.

LOVE U BABES


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Errores de un tiempo perdidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora