No creo en géneros, creo en especias.
Muchas veces somos conscientes de tantas cosas, tantos daños, tanto amor, y tanto maltrato, a veces, somos tan aferrados para poder ignorarlo, y tan ignorantes como para poder afrontarlo.
Escuchamos, hablamos...
- ¡Estoy harta! ¡harta de todo! ¡de mi, de ti, de como me siento! - Gritaba una y otra vez, jactándose la cabeza, como si con eso se le fuera a caer el malestar de pecho y alma que sentía en el interior de su corazón.
-Por favor cálmate -repetía su madre, haciendo un movimiento veloz de querer abrazarla, tratando de localizar aunque sea un poco de paz en su hija, en su adorable y explosiva hija, ¿pero qué excusa de culpa tenia ella? si ella misma le dio esa ''autonomía'' de valerse por sí misma, evitando el trabajo emocional que daba el resultado de su ira, de su pura e incontrolable ira.
-Alejate, yo no tengo la culpa de sentirme así, por decisiones que en tu adolescencia tomaste, por tu falta de madurez, y sensatez, esto...es tú culpa. -y eso era verdad, cada palabra que decía, ambas lo sabían, ambas sabían que era la verdad, la pura y neutra verdad, convertida en odio. Amaba a su madre, pero no podía seguir culpandose por cosas que ella no cometió, y que aún arrastraba, que aún vivía, y que aún no morían.
Entrando en un shock total al fijarse en cada palabra saliente y en la recámara ahora echa un desastre, no noto cómo Adhara, su hija, su tesoro, arrancaba a correr de la habitación al carro, echa una bomba de tiempo, una explosión que no sabía a quién mataría, a cual de todas las personas que por voluntad propia decidió alejar, perjudicaría.
Y es que así era siempre, comenzaban con una platica, discutían, gritaban, se exaltaba y huían, huían una de la otra, con el miedo en los ojos, en los ojos que en algún momento vieron llenos de amor, de inocencia, de verdad. Volvian, porque eso hacian, volvian por amor, o tal vez por rencor, o simplemente porque no tenían a dónde más ir, ignorando la situación, viviendo el perdón, e ignorando el amor.
Y no, ignorar, no es vivir, no es resolver, no es perdonar....es abandonar.
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Iba manejando sin pensar, si es que de vez en cuando aún lo hacía, porque estaba tan ahogada que hasta la visión se le nublaba, se la había pasado viviendo de una manera tan abrupta, tan absurda, que hasta de vivir se olvidó, y aunque ella eso ya lo sabía, decía resolver las cosas, pero su manera de resolver, era huir, huir de las cosas.
Dejar de pensar, eso quería, olvidando lo que sentía, y la reciente discusión tenida, decidió subir el volumen del pequeño estéreo que su coche tenía, parecía no ponerle atención a ninguna de las notas que ese pequeño aparatito banal reproducía.
Una guitarra, una voz, un coro, un amor...una vida.
Llevo tiempo queriendo Queriendo hacerlo y tiempo pensando Porque no debo tiempo sintiendo Yo llevo tiempo sintiendo...
El tiempo, tiempo perdiendo
Cantaba una y otra vez el mismo coro, cantaba tan bonito, y tan real, tanto que por un momento, sentía que habían tocado su corazón, pero no el amor, la vida, ¿Tanta verdad en un solo coro? ¿Era posible? Ella sabía que sí, sabía que había más vida que tiempo, tiempo de lo que enfrascaba, y de lo que no perdonaba. Pero, ¿Era capaz de vivir esa tiempo? ¿O solo era capaz de vivir el tiempo que tenía?
Aprendiendo a Vivir.
-𝒜𝟢𝟫𝟢𝟣𝑀°
Hola huellitas, jajaja, es el primer capítulo de esta historia, pero quienes lo lean, espero les agrade, gracias por todo, muacks. 💗🐾
