Capitulo 3: Las reglas del juego

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"Destino alcanzando: La Tierra"-. Dice la voz del piloto automatico del transbordador, finalmente habian llegado a su destino, pero al abrir la puerta los muchachos no se llevaron una muy buena primera impresión, si bien habian aterrizado sobre el helipuerto de un alto edificio, el cielo estaba oscurecido por la alta densidad del humo en el planeta, el sol era apenas visible, el viento corria fuertemente por toda la superficie, el frio se habia apoderado del planeta y el invierno se habia vuelta el clima predilecto, comparado con las historias que escucharon del planeta del origen de todo, y comparado con sus planetas de origen esto era un paisaje lamentable.

Los muchachos procedieron a bajar del transbordador y notaron la presencia de alguien mas, acechando a lo lejos, esta misma presencia fue acercandose lentamente, revelando su identidad. Una bella figura se hizo presente con una larga cabellera rubia, brillante como un ambar.

-¡Bienvenidos!-. Dijo la mujer en un tono simpatico-. Mi nombre es Sonia Meyer y seré su supervisora en esta misión que les han encargado-. Terminando su presentación realiza una reverencia, no se sabe si por "cultura" o por una broma para romper el hielo.

-Mucho gusto, mi nombre es Morgan Hansen, me acompañanan Joseph Brown y Elizabeth Miracle-. Respondió Morgan siendo el autoproclamado lider del grupo mientras realizaban el saludo militar-.

-¡Jaja! No hace falta tanta coordialidad-. Dijo Sonia mientras soltaba una risa-. Mucho gusto en conocerlos, por favor, acompañenme adentro-. Sonia pega media vuelta y camina hasta las escaleras.

Escapando del frio viento los muchacho siguieron a Sonia por las escaleras, bajaron y bajaron hasta llegar a un pasillo blanco, mientras caminaban se podian escuchar los tacones altos que llevaba puestos sonia resonando por todo el suelo del complejo. Analizando bien a Sonia, si no fuera por los tacones ella no era realmente muy alta, podria ser mas pequeña que liza, su cabello era tan largo que le llegaba a la cintura y brillaba como una gema, vestia con un traje negro que la acompañaba falda de oficina, una chaqueta blanca y unas medias largas de color marrón.

-《La estas mirando mucho...》-. Susorró Liza para Joseph-. 

-¡Bien! Les contaré un poco sobre su "misión"-. Interrumpió Sonia recalcando las comillas haciendo el gesto con sus manos-. Basicamente quiero que sean como la "policia" dentro de M.A.D, son 8 horas de serivicio, después pueden hacer lo que quieran, claro, si hay una emergia deben actuar sin importar que no esten en servicio, todas las instalaciones sun suyas mientras tengan acceso a las areas permitidas, incluye recamaras, duchas, comida, gimnasio, etc. Pueden abandonar las instalaciones pero deben informar previamente, luego hablaremos bien y responderé todas sus dudas-. Dijo sacando la lengua al final.

Mientras Sonia hablaba, el pasillo parecia hacerse infinito, las luces blancas brillaban sobre el piso blanco, y se reflejaban en las paredes blancas, esto lugar podria volver loco a cualquiera.

-¡De acuerdo! a su grupo de unirán 2 chicas mas-. Dijo Sonia mientras se detenia frente a una puerta, esta son las recamaras donde dormiran los 5, perdonen... no habia mas presupuesto para habitaciones individuales...-. Dijo en un tono burlón-. Deberian conocerlas, son un encanto.

Seguido a esto Sonia se aleja de los muchachos, dejandolos solo frente a la habitación.

-No hace falta que esten con la ropa militar ¡Ponganse comodos, sientanse como en casa!- Seguido a esto se despide con una mano en alto- ¡Nos vemos después!- La señorita camina por el pasillo y desaparece por una puerta.

Desconcertados por la actitud de su "supervisora", los muchachos abren la puerta de la recamara. El cuarto estaba oscuro y desordenado, con las persianas de la ventana cerradas, como si nadie viviera ahí, Liza presiona el botón y la luz ilumina todo el cuarto, con la luz pudieron distinguir un poco mas, si bien eran 5 personas como mencionó Sonia, en realidad habian 6 camas, 3 de un lado, 3 del otro, cada una tenia una pequeña mesita de luz con una lampara y un cajón para guardar cosas, 《igual que en los cuarteles》pensó Joseph para si mismo.

En una de las camas de puede ver a 2 chicas sentadas una al lado de la otra, de un segundo que estaban mirando el suelo en la escuridad, miraron a cada uno a los ojos, en sus caras habia una gran triteza.

-Hola....-. Dijo una de las chicas y apartó la mirada.

-Muchos gusto-. Repondió Joseph acercandose para saludarlas, seguido a esto Morgan y Liza se acercan también-. Joseph, mucho gusto-. Acercó su mano.

-Julie-. respondió el saludo.

-Natalie-. respondió el saludo.

Morgan y Liza se presentan también frente a las despeinadas y desanimadas chicas, sabe dios que les pasó para estar asi, nadie se atrevió a preguntar tampoco.

-Bueno... bienvenidos supongo-. Dijo Natalie-. Esta cama es mia, y esa es de Ju, las demas son de ustedes-. Señaló la cama de Julie.

-Los baños están en frente, o si quieren pueden desnudarse aqui, realmente no importa-. Dijo Julie-. 

-Bueno, no me desagrada la idea nudista-. Dijo Joseph en broma para romper el hielo sin tener exitos.

Cada uno fue eligiendo su cama y acomodando sus cosas, (¿Qué les pasa a estas?) Pensó Joseph para si mismo mientras se cambiaba.

"Toc,Toc, Toc."

Suena la puerta mientras esta se abre y se asoma una cara conocida.

-Permisooo~-. Dijo Sonia en un tono juguetón-. ¿Pueden venir los nuevos un segundo cuando terminen? Graciassss~-. Y asi como entró se fué.

-《Pedazo de zorra...》-. Susurró Natalie siendo esta escuchada por Julie, y por Joseph.

Joseph, Morgan y Liza se cambian rapidamente y salen del cuarto, frente a este estaba Sonia esperando.

-Siganme por favor-. Dijo mientras caminaba hacia su oficina-. Perdonen las corridas, ya se alargo mucho este capitulo, tenemos que pasar a la acción rápido o el lector se aburre.

Los muchachos siguien a Sonia confundidos mientras entran a su oficina.

-Bueno, no se preocupen, no se les extirpara el cerebro, seran conectado con cuerpo y todo a la red, se les dará tambien una replica de un arma funcional de la armada estelar, por seguridad, si bien en M.A.D no se puede morir ni se pueden lastimar, esta arma es como un borrador, por favor no jueguen con ellas-. Dijo Sonia en un tono serio por primera vez-. Bueno, ahora pasemos a la siguiente sala y los conectaremos para una prueba-. Dijo mientras los acompañaba a otra sala.

Tercer milenio: M.A.DDonde viven las historias. Descúbrelo ahora