PEDRI:
Cuando me desperté, mi hermano todavía seguía durmiendo y lo dejé, después de lo que pasó ayer necesita descansar.
Antes de bajar a la cocina para preparar el desayuno, escucho gemidos bajitos de mi habitación, solo podía ser Pablo porque él dormía ahí. Abrí un poco la puerta y pude ver al menor masturbándose con el móvil delante, supongo que está mirando porno.
Abro la puerta justo cuando cierra los ojos, su mano subiendo y bajando por su polla estirada, me quité la camiseta y los pantalones, íbamos a tener una follada matinal. Todavía no se ha percatado de mi presencia, miro lo que hay en el móvil y no me lo esperaba para nada, mi polla enseguida se empalma al ver que había.
Era una foto mía sin camiseta y se me notaba demasiado la "V" de la cadera, miro al menor y me lo encuentro con el pelo sudado, su boca abierta mientras suelta gemidos y los ojos cerrados.
Me quito el bóxer y me empiezo a masturbar, en cambio yo gimo más fuerte para que se percate de mi presencia, me masturbo con la imagen de mi pequeño así por una foto mía.
El menor detiene su mano y sube la mirada en mi dirección, cuando ve que lo he pillada se sonroja y yo sonrío, paro de masturbarme y me estiro a su lado en la cama mientras lo miro fijamente.
- ¿Qué pasa pequeño?- le aparto la mano de su cara- ¿no podías aguantar un día sin perseguir el placer?- niega con la cabeza y se muerde el labio inferior.
- Es que...- alzo las cejas para que siga, pone su mano en mi pecho y empieza a masajear- he tenido un sueño...- baja la mirada a mi polla y se levanta con interés- donde tu me follabas sin parar y en la habitación del lado había mucha gente- cerré los ojos mientras me lo imaginaba- yo intentando no gemir para que nos pillen, pero tu me follas tan duro que es imposible- le agarro de la cadera y lo siento encima de mi entrepierna.
- Así que tú quieres que eso pase...- empieza a mover el culo de alante atrás y no puedo evitar soltar un gemido, lo agarro del culo para ayudarle a moverse encima de mí- entonces ya cumpliré tu fantasía sexual algún día.
Se movió de forma más errática encima de mi polla, entonces recordé que hoy teníamos entreno. Así que le agarre de la cadera y lo saqué encima de mí, porque sé que si no hubiéramos follado. El menor me miraba con el ceño fruncido y me acarició la mejilla intentando descifrar qué me pasa.
- Pequeño... hoy tenemos entreno, te va a doler el cuerpo- se encogió de hombros- como mucho te la chupo y este fi-...- no me dejó terminar porque volvió a subirse encima de mí y agarró mi polla para sentarse, mi miembro enterrado en su interior.
Solté un gemido que seguro ha despertado a mi hermano, porque no lo he preparado y está muy estrecho, miro a Pablo y veo como tiene lágrimas en sus ojos.
- Pablo...- aprieta las paredes- mgh... tendríamos que haberte preparado- niega con la cabeza y me hace un chupetón en el cuello, jadeé por eso ya que no me lo esperaba.
- Este dolor me encanta, porque significa que tu polla me está abriendo- aprieto su culo con mis manos, no me esperaba que el menor me dijera eso.
- Joder pequeño...- mueve el culo en círculos para acabar de acostumbrarse, me muevo y me siento en el cabecero de la cama, así poder verlo mejor.
Después de unos minutos el menor levanta el culo de mi cadera y cuando solo queda la punta dentro, vuelve a bajar lentamente hasta chocar su culo con mis testículos, puse las manos en su culo para ayudarle con las embestidas. Pongo mi mirada en nuestra unión, como mi polla desaparece en su culo y de un momento a otro el menor acelera sus movimientos
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El beso del sevillano
RomancePablo Gavi, Pablo Gavi, Pablo Gavi. Pedri se estaba volviendo loco de escuchar ese nombre, todo el mundo decía que tal vez sería el chico que le reemplazaría, es la primera vez que el canario se siente nervioso. Pero en cuando vió al menor, sintió p...