¿Es tuyo este teléfono?

Día 4

Me desperté de muy mala gana con todo lo que me estaba pasando pero decidí que mejor no debía pensar en eso así que bloqueé al tal desconocido y me cambié ropa para salir a dar una vuelta, ya que ese día no tenía que ir a trabajar. Fui al supermercado y me compré unas papitas mientras paseaba por el centro. En eso que iba caminando me di cuenta que habían abierto una nueva cafetería, muy linda de hecho, así que decidí entrar a tomarme algo. Cuando entré me atendió un joven muy lindo que me atendió muy amablemente, no pude dejar de mirarlo mientras me tomaba ese café tan dulce que me dio, pensaba en como atraía a gente tan rara y no jóvenes amables como ese chico, cuando terminé mi café lo único que pude hacer fue decirle gracias y dejarle propina. En el resto del día fui a tiendas cercanas y me compré un poleron lindo que encontré en oferta. Al llegar a mi casa reflexioné acerca del número desconocido y cómo me ha estado arruinando los días, así que le escribí “no estoy interesada de salir con nadie, así que no me hables y si quieres un consejo para un próximo amor, podrías ser un poco menos terrorífico, que te vaya bien” y lo bloqueé. No me sentí muy segura pero creí que fue lo mejor, si me volvía a hablar lo denunciaría, no quería más problemas.