SOMBRAS DE PODER - 権力の影

CAPITULO 14 - TEMPORADA 3

-----UN ULTIMO BAILE-----

•  Tsumugi: Sabía que podía confiar en ustedes.

• Renjiro: ¡¿De qué mierda hablas?!

• Tsumugi: Pues claro, yo no podría haber derrotado a mi padre, así que me hice la muerta para que ustedes se encargaran de él. Pero no esperaba que la mocosa terminara suicidándose.

Me levanto del suelo, mirando a Tsumugi con una creciente furia, hasta que un aura comienza a formarse a mi alrededor, generando varias olas de aire.

• Renjiro: ¡Shoko y Ume! ¡Salgan de aquí ahora!

• Ume: ¡P-Pero...!

• Renjiro: ¡AHORA! —grito furioso—.

Ume se sorprende por mi grito, pero entiende lo que quiero hacer. Rápidamente ayuda a Shoko a levantar a Gojo y salen del lugar lo más rápido que pueden.

• Tsumugi: ¿Realmente quieres hacer esto solo? Quiero decir, eres débil en comparación con mis poderes.

• Renjiro: Cállate de una vez, es hora de que mueras aquí...

Tsumugi se sorprende un poco por mi respuesta, pero rápidamente cambia a una sonrisa, preparándose para pelear.

Sin más demora, me lanzo hacia Tsumugi, dando un golpe cargado con toda mi fuerza, el cual Tsumugi detiene fácilmente con sus poderes, para luego agarrarme telequinéticamente y estrellarme repetidamente contra el suelo.

Con esfuerzo, logro liberarme de su agarre y, sin perder un segundo, me acerco a Tsumugi y le doy una patada en la cara, haciéndola volar.

Tsumugi frena rápidamente y me mira con enojo, revelando que le he hecho sangrar la nariz.

Con furia, Tsumugi utiliza sus poderes para hacer levitar varios escombros alrededor y me los lanza. Los esquivo sin problemas, pero ya comenzando a fastidiarme, doy un fuerte aplauso con todas mis fuerzas, generando unas ondas de aire que le devuelven los escombros. Algunos la golpean, mientras que otros quedan flotando a su alrededor.

Rápidamente, uso mis poderes para impulsarme hacia uno de los escombros, saltando de uno a otro alrededor de Tsumugi, y dándole un golpe fuerte cada vez que cambio de posición.

Tsumugi comienza a recibir todos mis golpes, pero en un movimiento rápido, usa sus poderes para comprimir los escombros, aplastándome con ellos y luego lanzándolos lejos junto a mí.

Con fuerza, me deshago de los escombros rompiéndolos, y miro a Tsumugi, quien sonríe genuinamente.

Renjiro sintió su cuerpo temblar bajo el esfuerzo de mantenerse en pie. Cada respiración era un desafío, el aire apenas llenaba sus pulmones mientras miraba a Tsumugi, quien sonreía con una mezcla de odio y satisfacción. Sabía que esta pelea no sería fácil, pero no podía permitir que la locura de Tsumugi continuara. No después de todo lo que había perdido.

Tsumugi, por su parte, parecía disfrutar el desgaste de Renjiro. Cada vez que usaba sus poderes, pequeños trozos de su piel se desprendían y caían al suelo como ceniza, pero ella no mostraba signos de detenerse. Si acaso, la caída de su carne parecía excitarla más, como si su descomposición física fuera un precio que estaba dispuesta a pagar por la victoria.