¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
La noticia de la muerte de Fred Adkins le tomó por sorpresa a todo el equipo, en especial a Josh Allen, el Quarterback de los Bufalo Bills, pues Fred había sido su suplente por toda una temporada. Se siente abrumado por la tristeza y el shock, no puede creer que Fred, aquel chico con quien solía entrenar ya no esté más.
Se apresuró a vestirse con un traje color negro que tomo de su closet y rápidamente, pidió un uber con dirección a la funeraria, donde sus compañeros de equipo ya le estaban esperando. El recinto es un edificio grande y sombrio con paredes de piedra gris y ventanas altas por todas partes cubiertas con cortinas color negro. En el interior, las paredes están revestidas de madera oscura y un techo alto, la luz es tenue y suave.
Al llegar a una pequeña sala, mira la capilla 34B y entra. Al fondo hay un ataúd abierto rodeado de flores. El cuerpo de quien fuera su suplente estaba dentro con un smoking negro. Josh mira el retrato de Fred a su costado, justo como el recuerda, con una inmensa sonrisa.
—Gracias por venir Josh
Josh reconoce a la madre de Fred, quien tenía los ojos hinchados por tanto llorar. A su lado, Tyler Adkinks, padre de Fred y Susana Adkins, su hermana menor, quien acababa de cumplir veinte años.
—Lamento mucho su perdida.
—Fred estaría feliz de que estuvieras aquí—dice Tyler—Eras su héroe. Siempre quiso ser como tú. Recuerdo que se puso muy feliz al saber que entraría a jugar a los Bills
Josh no sabe que decir, siente un nudo en la garganta. Finalmente se acerca a Susana
—Tu hermano me hablo mucho de ti
—Es que yo... yo...
La chica se desmorona y comienza a llorar. Josh le da un abrazo y trata de consolarla.
—Lo siento mucho
—Gracias por venir Joshi
Josh se reúne con varios de sus compañeros de equipo, al igual que el resto, están consternados.
—No puedo creer que Fred este muerto
—¿Pero que le paso?
La versión oficial era que sufrió un infarto y se desplomo en su casa, cuando la mujer del aseo le encontró ya era demasiado tarde. Aun así, el padre de Fred había ordenado un análisis más profundo para saber la causa del infarto, pues algunos rumores aseguraban que había ingerido sustancias prohibidas por la NFL para aumentar el rendimiento en el campo.
—Mierda—menciona Von Miller—Dudo que nuestro Fred ingiriera esas sustancias.
—El estaba muy sano—dice Dalton Kinkaid—No entiendo que pudo haber ocasionado eso.
Josh sigue callado, su mente lo lleva al día en que conoció a Fred, el chico estaba muy nervioso cuando se presentó con el equipo, pero rápidamente se acoplo con el resto. Tenía un buen brazo y durante los juegos de pretemporada realizo muy buenas jugadas que le dieron dos victorias al equipo. Fred Adkins tenía un futuro brillante.
