Experimento fallido [T/N]

Capítulo 2.- Un día más

[☆]

-Confiamos en ti, no nos decepciones.

-Salvaremos a todos en el mundo con tu ayuda. Tú eres especial, eres la indicada para un trabajo como éste.

-Eres poderosa, mucho más de lo que nosotros pensábamos. Creemos en ti.

[☆]

Con la respiración entrecortada y con sudor cubriendo todo mi cuerpo, desperté. Todo había sido un sueño, no necesitaba alterarme, ¿verdad?

Esta primera noche en el área (escuché a un par de tipos llamar a este lugar así, así que supongo que es su nombre) mi mente estuvo llena de sueños, horribles sueños.

Salí de mis pensamientos en cuanto oí como alguien tocaba la puerta de mi choza. Me pusé de pie y caminé hasta la puerta, la abrí y me encontré con Newt.

—Buenos días novata.

—Buenos días...

—Wow, amaneciste desanimada.

—Tuve un mal sueño, eso fue todo.

—Si tú lo dices... Por cierto, te traje algo de ropa limpia, espero te sirva.

—Gracias... Uh- Pero ¿dónde me podré duchar? O... ¿ustedes no se duchan?

—Sé que parece que nunca hemos tocado agua en nuestras vidas, pero sí nos duchamos, aunque para eso tenemos otras duchas. Ayer por la noche los constructores estuvieron haciendo una pequeña ducha para ti.

—Oh, bueno... lo agradezco.

—No tienes qué, lo último que queremos en este lugar es que te sientas incómoda, después de todo eres la única chica y apenas vas entrando en este lugar.

—Es lindo de su parte... Gracias, otra vez. Creo que iré a darme una ducha de una vez, necesito despejar un poco mi mente.

—Está bien. Alby vendrá en unos veinte minutos para que puedan empezar con el pequeño Tour del área, necesitas aprender al menos un poco del lugar.

—Sí, eso sería genial. Muchas gracias Newt.

—De nada novata. Nos vemos en la hora de la comida, adiós.

Se despidió con una dulce sonrisa. Dios, creo que me derretiré si sigue sonriendo así.

Tomé la ropa y salí de mi choza, caminando hacia la pequeña ducha improvisada que los chicos habían hecho exclusivamente para mí.

Después de ducharme, salí en busca de Alby, supuestamente vendría en unos veinte minutos pero decidí adelantarme y comenzar a explorar un poco el lugar.

Mientras caminaba pude sentir como un bicho pasó por encima de mi zapato, rápidamente me giré y noté como la criatura se escondía entre la maleza, sólo pudiendo alcanzar a ver unas pequeñas patas metálicas.

—¿Qué cara-

—Son cámaras, al menos eso parecen ser.