𝐒𝐄𝐀𝐒𝐎𝐍𝐒 ๋࣭ ⭑⚝ ₊⊹ 𝐂𝐈𝐍𝐂𝐎 𝐇𝐀𝐑𝐆𝐑𝐄𝐄𝐕𝐄𝐒 𝓜.

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A veces me he cuestionado de mi existencia, quiero decir, todos hemos pasado por esa etapa donde nos ponemos a reflexionar del hecho de cómo existimos, o eso quiero creer.

Es un 26 de agosto, las vacaciones de verano ya habían acabado, así que solo significaba una cosa, regresar a clases. La verdad no es algo que me preocupara, tengo buenas notas, buenos amigos, una familia estable, pero sin embargo, hay algo muy al fondo de mí que me tiene inquieta. He matado o ocultado este sentimiento con el hecho de que es mi último año de preparatoria, que próximamente se vienen más responsabilidades, más aventuras, conocer nuevas personas, simplemente comenzar a formar mi vida adulta.

Si me preguntaran de que tal me la pase en el verano, diría que ha sido el mejor verano de todos, aunque, todos los veranos lo han sido. Vengo de una familia que no tiene costumbres, ni mucho menos exigente, mi familia es de esas que harían lo que sea por estar estables tanto físicamente como mentalmente. Así que mi verano se basó en ir de vacaciones con los abuelos a una playa, gym, salidas con mis amigos, ir al cine con mamá, papá y hermanos, ya sabes, que hacen las familias felices.

Creo que me considero muy afortunada por  tener la familia que tengo, el apoyo que me han brindado me ha servido de ser la persona que soy, es claro que mientras tengas una familia estable, estable estarás. También el amor de mis dos hermanos mellizos, Hazel y Agnes, me ha ayudado a entender que tengo un corazón tan noble, que si a ellos les pasará algo, sin duda me derrumbaría.

-Tierra llamando a ____- habló Agnes sacándome de mis pensamientos-.
-Ah, perdón, es que tan solo de pensar que es mi último año de prepa, me hace sobrepensar mucho- dije para despues continuar desayunando-. Pero de qué hablaban?
-Tus hermanos están emocionados de que los hermanos de la Academia Umbrella irán a tu escuela hoy- comentó mi madre mientras nos servía más jugo de naranja-.
-¿Qué? -hice una cara de sorprendida pues yo no sabía de eso, es más ¿por qué irían?-
-¡Sii! -contestó mi hermano- y tú- señalandome- nos vas a conseguir sus autógrafos
-¿Yo? Cómo creen, no creo que eso sea posible, es más me moriría de la pena con tan solo acercarme, así que me retracto- expresé para después cruzarme de brazos-.

-Ándale hermanita, hazlo por nosotros, no nos amas los suficiente cómo para no hacerlo? -insinuó la pequeña para hacer un gesto de puchero-.

Si algo bien sé, mis hermanos los admiran mucho y lo reconozco, tienen 10 años y a su edad obviamente los ven cómo los grandes héroes que son. A pesar de que se ha visto que en las películas existen los superheroes cómo batman o superman, aquí también, solo que son unos chicos igual de mi edad con uniformes.
Lo que sé de ellos es por mis hermanos, cómo que son reconocidos cómo número 1, 2, 3 y así hasta llegar al 7, adoptados por el Sr. multimillonario de la cuidad y sus sorprendentes poderes que tienen cada uno.

-¡Bien!- suspiré- pero no les prometo nada, si tengo la oportunidad de acercarme a ellos lo haré ¿okay?
Ambos niños comenzaron a brincar de la emoción en sus asientos y no paraban de decir lo mucho que me querían
-Es mejor que se apuren o llegarán tarde los tres -informó mamá- y más su hermana que ella entra más antes que ustedes.
-Tienes razón ma, ahorita bajo -después de lo dicho fui corriendo a mi habitación para terminar de poner mis cosas.
-Nosotros igual -dijeron ambos mellizos.

La verdad a mi no me emocionaba mucho el hecho de que los Umbrella estuvieran en mi escuela, aunque debo de admitir que hay cierto miembro que me ha llamado la atención. Diego Hargreeves se me ha hecho el más lindo de los hermanos, y no quiero decir que me guste al punto de babear por él, solamente tengo un pequeño interés por él.

Cómo es el primer día de regreso al nuevo semestre, tenemos que ir con el uniforme, no me quejo ya que es lindo en lo que cabe, ya de ahí dependiendo tu horario es el cómo irás vestido, a mí me tocó lunes y jueves uniforme, y los demás días es a tu gusto. Siendo sincera siempre he tratado de verme bien ya que es algo por lo que muchos me reconocen, ah, y también por mi cabello color zanahoria.
Opté por tomar dos mechones de mi cabello para después sujetarlos con un moño negro. Tomé mi mochila y de ella ya no tenía mucho que arreglar, puse lo indispensable en ella para después bajar a sala y ¡oh! vaya sorpresa todos ya me esperaban en el auto.