Endless

Capítulo 7

Acompañé a las chicas a la librería como de costumbre, suelen ir todo el tiempo. Me dirigí a ver algunos libros ya que no quería incomodar a Emily. Hace tiempo que no le caigo bien. Ella y yo somos de la misma edad, la diferencia es que soy mayor por 5 meses. Desde pequeños éramos muy buenos amigos ya que nuestras madres mantienen una amistad de muchísimos años. Cuando empecé a tener ciertas amistades como Isaac, dejé la amistad con Emily. Simple y sencillo; no quería arrastrarla a esto conmigo.

Cuando empecé a tener problemas con mi padre, más bien que vi como engañaba a la mujer que ama, mi madre, empecé a consumir cosas que me juré nunca hacer. Sé que en el fondo lo saben y también sé que mi madre se siente decepcionada en el fondo pero no me lo dice.

¿Chicas? he perdido la cuenta con cuantas he pasado una buena noche.

Pero ella.... tiene algo que la diferencia del resto. Cuando la vi parada justo delante de mi, no pude olvidar esos ojos color miel que te atrapan como si fueran una telaraña. Con tan solo cruzar unas cuantas palabras con ella, supe que no era como las chicas con las que suelo salir o pasar el rato. Es simplemente sencilla.

Cuando supe que había venido con Isaac sabía que no tenía buenas intención. ¡Vamos que lo conozco! muestra su mejor cara para después llevárselas a la cama.

Eso mismo haces tú tarado.

No está vez, no con Halany.

Cuando salió de la habitación huyendo de mi, me quede demasiado agitado pero no iba a tocarla estando más personas aquí. No sería una más que llevaría a la cama. No sería para quitarme la calentura.

¿Te has enamorado idiota?

Ehhh... no... o ¿si?.

No podía dejar de pensar en ella y sentirme en calma, en que el estar en su pecho me dio la tranquilidad que hace hace bastante tiempo no tengo, ni estando cerca de mi propia madre.

No quiero arrastrarla a todo esto conmigo. No soy bueno para ella ni para nadie. Tengo tantos demonios en mi cabeza que no quiero la consuman a ella.

¿Vas a huir como lo hiciste con Emily?

Ahí estaba mi tonta cabeza hablando por mi.

No quería huir, no cuando me siento bien con su presencia pero... Tampoco quería meterla a mi mundo jodido y si que demasiado jodido.

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Desperté y Emily no estaba, lo más seguro es que estaba con los chicos, fui al baño para ducharme. Al terminar de arreglarme, salí en busca de todos. Se encontraban en la alberca jugando con una pelota enorme y bebiendo unas cervezas.

—Miren quién despertó —dijo Emily al notar mi presencia. Alek se giró a verme y volvió a lo suyo.

Seguro fue por lo de anoche. Ahora más que nunca me sentía avergonzada.

—¿Quieres una? —dijo uno de los chicos

—No, gracias.

—Anda —insistió el otro.

—No bebo alcohol pero tómense una por mi. —dije con una leve sonrisa.

Regrese adentro para buscar algo de comer, moría de hambre. Mientras veía que agarrar de la nevera sentí una presencia. Escuché como carraspeó su garganta. Cerré la nevera y me giré a verle.

—Lo de anoche...

—Lo siento, no debió pasar —lo interrumpí.