Aprecié mi monoplaza, la luz del sol hacia que largue destellos la pintura nueva que le habían puesto, cambiamos la gama de color y colocamos estratégicamente los logos de los sponsors.
—Veo que te gusta hacer tu trabajo — dijo alguien entrandose a mi panorama visual.
Era castaño, de ojos marrones y algo tierno. El traje de piloto de Mclaren lo delató, me preguntó cual será su nombre.
—Oh.. sí se podría decir que sí.
—Lo siento no quería interrumpir. — paso su mano por el halo de aquel monoplaza. — pero hiciste un gran trabajo.
—Muchas gracias. — respondí fijando mi mirada en él.
—Si no fuera porque eres la hija de Horner presentaría una queja sobre por qué no estas trabajando en McLaren.
—Asi que.. ¿Me estuviste investigando? — reí
— Me acabo de delatar, ¿cierto?. — sonrió
—Efectivamente — contesté con gracia— Suponiendo que ya perdió el sentido tu lado misterioso me diras tu nombre.
— Supones mal, de ser así el que recibiría una queja sería yo por acosar a la princesa de red bull.
— Así me llaman ¿Princesa? — abrí la boca indignada— la reina más bien.
—Como la alteza lo pida — contestó siguiéndome la broma y haciendo una reverencia — bueno.. yo me debo ir antes de ser llevado al calabozo por andar en territorio ajeno.
—¡Espera! No me has dicho tu nombre. — grité pero el ya estaba muy lejos para oírme, solo me quedó verlo irse y esperar a volver a cruzarlo.
Recordé el trabajo que me esperaba en la oficina y me di vuelta rápido para ir por ello, pero sentí un impacto seco contra mi pecho, era Max, parecía tenso y ... ¿Enojado?, este hombre vivía de mal humor.
—¿Es en serio? ¿Vendiendole información al enemigo?— escupió molesto
— ¿De que hablas?
— Te acabo de ver hablando con el piloto de McLaren, no lo niegues, es en vano.
—No fue así, solo estábamos hablando, solo eso. — respondí
— En ese caso le dire a tu papi que sales con un piloto de McLaren, se pondrá furioso— respondió burlon — me preguntó de que forma te castigará tal vez..
— Bueno entonces yo le diré que no dormiste, otra vez y que además estuviste saliendo a discotecas antes de las prácticas— sonreí — me preguntó de que forma te castigará quizás.. ¿Sacandote el simulador? O que tal ¿poniéndote restricciones? si se llegaran a enterar los demás pilotos serias el hazme reir, ¿No lo crees?.
me burlé de él saliendo de los pasillos y apurando el paso por el tiempo que me había tomado discutir con Max. En estas situaciones suelo ser un poco —demasiado— torpe.
Sentí frio que se esparcía por el blazer que llevaba puesto ¿Que carajos?
—¡Lo siento! No te vi — escuché una voz femenina
—No, no te preocupes la culpa es mía, venía de prisa. — sonreí levantando mirada hacia ella, era hermosa, tenia el cabello castaño cortado en capas y puesto un vestido que literalmente estaba hecho para ella.
— Me encantaron los diseños que creaste para Vogue el año pasado— confesó
Nunca hablé de esto pero acá vamos, la temporada pasada me surgió una oportunidad que no pude negarme, diseñe 5 atuendos para la revista Vogue, y aunque fueron un éxito el ambiente de trabajo era horrendo pues allí se encontraba una de mis amigas de la secundaria, Julieth. Fue mi mejor amiga durante 10 años, en esos años pasamos momentos detestables y hermosos pero siempre juntas. Eramos inseparables, compartiamos todo, si una leia un libro se lo recomendaba a la otra, al igual que las canciones, series, películas, marcas de ropa, cantantes y todo lo que uno se pueda imaginar. Un día, luego de una pelea con mi papá y una lucha silenciosa que venía teniendo hace meses, me autolesione. Ya no comía, no tenia fuerzas para levantarme de la cama ni siquiera podía cepillarme los dientes de la angustia que tenia, decidí alejarme de las personas para poder sanar. Era lo mejor que podía hacer, y en estas circunstancias me encantaba la distancia —aun me encanta —.
Fue lo que hice, priorice mi paz mental y no me arrepiento porque no se que hubiera sido de mi si tomaba otra decisión, mi distancia duro 3 meses hasta que volvimos al colegio y yo sabia cuánto le costaba a la que aún seguía considerando mi amiga, hacer nuevos amigos. Por eso le puse límite a mi distancia y le conte a Julieth lo que había ocurrido y cuánto me ayudo estar sola para no preocupar a los demás, ella pareció entenderlo y nuestra amistad nuevamente cobró vida, solamente por unos meses porque prefirió empezar a hablar mal de mi, diciendo que yo le quería copiar, que era una envidiosa y sin nombrar que se burló de mis problemas familiares, involucró a más personas e hizo del colegio un verdadero infierno, simplemente por el hecho de que compartiamos los mismos intereses, como había hecho siempre y sin recibir nunca ninguna queja respecto a eso.
Ahí comprendí que en la distancia yo había madurado y ella cambiado, y que no me importaba perder su amistad mientras yo no pierda mi equilibrio emocional que tanto me había costado tener.
Muchos niños de esa edad pierden la creencia en las leyendas infantiles pero yo había dejado de creer en el vínculo emocional, en una confianza profunda con alguien, en la honestidad, en la lealtad y hasta incluso la capacidad de poder entender a el otro. Todo esto a causa de Julieth, que de todas las formas que podia traicionar a alguien eligió la mas tortuosa, porque ella es así.
—Oh.. bueno.. ¿Cual es tu favorito? — despabile mis pensamientos.
— Sin duda alguna el vestido de leopardo con el tapado beige y las botas.
—¡También el mío!— sonreí emocionada— si te hubiera conocido antes podrias haber sido la modelo del vestuario, te hubiera quedado perfecto.
—Me hubiera encantado. — sonrió tiernamente y jugo con sus pulseras.
Me hacía acordar a Julieth, tenia rasgos similares y también los gestos pero sería una falta de respeto hacia Alex compararla con ella. Julieth era: mala, maleducada, malhumorada, mentirosa, manipuladora, malcriada, mediocre y todos los adjetivos que tuvieran una connotación negativa y que empezarán en M. Alex era todo lo contrario era Amable, agradable, Elegante..
La había conocido hace extremadamente poco pero era imposible no notar su alma pura y sin una pizca de maldad. Tal vez podríamos llegar a ser amigas o tal vez podría volver a creer en la amistad como aquella niña de 10 años..
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I came back bitches💋
Volví para la semana de carreras, ¡Quiero que sea domingo ya!. Díganme sus predicciones de podio..
Espero que esa persona o en mi escritura como "Julieth" se meta a un psicólogo porque en verdad que lo necesita. Me descargué con este capítulo.
