Demonios del Partenon (Fate/Zero fanfic)

III Pacto de Sangre.

Todos la observaron detenidamente a la joven. Todos los allí presentes, sin lugar a dudas, eran escépticos a los tratos; hacer uno implicaba jugar con una doble carta, lo suficientemente afilada como para poder sacarte un ojo si no la tratabas con cuidado, pero lo igual de ventajosa si sabias jugarla a tu favor.

Tokiomi no era un hombre capaz de abrir su mente a los ideales de la familia Ivanov. La sola idea de tomarlos como aliados le provocaba arcadas, por mucho que de alguna forma le pudiera ayudar a alcanzar su objetivo, más tarde o temprano la debería tener de enemigo. Debía de eliminarla y pronto.

-¿Qué trato?

Irisviel podía parecer inocente, tal vez incluso inofensiva, pero la realidad era completamente distinta. Ella conocía el riesgo de tenderle la mano a un lobo hambriento, pero sabía la gran ventaja que Kiritsugu obtendría si lo tenía a su favor.

-Muy desesperados debéis de estar los Einzbern si estáis barajando la posibilidad de aliaros con semejante...

A escasos milímetros de su yugular se cernieron una fila de dagas sostenidas por un hilo, algo más grueso que el empleado para decapitar al Master de Caster, pero con un mismo fin. El otro extremo del hilo acababa en las manos de la joven de pelo oscuro, llamada Irina.

-Irina. –Esta tan solo movió levemente los ojos y luego volvió a fijar la vista en el objetivo.- Suéltale. –Esta dudo durante unos instantes si cerrar por completo el círculo y "cortar" así el nuevo problema que quizás se cernía sobre ellas.- ¡Irina!

Tuvo que ceder.

Irisviel se acercó a su Servant y ya allí, le dirigió una mirada desafiante a Tokiomi

-Tosaka, si no estas interesado, puedes irte por dónde has venido.

-¡¿Cómo dices?!

-¡Callaos! -Les grito.- Quien debe decidir eso aquí, soy yo. -Los observo durante unos instantes

-¿Que propones?

-Un alto el fuego, algo así como.... una tregua.

-¿Quieres parar la guerra por el Grial? -Le dijo Tosaka, apenas sin entender el porque.- ¿Con que propósito?

-Encontrar una forma de llamar al Grial, sin que tengamos que morir por ello.

-Eso que pides, es imposible.

-¿Eso crees? -Se colocó en jarras y los miro unos instantes-. ¿De verdad crees que os lo diría si no hubiera una forma?

-¿Puedes ...? –Dudo durante unos instantes si formular aquella pregunta. Quizás podía parecer, pero él no estaba del todo convencido.- ¿Puedes hacerlo?

-Por supuesto, Waver

Waver se quedó callado durante unos segundos. Él nunca se había presentado y sin embargo, ya sabía su nombre. "¿Quién eres tú?" era lo que rondaba ahora su cabeza.

-Eso es imposible. –Dictamino Tosaka, de forma tajante, segura y concisa-. Al igual que el resto de tu linaje, lo único que tratáis, es de engañarnos con ilusiones y mentiras.

-Puede que sí, o puede que no. Lo único que te queda es fiarte de mi palabra.

-¿Cuáles son tus condiciones? -Waver no quería luchar. Sabía que sus enemigos eran oponentes poderosos, ella misma, era la viva imagen. Si había una forma de obtener el Grial sin tener que morir en el proceso, prefería arriesgarse. El cómo obtenerlo, sería algo en lo que ya pensaría conforme se acercase