ATELOFOBIA

LAS ACADÉMICAS

Luego del trance en el que Max había estado por unos segundos, los chicos estaban más que preocupados.
Recordaban que Eddie lo haya descrito igual que con Chrissy.

Las chicas habían llegado rápidamente y justo a tiempo, mientras la pelirroja los llevaba al pasillo para intentar hacerles entender lo que había visto.

—Estaba aquí-hablo Max— iJusto aquí!

Nancy frunció el ceño, - ¿Un reloj de péndulo?

—Se veía real-respondió, claramente afectada—pero, cuando me acerqué, de pronto... desperté.

Jules bajo la mirada, bastante confundida.

—Fue como si estuviera en trance o algo-hablo Dustin-Como dijo
Eddie que le pasó a Chrissy.

Max se giró para quedar frente a todos y ellos llevaron sus miradas a ella.

—Y esa no es la peor parte. -Todos fruncieron el ceño, mientras la ojiazul les daba indicaciones para que la siguieran de vuelta a la oficina, mientras rodeaban el escritorio y Max mostraba los expedientes sobre la mesa.

Volvió a tomar la palabra, -Fred y Chrissy fueron con la consejera Kelley por ayuda. Tenían dolores de cabeza-Robin tomo uno de los expedientes-Dolores muy fuertes que no se quitaban.

Jules tomó el de Fred, comenzando a leerlo pero sin dejar de prestar atención a Max.

La pelirroja siguió hablando, - Y las pesadillas... No podían dormir-su voz comenzo a temblar.Despertaban empapados de sudor. Y comenzaron a ver cosas—la castaña fijo su mirada en ella-Cosas malas de su pasado. Esas visiones empezaron a empeorar cada vez más, hasta que finalmente... todo terminó.

Robin levantó la mirada.
-La maldición de Vecna.

Max asintió, -Chrissy empezó hace una semana-habló-Fred hace seis días. Pero yo empecé hace cinco días
-Jules frunció el ceño-No se cuanto tiempo tenga. Lo único que se... es que Fred y Chrissy murieron menos de un día después de su primera visión. Y yo acabo de ver ese maldito reloj.

—Max... —murmuró la castaña.

—Parece que moriré mañana-la interrumpió.

Jules negó con la cabeza, mientras soltaba un suspiro y pasaba una mano por su cabello.

No podía procesar todo esto.

Ni siquiera quería creerlo.

Sintieron la puerta de la escuela siendo abierta y rápidamente se giraron sobresaltados, por miedo a ser descubiertos.

-Quédense aquí-hablo Steve, tomando una lámpara como arma y saliendo de la oficina.

Los demás se miraron, y rápidamente fueron tras de él, sin hacerle caso.

Salieron con sus linternas y se
acercaron cautelosamente.

Esperaron en silencio, hasta que la figura de alguien corriendo apareció y Steve estaba por golpearlo hasta que se dio cuenta de quien era.

— ¡Soy yo! —exclamó Lucas, levantando las manos e intentando recuperar el aliento.

— ¿Lucas? —pregunto Nancy. Steve soltó un bufido, - ¡Carajo!
¿Que te pasa, Sinclair?

-Perdónenme-habló agitado.

— ¡Casi te pego con esta lámpara!

Él siguió, -Perdón, en serio-intentó reincorporarse-Vine aquí en mi bicicleta. Denme un segundo-pidió
—Mierda. Tenemos un código rojo.

—¿Qué? —pregunto Steve.

Lucas se acercó al de rulos rápidamente.

-Dustin... Estaba con Jason, Patrick y Andy, y están fuera de control.
Tratan de capturar a Eddie y creen que tu sabes dónde está-comenzó a hablar sin parar- iEstas en grave peligro!