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Dustin terminó de vestirse y agarró su mochila, sus compañeros de equipo venían detrás y por supuesto no se estaban perdiendo la rapidez en su paso, Oskar no pudo mantener la boca cerrada respecto eso.

—Estás de buen humor.

—¿Y qué? —Oskar se encogió de hombros cuando se giró para mirarlos.

—Nada, sólo es extraño.

—Déjame en paz.

—¿Es por el Oficial? —esta vez fue Kaleb, Dustin hizo una mueca y se alejó, no sin antes fulminarlos con la mirada.

—¿Van a dejar de chismear?

—Bien, que sensible.

Por supuesto que era por el Oficial, se verían hoy, y Dustin estaba más que emocionado por eso, como una colegiala en el primer encuentro con su novio.

Vale, era un ejemplo muy raro.

Evidentemente estaba poniéndose un poco estúpido, dejó su mochila en la parte de atrás y condujo directamente a casa de su cita. Dustin tocó la puerta más nervioso de lo que esperaba, era tonto estar así sólo por ver a Chase.

—Aquí estás —dijo Chase abriendo la puerta, Dustin hizo una mueca de decepción.

—¿Esperabas a alguien más?

—¿A quién esperaría? —torciendo los ojos Chase señaló al interior—. Entra.

Dustin entró y esperó la señal de Chase para sentarse en el sofá, él miró al televisor dudando siquiera de proponerlo.

—¿Quieres ver una película?

—¿En serio vas a preguntarme que quiero? —preguntó mirándolo directamente —. Podría recitar muchas cosas y lo de la película no está ahí.

—Dijiste que tendrías paciencia.

—La tendré, pon esa película —Chase obedeció y luego se sentó a su lado, no demasiado cerca, pero lo suficiente, al menos era mejor que antes cuando lo mantenía bien lejos—. Me darás de comer ¿cierto?

—Sí —Dustin dejó de atender la dichosa película y lo miró.

—¿Podemos intentar algo?

—¿Cómo qué? —Chase lo miró de vuelta, no se veía muy seguro, Dustin lamió sus labios, se arriesgaría, practicar era la mejor medicina.

—¿Como tocarme?

—Dustin… —murmuró Chase con renuencia.

—No tengo idea de porque no quieres tocar a nadie, no sé qué pasa si lo haces.

—¿Hablaremos de eso? —cuestionó Chase mirando a la pantalla, Dustin hizo una mueca, por supuesto que no hablarían de ese tema.

—¿Quieres hablar de ello?

—No —la respuesta fue contundente.

—Por supuesto, pero si puedes —dejó caer, Chase lo miró de nuevo.

—Teóricamente puedo, hago arrestos todo el tiempo.

—Y tienes que tocar —un asentimiento.

—Lugares específicos.

—¿Qué hay de las manos? —Dustin extendió la mano derecha, Chase la miró y luego a él pensando qué hacer, tragó con nerviosismo, pero levantó su mano dispuesto a intentarlo, sus manos estaban descubiertas.

—Sea lo que sea que pase no te decepciones —la advertencia incluso lo puso nervioso.

—No voy a decepcionarme —afirmó, Chase puso los dedos cuidadosamente sobre sus nudillos, Dustin jadeó cuando siguió deslizándolos hasta llegar a la muñeca y rodearla.

Top Secret (BL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora