Dewey en un día lluvioso

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... Oh, hola voces en mi cabeza. Sigue siendo igual mente bueno que cualquier otro día que ustedes sigan susurrando sus secretos infernales y algo fetichistas dentro de mi cabecita de perrito

Pero, lamento informarles que ahora mismo no puedo prestarles tanta atención. Ahora mismo estoy demaciado ocupado.

Es muy difícil mantener todo bajo control mientras Dylan juega en la calle a ser un vagabundo con un zorro y una rata, y Dolly está ocupada tratando de encontrarlo y traerlo de regreso a casa.

Dolly originalmente había dejado a Dawkins a cargo mientras ella iba a buscar a Dylan.

Pero ... Yo, siendo el muy considerado y angelical hermanito que era, era uno de los pocos cachorros en notar como Dawkins parecía no estar contento de estar a cargo.

Asi que, de nuevo, siendo el muy amable, angelical, piadoso, bondadoso, elegido de dios para traer una nueva era de paz al mundo, santificador ultra mega poderoso de lo divino ...

Pellisque a Dawkins en su nervio del sueño, ubicado en la parte posterior de su cuello.

Dejándolo en co-¡O-oh! E-Es decir, haciéndolo tomar su inofensiva (y sin posibles daños cerebrales) siestecita antes de tiempo, para darle un merecido descanso de tanta responsabilidad que se le era impuesta tan a menudo por Dylan o Dolly cuando estos dejaban sus puestos para salir a fuera a jugar a ser vagabundos o patinar.

Y ahora, tras dejar a Dawkins en un lugar seguro, me dirigí valientemente hacia mis otros muchos hermanos, con mis dotes inigualables de liderazgo, rápidamente tome el control de las co-

*¡Krrr-Toommm!*

2 minutos con 45 segundos después ...

Dante debía ser crucificado.

"¡Aaaahhhh!", Dante grito mientras era levantado, sus cuatro patas estaban atadas a una cruz echa de distintos materiales improvisados. "¡Dylan! ¡Dolly! ¡Dawkins! ¿¡Dónde están!?"

Dante estaba siendo levantado en una cruz en el patio de su casa mientras la lluvia caía y todos sus hermanos, vestidos con tunicas negras y sombreros puntiagudos, lo veían. Entre todos estos, Dewey, el menor de todos y el que se las había arreglado para organizar todo esto de alguna manera, era el único que vestía una túnica blanca y puntiaguda.

Dewey sabía lo que estaba asiendo, en el momento en que el primer trueno se escuchó, y asusto a muchos de sus hermanos (imcluyendolo), el sabía lo que se debía de hacerse.

Está era la única forma de detener a la malévola lluvia que seguía atacando a nuestros delicados timpanos con cada resonar esporádico de uno de los poderosos y atronadores pedos de Zeus.

"¡Da Vinci! ¡Haz algo por favor!", Dante grito, en dirección a su hermana, que seguramente siendo una de las cercana a su hermanito más esquizofrenico, sería capaz de detenerlo cuando ella quiciera.

"¡No puedo!", Da Vinci exclamó en dirección a su hermano crucificado, "Dewey solo se está expresando de manera artística. Tranquilízate Dante. Estoy segura de que nada malo te va a pasar"

"¡Algo malo me está pasando ahora mismo!", gritó Dante, sintiendo como la lluvia seguía golpeando su pelaje y empapándolo por completo.

Mientras tanto, Dewey continuaba con su plan maestro, levantando sus patas delanteras y mirando al cielo con una mirada de trance, comenzó a invocar a los dioses para detener la lluvia. Este canto su rezo en la lengua olvidada del dios Azathot. Que para todos, se escuchaba como un sonoro y ronco gruñido de garganta.

Sus hermanos dejaron escapar un colectivo "Ooohhh~", impresionados cuando su hermanito más pequeño (y algo esquizofrénico) lentamente comenzó a flotar, y procedió a hacer una sería de señas en el aire mientras un símbolo dorado se materializaba en la espalda de este.

Vida De Perro: El Renacer. (Calle 101 Dalmatas)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora