Vida De Perro: El Renacer. (Calle 101 Dalmatas)

Dewey, En La Noche Explosiva: Parte 1

Ah~

Ya-yamete kudasai, mano de algún individuo aleatorio- senpai.

Por favor, os ruego, no me juzguen voces en mi cabeza, pero, la mano de un chico rubio a logrado con éxito detener a el imbatible Dewey.

Ah~

¡YAMETE KUDASAI!

Mi barriguitaaaa ... Mi barriguita esta siendo acariciada el dia de hoy por los dedos expertos y nada menos que divinos de algún semi Dios aleatorio que decidió bajar al plano mortal para satisfacer sus deseos de la carne.

En consecuencia, algo dentro de mi, que pense que estaba muy fuertemente sellado, cuál Kyuby de nueve cola, a despertado y esta tomando poco a poco control de mis acciones.

"... Quiciera poder pertenecer a algún lado"

¡Yo-Yo puedo hacer que eso sea posible senpai-sama!

Podemos hacer las 50 sombras de Dewey cuando quieras .... Sólo-Ah~, p-por favor, n-no dejes de sobar mi barriguita.

Ay caramba, creo que el chico que me está sobando la barriguita esta deprimido.

Uh-oh.

Mis demonios están despertando de nuevo.

"Bba ba bba brrp", Llora en mi boca senpai, o mejor aun, déjame lamerte la cara mientras me sigues acariciando.

"Dewey, donde estas? Ya tenemos que regresar a casa, la noche explosiva esta a punto de iniciar"

O mi Dios, Da Vinci esta llamando por mi, y no se por que de repente la idea de que cualquiera de nuestros hermanos y hermanas me encuentre en esta pocision vulnerable e indefensa me comienza emocionar aun mas y proboca en consecuencia que mi cola se sacuda mucho mas rapido de lo que creí fuera posible.

Oh no, estoy alcanzando un nuevo nivel de rareza.

Jesús, sabía que los perros disfrutaban que les rascaran la pancita, pero-pero nunca imagine que se sintiera haci de bien.

¡Bipolaridad No Jutsu!

Huh, de repente me siento como ... muy sucio .... Cuando era humano, les daba este mismo tipo de tratamiento de rascada de pancita a numerosos perros callejeros que me encontraba siempre en mis vacaciones de verano.

Ahora tiene mucho mas sentido por que siempre se formaban grandes filas para turnarse delante mía cuando hacia ... ese tipo de cosas en los callejones.

Ahora sólo me falta averiguar si tenía o no un Sugar Dady perro en esos tiempos, eso almenos explicaría por que siempre al final de esos largos y confusos días un pastor alemán adulto con un par de geniales lentes de sol venia y me dejaba una ofrenda de algun tipo en forma de comida para perro o juguetes chillones.

Ese fue- por extremadamente y sin lugar a dudas -el año mucho mas raro y confuso de mi vida como humano, que también resulto pasar durante mis primeras vacación de verano.

Olvide mencionar que también fue doloroso, obtuve mi primer vacuna contra la rabia en esos días.

Pero ahora que lo recuerdo de nuevo, es mas doloroso ..., mucho- mucho mas doloroso ..., muy en el fondo de mi corazon pense muy enserio que esos perros callejeros, que me habían acobijado del frío de la noche subiendose encima de mi habían sido mis primeros amigos ..., pero ahora me doy cuenta ... De que nunca tuve amigos, de que sólo me estaban usando para darles rascaditas de barriga.

Malditos perros enfermos ..., en esos tiempos era sólo un niño y ellos- ellos ... Me utilizaron para darles placer.