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Mina lleva una gran relación con la amiga de su mamá, Chaeyoung, pero no la veía con ojos inocentes.
Aprovechando la salida de su madre, Chaeyoung estaría a cargo de Mina por esa noche.

— Siéntete como en casa. -Dice Mina mientras le abría la puerta a Chaeyoung para que entrara a la casa-

— Gracias Minari.. -

Chaeyoung vió un par de latas de cerveza encima de la mesa, a lo que le pareció extraño porque ella consideraba que Mina, al ser menor, no tomaría y mucho menos a escondidas de su Mamá.

— Tranquila, no son mías. -Sonríe y se acerca a Chaeyoung para abrazarla- Te he extrañado... -le da leve beso en el cuello y se aleja para dirigirse al refrigerador- ¿Gustas tomar algo?

— Agua estaría bien.

Luego de varios minutos ambas estaban comienzo fresas con crema, hablando sobre la película que acaban de reproducir, riéndose y haciendo bromas.

— Chaeyoung-ah, tienes un poco de crema ahí. -señala las comisuras de sus labios, Chaeyoung intenta limpiarse pero Mina la detiene, inclinándose para darle una lamida a aquel lugar y se separa viéndola a los ojos. En aquel momento Mina pensaba que fue un acto de estúpidez y se dejó llevar por sus impulsos, hasta que Chaeyoung se acercó a ella, dándole un beso lento. A medida que pasaban los segundos los besos tiernos e inocentes se convirtieron en unos desesperados y apasionados-

— Mina.. -jadeó al sentir los besos descender hasta su cuello-

— Vayamos a mi habitación.

La toma de las manos y caminan hasta llegar a ese lugar. Chaeyoung empujó a Mina en la cama y se puso entre sus piernas. Levantando el borde del vestido de Mina, la miraba a los ojos tratando de buscar alguna señal de arrepentimiento por lo que iba a suceder después. Trazó círculos en el clítoris de Mina sobre la ropa interior. Mina se removía inquieta ante las nuevas sensaciones que le proporcionaba Chaeyoung.

— Chaeyoung-ah... ~

Sin hacerle esperar, había metido dos dedos, Chaeyoung ronroneó de satisfacción cuando Mina comenzó a arquearse y gemir bajo sus atenciones, los sonidos lascivos eran música para sus oídos. Bombeó sus dedos aún más fuerte, curvándolos para acariciar ese punto G perfecto mientras las caderas de Mina se sacudían y se retorcían en respuesta. Su otra mano se estiró, palmeando bruscamente el pecho de Mina y pellizcando su pezón

— ¿Esto es lo que querías? -De repente, retiró sus dedos, dejando a Mina dolorida y vacía. Chaeyoung dio un paso atrás, con una sonrisa maliciosa en su rostro.—Pero no te preocupes, Minari. No te dejaré deseando por mucho tiempo. Ahora... ponte de rodillas y muéstrame cuánto quieres probarme.

Mina obedeció.  Chaeyoung echó la cabeza hacia atrás y dejó escapar un gemido bajo mientras la talentosa lengua de Mina hacía magia en su clítoris palpitante y sensible. Enredó los dedos en el cabello de Mina, guiando sus movimientos con toques firmes y exigentes. — No pares... — Sus caderas se levantaron, buscando más de esa deliciosa fricción contra su clítoris. Mientras la experiencia oral de Mina la empujaba cada vez más cerca del borde, las palabras de Chaeyoung se volvieron más entrecortadas, más urgentes, Chaeyoung soltó a Mina.

— Tengo algunos juguetes que creo que te encantarán... - Su sonrisa maliciosa lo decía todo mientras buscaba los instrumentos de sus oscuros deseos. Mina se colocó de espaldas, exponiendo aún más su cuerpo para Chaeyoung. Con un movimiento rápido y decisivo, bajó la fusta por la nalga de Mina, el fuerte chasquido de la bofetada resonó en la habitación. Repitió el movimiento, luego otro, cada golpe aterrizaba con precisión y propósito, el dolor del impacto hizo que Mina jadeara y se retorciera

— ¡Aah! - Ante el quejido de Mina, solo motivó a Chaeyoung a seguir azotando a Mina, dejando marcas rojas en su piel debido a la intensidad y fuerza en cada golpe. Sus dedos recorrieron los muslos temblorosos de Mina antes de sumergirse en su vagina goteante.

— Te daré algo incluso mejor que mis dedos luego de esto, Minari. —Con un giro vicioso de su muñeca, Chaeyoung hundió sus dedos profundamente en el calor de Mina, curvándolos para acariciar ese punto perfecto mientras la espalda de Mina se arqueaba y su cabeza se agitaba contra las almohadas, bombeó sus dedos fuerte y rápido, su pulgar frotó en círculos implacables sobre el clítoris sensible de Mina mientras la presión aumentaba y aumentaba, hasta que finalmente, Mina se rompió con un grito, sus paredes se apretó y tuvo espasmos alrededor de los dedos de Chaeyoung mientras se corría con fuerza, una fuente de fluidos brotó y las empapaba a ambas.*

—Ah, sí... Muy bien, linda. Date la vuelta. — Mientras Mina se daba la vuelta, Chaeyoung se puso entre sus piernas de nuevo y sus labios descendieron inmediatamente sobre los pliegues de Mina, su lengua se sumergió profundamente para lamer el resto de fluidos que aún brotaban del aquel agujero, introdujo su lengua dentro de Mina, bebiendo cada gota para después retirarlo y juguetear con su clítoris, succionando y mordiendo levemente, con movimientos firmes y circulares. Chaeyoung estiró su mano para pellizcar los pezones de Mina con rudeza, la estimulación dual empujó a Mina llegar al borde

— Córrete para mi. - Sus labios y lengua se movieron con desesperación frenética, escuchando cada grito y jadeo de Mina mientras que sus dedos rodeaban sus pezones, el dolor agudo se mezcló con el placer abrumador, demasiado para que Mina pudiera soportar, con una última y viciosa succión en el clítoris de Mina, Chaeyoung empujó su lengua una vez más adentro, la contraria rasguñaba y enredaba sus dedos en la cabellera de Chaeyoung, su espalda se arqueaba dando por fin espasmos, corriéndose en la boca de Chae, lamía con más desesperación bebiendo cada gota de su orgasmo.

- ¿Estás bien? - Se aparta levemente, sus labios y barbilla brillaban debido a los fluidos de Mina, llevó su mano a su rostro apartando su cabello para poder ver su cara. Y sin dudas, estaba como ella lo pensaba, las mejillas sonrojadas, los labios entreabiertos, jadeante y con rastros de revientes lagrimas debido al placer experimentado.

— N-no mires... -Mina se tapa con la almohada, apenada por su estado-

— No te pongas tímida ahora, te he visto absolutamente todo. -Dicho eso, Mina le lanzó la almohada y Chaeyoung se empezó a reír- Ya estoy cansada... ¿Vamos a dormir?

— ¿Quién dijo que habíamos terminado?



















¡Si ven algún error díganmelo! Plis ☃️💗

Spicy | Michaeng Donde viven las historias. Descúbrelo ahora