Apartamento 5-12

Capítulo 5

APARTAMENTO 5-12

Hola, hola

Disclaimer 2: Tampoco tengo los derechos de la canción sólo me baso en su letra, pero adaptándola para dar rienda suelta a mis locas ideas.

Gracias a todas y todos los que votaron, dejaron un comentario y agregaron mi historia a sus listas no saben lo feliz que me hacen.

Espero siga siendo de su agrado.

Comencemos.

Capítulo 5:

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POV Kagome

Estábamos descansando en casa después de una jornada ardua en la oficina. Sango había preparado palomitas de maíz y algo de beber para ver una película en una plataforma de streaming.

Después de dar vueltas por el catálogo por un buen rato viendo el sinfín de opciones que había; nos decidimos por una, era una comedia romántica llena de clichés, pero bastante entretenida. Cuando terminó la película nos pusimos a conversar.

Oye Kag, el romance en esta película me hizo pensar en algo o más bien en alguien ¿has visto a InuYasha? - preguntó Sango alzando las cejas y tomándome por sorpresa.

No, ahora que lo dices, no lo veo desde hace algunos días. Pensé que al saber dónde vivíamos los dos podría verlo todos los días, pero no ha sido así - suspiré algo triste.

Ni yo he visto a Miroku - mencionó mi amiga también algo pensativa - y es que hemos tenido que salir muy tan temprano de casa - recordó Sango.

Tienes razón, estuvimos muy ocupadas con ese proyecto. Pero me gustaría ver a InuYasha - hice una mueca triste.

Y no mentía, quería ver una vez más esos hermosos ojos dorados como el sol y escuchar esa voz profunda, que de solo recordar hacia que se me erizarán los vellos de la piel.

¿Y si haces lo que Miroku sugirió? - dijo Sango con una sonrisa.

¿A qué te refieres? - pregunté sin entender.

Si, porque no vas a ese apartamento y les pides una poco de azúcar para tu café - sugirió mi amiga guiñando un ojo.

Ese es un pretexto muy tonto, y lo sabes - repliqué su gran plan.

Así es, pero es la única forma en que podrías volver a verlo sin que se de cuenta que babeas por el desde que llegamos a vivir aquí - continuó defendiendo su plan.

Estaba analizando su estrategia para que me acercara a InuYasha sin verme tan desesperada, cuando algo se me ocurrió.

¿Y por qué no lo haces tú? - traté de voltear la situación.

¿De qué hablas? - cuestionó Sango.

Si, ¿por qué no vas tú y le pides a Miroku la taza, como él te dijo? - respondí - crees que no me di cuenta las miradas que se hacían el otro día. Me extraña que después de comerse con los ojos no hubiera venido esa misma tarde - le hice ver que me di cuenta de la atracción de ambos ese día.