Capitulo 6

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"La tentación hace pecar"

Gina pago y luego me llevo de compras.

Entramos a una que otra tienda en busca de vestidos de noche y zapatos los cuales nos gustarán. Si Gina tenía planeado sacarme a algún lugar está noche. Según ella para distraerme y sacarme todas las ideas de mi cabeza.

- ¡Mira Emily! - quite la mirada de mi móvil para mirar lo que estaba señalando - Ese vestido rojo, es hermoso

- Si es bonito

- Pienso que te quedaría muy bien con tu cabello, prueba telo

Me miró con una sonrisa, me acerque a verlo y mire el precio, casi me desmayo ahí mismo.

- Cuesta más que un ojo de la cara Gina - miro el precio - No pienso comprarlo

- Ya te dije que yo pago, aparte son unos cuantos numeritos de más

La mire no muy convencida.

- No creo que sea necesario

- Yo creo que sí - volteo a mirar a la chica que estaba acomodando unas cosas - Disculpa, puedes ayudar a mi amiga con ese vestido

- Acompáñame señorita

Me dijo y mire a Gina, quien me dió una sonrisa animándome. Seguí a la chica que me llevo a los vestidos y me pidió que esperara un momento. Luego de un rato volvió con el vestido rojo y me ayudó a colocarme lo. Mire mi silueta en el espejo y me encantaba con me quedaba el vestido, empezando por el color que resaltaba en mi figura.

Salí del vestidor en busca de Gina, la encontré en un sofá revisando una revista. Cuando notó mi presencia levantó la mirada y miro por un momento e hizo una sonrisa de satisfacción al verme.

- ¡Nos lo llevamos definitivamente! - la chica sobresaltó en su lugar al escuchar a Gina

- ¿Efectivo o tarjeta?

- Tarjeta linda - le dió la tarjeta a la chica y se retiró - Déjate el vestido, pasamos por mi casa, me cambio y nos vamos a divertir

- Está bien

Abrió los ojos un poco más de lo normal por mi respuesta.

- ¿No hay peros?

- No, me va hacer bien tomarme una que otra copa, aparte estoy soltera y sin compromiso

- Eso me sonó a qué volvió la Emily de antes

- Mi mejor versión diría yo

Hice un guiñó.

La chica, después de un rato volvió y le entrego la tarjeta a Gina, agradecimos y salimos del lugar. Llegamos al estacionamiento buscando el coche de Gina, al encontrarlo, subimos y nos dirigimos a casa de mi amiga para que se cambie.

Al llegar a su casa, entramos en su habitación.

- Mira me compré estos dos vestidos de una diseñadora muy reconocida - me mostró los dos vestidos - ¿Cuál crees que me quedaría mejor?

- El negro me gusta más

- Perfecto, ahorita vuelvo

Me senté en la cama de sábanas celestes y dejé salir un suspiro. Mi móvil empezó a sonar y lo saqué de mi cartera. Revise el número y no lo tenía agregado en mis contactos. Que raro. Conteste por instinto.

- ¿Hola?

- Al fin contestas Emily, estado como loco intentando de contactarte

- Eres tu - lo dije con un tono no muy agradable - ¡Acaso no entiendes que si evito tus llamadas o mensajes, es por qué no quiero hablar contigo!

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