Capítulo 4

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-¿Rin Obami quiere verme?.

Lilith deja la taza de té en la mesa.

Ibara, Maiko y ella se habían una vez más en el jardín, siendo esta la sexta vez.

Y el día de hoy Ibara había pedido un gran favor, traer a su hermano.

-S-si, simplemente haremos lo de siempre, no tiene que ver nada con nuestra familia.

Maiko quien también estaba presente intercambia miradas con ella, ambas confundidas.

Maiko decide ir al baño para dejar un momento a solas entre ellos. No conocía como funcionaban las cosas de la familia materna de Lilith, solo que a simple vista eran complicadas más allá de su comprensión.

Ibara estaba algo nervioso desde el principio, su padre había dejado claro la importancia que este lugar tenía para su líder.

No estaba seguro de que Lilith aceptaría su petición, corría el riesgo de que se lo tomara mal y que nunca regresara a este lugar, pero tampoco podía ignorar la petición que su hermano le había hecho antes de venir.

–...De acuerdo, no hay ningún problema Ibara la próxima vez puedes venir con el– Dijo Lilith con una sonrisa dulce mientras tomaba la mano de Ibara lo que lo tranquilizó.

El realmente no quería perder su amistad.

Aunque una pregunta resonaba en la mente de Lilith.

¿Qué quería Rin Obami?

[...]

Rin... ¿En qué radica la esencia de cualquier estafa?

–En el sentimiento subjetivo, si alguien no piensa que está siendo estafado nunca serás culpado, sin importar que tan cruel sea la operación. Pero si tu compañero piensa que es una estafa, pagarás por ello, por muy honesto que seas; La esencia de cualquier buena estafa está en asegurarse que la víctima no se sienta engañada.

¿Existe algo como una estafa infalible?

–No, no puede existir, al final solo somos simples mentirosos y las mentiras siempres salen a la luz.

Si como aquella garza que pronunció una mentira para engañar al cuervo, lo cual logro su objetivo pero el pequeño cuervo fue consiente que era una estafa...

–Entonces no se le puede llamar estafa y ya no estaría en los dominios de los Obami.

Las manchas de las garzas cubrial al pequeño, apesar de la suciedad el joven Rin el sigue conservando la sonrisa, una sonrisa falsa.

Solo esperaba que todo esto termine para ir con su hermano.

[Unos días después]

El sol de la tarde brillaba sobre las flores y los árboles, creando un ambiente sereno. Ibara y Rin se dirigieron al jardín principal de la familia Kishabami y entraron en el tranquilo lugar encontrandose con Lilith y Maiko sentadas en la mesa de siempre.

Maiko con una sonrisa los saluda enérgicamente, invitándolos a la mesa para comenzar las tardes de juegos que hacen cada vez que se juntan.

Tiempo después Lilith se aleja un momento del grupo, mientras Maiko e Ibara se reían y jugaban, Rin se acercó a donde estaba Lilith que se balanceaba suavemente en un columpio colgado de las ramas de un árbol de Sakura.

Lilith alzó la vista y esbozó una suave sonrisa al ver a Rin acercarse

–Hola– Dijo con voz tranquila, deteniendo el columpio con un ligero empujón –Supongo que quieres hablar de algo– Agregó con una mirada inquisitiva sin borrar su sonrisa.

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⏰ Última actualización: Aug 25 ⏰

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𝐀𝐍𝐎𝐓𝐇𝐄𝐑 𝐏𝐀𝐒𝐓: 𝐊𝐀𝐊𝐄𝐆𝐔𝐑𝐔𝐈Donde viven las historias. Descúbrelo ahora