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En alguna parte del universo 11, en una de las múltiples bases de las tropas del orgullo... Todo parecía un día normal en oficina, Cocotte, una de las conformantes de las Tropas del Orgullo se encontraba haciendo inspección cuando de pronto y porrazo, como si lo hubieran teletransportado... Apareció un chico humano ahí. No cruzaba de los 10 años y era de pelo y ojos negros, con una camiseta oriental blanca y pantalones verdes. El chico se veía bastante inquieto por algo y lo primero que hizo Cocotte fue apuntar mientras había empezado a sonar estruendosamente las alarmas de intruso del lugar.

El chico levanto sus manos lentamente hacia arriba en señal de rendición y con ello solo pregunto una cosa.

— ¿Dónde estoy?

Cocotte solo le pondría las manos en la espalda al jovencito de pelo negro y esta respondió un poco molesta.

—Estas en una de las bases de las Tropas del Orgullo.

Unas horas después...

Nos encontramos al muchacho pelinegro dentro de una sala de interrogatorios esperando bastante pacientemente aunque también se le notaba nervioso mientras que afuera estaban junto con Cocotte dos sujetos bastante curiosos, uno era un poco regordete y de grandes manos con bigote gris mientras que el otro era gris de ojos completamente negros y corpulento, ambos con el mismo traje de las Tropas del Orgullo. Estos dos eran tanto Toppo como Jiren.

—Así que ese es el muchacho que ha aparecido de la nada dentro de la base. — hablo Jiren cruzado de brazos.

—Así es... No sé cómo ha aparecido pero... Me da la sensación de que algo normal en ese muchacho no es— hablo Cocotte pensativa.

—Parece un humano normal como Carseralle— comento Toppo.

—Pero, y tiene razón Cocotte, por su nivel de poder no es un humano, y menos es un humano modificado como lo es Carseralle. — apunto Jiren analizando al chico.

Toppo también se pondría pensativo por unos segundos y este hablaría.

—Creo que sería mejor que lo interroguemos, me encargare yo. Se me da mejor tratar con niños.

Con esto el miembro de las Tropas del Orgullo entraría a la sala de interrogatorio y se pondría enfrente del pelinegro. Noto en el muchacho lo primero de todo fue... Melancolía por algo, se le palpaba mucho al muchacho al verlo.

—Sabemos que es raro que te hayamos encerrado aquí, pero tu presencia tan directa en una base tan protegida como esta es muy rara. — comento Toppo con cierta calma pero con seriedad a la vez.

—No, si os entiendo por qué habéis hecho esto, yo tampoco sé cómo he llegado. Bueno, sí sé cómo he llegado pero ha sido muy por casualidad — comento el pelinegro con cierta calma pero notándose esa tristeza en su mirada.

Toppo mostraría un gesto confuso ante aquello y le cuestionaría.

— ¿A qué te refieres muchacho?

El chico de pelo negro solo suspiraría y le contestaría a Toppo.

—Creo que no estoy en mi universo original.

Toppo cuando escucho esto abriría los ojos de par en par y le cuestionaría.

— ¿Cómo sé que no me estas mintiendo?

—Porque yo soy un mitad saiyajin.

El chico levantaría su mirada y en eso se empezaría a notar que ráfagas de aire se empezaron a remolinar alrededor y el integrante de las Tropas del Orgullo noto que empezó a desprender bastante poder, no un nivel muy sorprendente para lo que Toppo tenía, pero sí bastante para con ello ver a los ojos al muchacho y jurar haber visto que los ojos del muchacho habían pasado a turquesas mientras su cabello empezaba a verse que quería volverse rubio.

El guerrero del Orgullo (Gohan Traicionado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora