capitulo 6

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Santos

Llegué a la hacienda le di rosas a la tía Cecilia, lucía, Hera, Bárbara,

Traía un ramo para Alma

-Tia y Alma dónde andan

-santos Alma- dice un poco nerviosa

-Alma que tía

-Alma se fue de viaje-dice la tía Cecilia ya bastante nerviosa

-Queeeee como que se fue sin decirme nada, te dijo a dónde se hiba- le pregunto a la tía Cecilia

-No mi niño no me dijo nada sólo se fue- me responde la tía Cecilia

Yo solo niego con la cabeza y me voy a mi despacho

Dos días después

Alma ya está en la playa feliz de la vida recibió algunos mensajes de su padre que ignoro todo lo que le escribio. Su abuela también le escribió solo respondio no sabe nada que ella no está en Altamira

 Su abuela también le escribió solo respondio no sabe nada que ella no está en Altamira

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Dos semanas después

En el Arauca
Altamira

Ya doña Asunción había llegado de España se encontró con la noticia de que su nieta estaba de viaje algo que la molestó bastante ya que alma le decía que se encontraba en Altamira cosa que era mentira.

En el aeropuerto

Alma está bajando del avión. Sale del aeropuerto y se encamina para la fábrica de su padre. Estado hay pregunto a la secretaria si su papá está hay. La secretaria le dijo que si que estaba en su oficina. Se encamino para la oficina de su papá. No tocó la puerta solo entro y no le importo si su papá estaba ocupado. Entro y lo vio sentado en su escritorio

-papito lindo-le dice mientras que lo abraza

-mi chiquita-dice santos correspondiendo al abrazo de su hija

-ya te vas para la casa- dice todavía abrazando a su papá

-

Dentro de un rato mi princesa- dice santos

-te espero para que nos veamos juntos- dice Alma

-ok mi princesa termino con estos papeles y nos vamos. Siéntate en esa silla- dice Santos señalando la silla que tiene en frente del escritorio

Alma se sentó y se puso a jugar con su teléfono. Un rato más tarde santos ya había terminado y ya se hiba alma se levantó y se fueron rumbo a la camioneta. Santos se sentó en el lado del conductor y Alma en el lado del copiloto. Santos encendió el motor y se fueron hacia Altamira...

la verdad de Doña Bárbara Donde viven las historias. Descúbrelo ahora