En el momento en que scott abrió la puerta, sintió que no entraba a una sala de estudio sino a algo mucho más amplio. Sintió una brisa fresca. Esto era tan grato que avanzo sin pensar, y la puerta se cerro de golpe tras el, sobresaltando, buscó a tientas el apagador. No había ninguno. De hecho, no había pared, ni puerta.
Parpadeando, scott dio una vuelta completa. estaba, según todas las apariencias, en una pradera, en la oscuridad. en el cielo colgaba una media luna. por costumbre, trato de encontrar a orión entre las estrellas, pero no pudo. tampoco había rastro de casiopea, ni de la osas. desconcertado Incluso un poco alarmado, dio otra vuelta. sacudió la cabeza, aturdio. tenía que haber una explicación. tal vez había sufrido alguna Laguna mental entre el instante En qué entró a la sala y este momento. pero eso no explicaba lo de las estrellas. el único modo de que fuera diferente era si, de alguna forma, hubiera ido a parar al hemisferio sur. algo muy imposible. traía puesta la misma ropa y seguía cargando su mochila.
miró su reloj. marcaba las 4: 47 había llegado a la biblioteca acerca de las 4 :30 presionó el botón de la fecha: mayo 9 .la misma fecha tenía que haber alguna explicación
