Yo, Draugr

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"Ni siquiera puedo acercarme a comprender cómo se creó algo como esto", reflexiona Farengar mientras examina la máscara del Sacerdote Dragón en la mesa entre nosotros.

Sus ojos estaban llenos de asombro e intriga mientras lo miraba fijamente, como se esperaba de un mago hambriento de conocimiento.

—Bueno, esto no lo hizo un humano, por supuesto —señalé, atrayendo su mirada hacia mí—. Los Sacerdotes Dragón recibieron estas máscaras de sus Dragones, quienes son sus creadores. —La tomé en mis manos, la hice girar un poco y la dirigí en cierta dirección—. De hecho, al mirarla de esta manera, puedes ver que se parece a una escama.

Los ojos de Farengar se abren aún más ante mis palabras: "¿Un artefacto encantado hecho por un dragón?". Susurra con asombro y estupefacción: "¿Es eso siquiera posible?".

Me encojo de hombros. "Nadie ha dicho nunca que el Thu'um sólo pueda utilizarse de forma ofensiva", señalo, haciendo que Farengar se incline hacia atrás y se lleve la barbilla a la boca mientras piensa. "Incluso he empezado a mezclarlo con mis hechizos. Al utilizar una Palabra de poder que se ajuste al hechizo, el poder aumenta enormemente".

El mago de la corte entrecierra los ojos mientras piensa: "Eso... Eso me suena familiar". Sus palabras me hacen detenerme. "En mi época en el colegio, se decían en voz baja... Leyendas, podríamos decir".

"Se dice que uno de los Archimagos anteriores que presidían el Colegio había llegado a un contrato con un Dragón".

"El Archimago le enseñó Magia al Dragón, y el Archimago a su vez le enseñó Thu'um al Dragón... No sé si es verdad, pero si puedes lograr mezclar verdaderamente Thu'um con Magia, entonces debe haber un mínimo de verdad en esa historia".

Así que no es algo exclusivo mío, es algo que yo mismo creé de repente, simplemente por un pensamiento aleatorio.

Por supuesto que habría un mago lo suficientemente loco como para intentar hacer lo mismo en el pasado, pero pocos se atreverían a recorrer ese camino.

Después de todo, la magia requiere mucha concentración. Décadas de concentración y estudio y entrenamiento constantes... Y lo mismo ocurre con los Thu'um. Solo una especie muy longeva se atrevería a recorrer ambos caminos a la vez y luego intentar fusionarlos.

"Tendré que incursionar en el encantamiento y ver qué se puede hacer con el Thu'um mezclado", reflexiono en voz alta mientras hago girar la máscara en mi mano, mi capucha y mi casco de cuero son más que suficientes para ocultar mi rostro de no-muerto del mago de la Corte.

Me pregunto si siquiera están empezando a sospechar algo… Pero bueno.

"De cualquier manera…" comienzo mientras me pongo la máscara, "dudo que hayas venido aquí a hablar sobre este Artefacto".

Farengar hace una pausa, asiente y se endereza. "Claro, claro. Disculpas, me distraigo con cosas fascinantes con demasiada facilidad". Como se esperaba de un mago.

—Vine aquí por dos cosas. Una es una disculpa, la otra es una petición. —Inclino la cabeza y le hago un gesto para que siga—. El Jarl envía sus disculpas por lo que sucedió hoy, con la mujer que el Sangre de Dragón envió volando por la calle.

No pude evitar soltar una carcajada. Aurelia se toma muy en serio el momento de los abrazos, al parecer. Era tan condenadamente linda . "Fue bastante divertido, no te preocupes".

Farengar suelta un bufido y dice: "Te lo creo". Sacudiendo la cabeza y riendo, continúa: "De cualquier manera, el Jarl te envía sus disculpas por eso. Sabíamos que ella habría intentado acercarse a ti y teníamos guardias siguiéndola, pero los esquivó antes de venir aquí".