Better than revange

Secuela

Estrellitaaaaaas, últimamente muchos han estado leyendo la historia y comentando aún cuando ha pasado tiempo y el Stony no está en su mejor momento así que, antes que nada, debo darles las gracias y segundo, bueno, pensé la historia y he decidió darle continuación, les dejo un pedacito de lo que se viene, por ahora solo lo voy a publicar en Facebook, para quienes no lo sepan, esta historia comenzó en allá así que es apropiado que la secuela también se publique en el mismo sitio y una vez terminada la subiré aquí.

Recuerden, la página es Hail Multishipper, sin más, les dejo un pedacito de lo que será y nos vemos en Facebook.

MisStoner

-¡Papá!- Morgan corrió a los brazos de Steve quien sonrió y la abrazó contra si.

-Hola mi princesa, ¿cómo te portaste hoy?

-Terminé de leer el libro que me trajiste- se apresurarnos contestar la niña

-¿Y...?- Steve conocía ese comportamiento, lo había visto hace años, cuando los trillizos hacían alguna travesura se escudaban en sus obligaciones académicas, que tuvieran el cerebro de Tony los hacía desviar la atención.

-¡Cory tuvo la culpa!- chilló la niña- me distrajo y entonces todo explotó

-¿Qué hiciste?

-Quería hacer algo para que el mapache qué siempre se mete a mi cuarto dejara de hacerlo pero creo que hice mal mis cálculos y parte de mi habitación se quemó

Steve sabía que los génes de Ransom estaban contaminados, los trillizos eran prueba de ello, sabía por rumores que ahora eran los líderes de la organización a la que la gente ya no temía, sino que respetaban, pero Steve sabía la verdad, Hydra era solo un asesino que había lavado la mente de su familia pero no dejaría que Morgan pasara por lo mismo, él haría de la pequeña una persona de bien, digna hija del capitán América.

-Morgan Rogers, has sido una niña mala, sabes que en esta casa no se daña a nadie sin hacer nada malo y mucho menos de usa tecnología- para este punto, la niña ya temblaba, si bien su papá era muy tierno con ella, daba verdadero miedo cuando se enojaba- te quedas sin comer hoy y mañana te quiero ver al amanecer para tu castigo.

-Si, papi, perdón.

Steve se arrodilló frente a la niña y limpió las lágrimas que mojaban la carita.

-Hago esto por tu bien, cariño, tienes que ser buena, promete que jamás volverás a usar tecnología.

-Lo prometo

-Bien, recuerda que nadie quiere a las niñas malas.

-¿pero todavía me quieres verdad? ¡seré buena!

-Si cumples con tu castigo, te voy a querer.